Vicky Dávila y su propuesta del '10-10-10'
Vicky Dávila y su propuesta del '10-10-10' | Foto: SEMANA

NACIÓN

Conozca en qué consiste el 10-10-10 de Vicky Dávila. “Los gobiernos derrochones no sirven”. Editorial en video

La directora de SEMANA publicó su más reciente editorial, en el que se refirió a la economía del país.

Redacción Semana
15 de mayo de 2024

La directora de SEMANA, Vicky Dávila, reaccionó a las cifras del DANE que muestran un preocupante estancamiento de la economía.

En un editorial, Dávila señaló: “Las cifras reportadas por el DANE hoy muestran una tendencia preocupante. El crecimiento del PIB (0,7 %), que fue bajo, increíblemente, se debe al desbordado gasto público. De lo contrario, habría sido nulo. Sectores como el comercio, las manufacturas y gran parte del aparato productivo privado están en caída libre”.

Dávila agregó: “Los socialistas, adalides de la moral, asfixian a las empresas y a los trabajadores con impuestos, porque creen que el Gobierno tiene que “manejar” los recursos de quienes trabajan y producen. ¡Cómo se equivocan! Esto nos ha llevado a una crisis económica y de corrupción que es más que una plaga. Algunos políticos y sus amigos ricos, contratistas sin moral y sin ética, solo llenos de ambición, no hacen más sino robarles a los colombianos. Necesitamos que la gente vuelva a confiar. Que los colombianos puedan volver a soñar. Por ejemplo, ante la realidad de pobreza en el país, es el momento de simplificar el sistema tributario. Hay que incentivar la inversión, el emprendimiento y el buen empleo”.

La directora de SEMANA señaló: “¿Qué tal un 10-10-10? 10 % de IVA, 10 % de impuesto de renta a las empresas y 10 % de impuesto a las personas. Sin exenciones ni gabelas para nadie. Algunos poderosos se han acostumbrado a tener sistemas tributarios a su medida, a costa de las pequeñas y medianas empresas y de los trabajadores. El que evada impuestos va a la cárcel, como en cualquier país civilizado. Hagan las cuentas y verán que les da y hasta sobran recursos. Hay que disminuir la burocracia estatal a su mínima expresión y declararle la guerra de verdad a la corrupción para acabarla. A cambio, la plata tiene que utilizarse para invertir, crecer, desarrollar el mejor talento y ayudar a los más necesitados. Colombia tiene que volver a soñar. Colombia necesita confianza”.