Contraloría de Bogotá estableció hallazgo fiscal por $1.418 millones en las obras del Bronx Distrito Creativo por pagos inconsistentes

Antes del 28 de mayo de 2016, caminar tranquilamente por el Bronx, en Los Mártires, en el centro de Bogotá, era imposible. Era una zona vedada donde prevalecían problemas como drogadicción, prostitución, extorsión, torturas, insalubridad y habitabilidad en calle. Hoy el panorama es muy diferente.

Desde que la Alcaldía de Enrique Peñalosa intervino la zona en un operativo con más de 2.500 efectivos, se ha venido trabajando por la renovación completa de este lugar y establecer allí el Bronx Distrito Creativo. El objetivo de esta intervención es establecer un espacio dedicado al desarrollo de la creatividad y el emprendimiento asociado al potencial cultural.

En la administración Peñalosa se inició la compra de predios para revitalizar esta histórica zona de la ciudad. Al territorio del antiguo Bronx se adicionaron tres nuevos espacios: la antigua Facultad de Medicina de la Universidad Nacional, donde tiempo después funcionó el Batallón de Reclutamiento; La Milla, el espacio contiguo al Batallón, y La Flauta, que en sus inicios fue el Laboratorio de Minas del Gobierno nacional.

Así mismo, se decidió que en los predios demolidos se levantaría la nueva sede de la Alcaldía Local de Los Mártires y el Centro de Talento Creativo Multicampus, con énfasis en las industrias culturales.

La Fundación Gilberto Álzate Avendaño (Fuga), entidad adscrita a la Secretaría de Cultura, es la encargada de liderar el proyecto del Bronx Distrito Creativo, el cual hace parte del Plan Parcial Voto Nacional-La Estanzuela. Todo el proyecto cuenta con el apoyo de la Empresa de Renovación y Desarrollo Urbano de Bogotá (RenoBo), anteriormente ERU.

Para sacar adelante el proyecto del Bronx Distrito Creativo, la Fuga y la ERU (hoy RenoBo) firmaron el convenio interadministrativo 72 de 2019. SEMANA conoció los resultados de una reciente auditoría de la Contraloría de Bogotá, a la Fuga y al convenio, en la que se estableció un hallazgo administrativo con presunta incidencia disciplinaria y fiscal en cuantía de 1.418 millones de pesos.

De acuerdo con el órgano de control, el hallazgo fiscal obedece al pago de servicios por parte de Fuga a la ERU, por concepto de gestión predial, estructuración y formulación del proyecto.

Del seguimiento realizado por el equipo auditor a la inversión de los recursos entregados a la ERU, se evidenció el cobro de servicios por parte de la Empresa de Renovación Urbana a la Fuga por concepto de “prestación de servicios de gestión predial de la ERU que corresponde a la remuneración de la entidad por los gastos en los que incurre para la estructuración y formulación del proyecto” en cuantía de los 1.418 millones.

Ese cobro de la ERU a la Fuga se hizo por medio de una factura electrónica en mayo de 2021, es decir, durante la administración de Claudia López.

Ahora bien, de acuerdo con la Contraloría, el hallazgo fiscal obedece a que, según el concepto del equipo auditor, no existía justificación alguna para que la ERU, hoy RenoBo, cobrara a la Fuga por servicios que, según el acuerdo de voluntades, constituían el aporte que la Empresa de Renovación Urbana realizaba para la ejecución del proyecto Bronx Distrito Creativo.

Aún más inconsistente para la Contraloría es que inicialmente dicho aporte se haya tasado en la suma de 301.485.856 pesos y que posteriormente se cobre por el mismo concepto más de 1.418 millones de pesos.

SEMANA buscó al exgerente de la ERU, Juan Guillermo Jiménez, y a la exdirectora de la Fuga Margarita Díaz, para preguntarles el por qué se autorizó el pago de esa factura por más de 1.418 millones a pesar de que ese cobro carecía de fundamento jurídico, según la alerta de la Contraloría, pero ambos exfuncionarios afirmaron que si bien la cancelación de la factura se hizo en el 2021, obedeció a gestiones realizadas en un convenio firmado en 2019 en la alcaldía de Peñalosa.

Otro de los hallazgos de la Contraloría es por más de 30 millones de pesos, toda vez que en el proceso de gestión predial se registró más de un cobro para la misma persona por concepto de lucro cesante y daño emergente, cuando la norma solo permite un pago por persona.

Responde la Fuga

Blanca Andrea Sánchez, directora de la Fuga, bajo la administración del alcalde Carlos Fernando Galán, si bien asegura ser respetuosa de los órganos de control, se mostró en desacuerdo con los hallazgos fiscales establecidos por la Contraloría de Bogotá y explicó qué sucedió con los millonarios recursos.

“La ERU era la encargada de hacer la gestión predial de una zona que tenía más de 47 predios multifamiliares. No estamos hablando de una casita donde vivía una sola familia. Estamos hablando de un compendio de predios en donde algunos estaban abandonados, pero había otros que podían tener hasta diez apartamentos en un solo lugar”, aseguró Sánchez. De acuerdo con la funcionaria, la gestión de la ERU se multiplicó, al tener que buscar los dueños de los predios que estaban abandonados.

“Tenía que ubicarlos, hacerles la oferta de la compra del bien, y si esto llegaba a feliz término, hacer la compra, hacer la titulación, el registro y notariado. Y para hacer todo esto, ¿qué se necesita?: trabajadores sociales que abordan a las personas. La gestión predial se hace con arquitectos y con ingenieros. Además, se necesita de todo un trabajo interdisciplinario que se encarga de hacer la evaluación y la indemnización”.

Sánchez subrayó que la gestión predial no es solamente comprar el inmueble, sino también reubicar a las personas y a los negocios que estén en el lugar, además de indemnizarlos. “Sería absolutamente incongruente que uno creyera que hay una entidad que tiene un músculo financiero para pagar todo ese tipo de cosas. Y como el proyecto fue concebido en la Fuga, pero fue la ERU la que hizo toda la gestión predial, por eso los recursos se trasladaron a la Empresa de Renovación Urbana”, enfatizó Sánchez.

En otras palabras, de acuerdo con Sánchez, el pago por más de 1.418 millones no significó un cobro de utilidad por parte de la ERU, sino que obedeció a la destinación de recursos para la gestión predial. En todo caso, la Contraloría no atendió los argumentos de la Fuga y estableció el millonario hallazgo fiscal. Tras conocerse el informe final de la auditoría, la Fuga adelantó, con el órgano de control, una mesa técnica para ampliar las explicaciones, y de allí salió un alcance al informe, pero este ya no puede ser avalado ni revisado por el equipo auditor.

Será la Dirección de Responsabilidad Fiscal de la Contraloría de Bogotá la que tenga la última palabra en estos hallazgos.

De momento, las obras del Bronx Distrito Creativo presentan un avance de más del 70 por ciento, a pesar de que esta administración recibió el proyecto de manos de Claudia López desfinanciado en más de 40.000 millones de pesos y con una ejecución de tan solo el 13 por ciento.