POLÍTICA
Denuncian ‘jugadita’ en el Senado para evitar que los congresistas se bajen el salario, ¿qué pasó?
Actualmente los senadores y representantes a la Cámara devengan cerca de 35 millones de pesos al mes.
La Plenaria del Senado aprobó en segundo debate uno de los proyectos de ley que busca reducir el salario de los congresistas, lo que significa una buena noticia para aquellos que les han pedido al Congreso dar señales de equidad frente a la situación de millones de colombianos.
Actualmente, con el aumento decretado el pasado 4 de agosto por el saliente gobierno de Iván Duque, los senadores y representantes quedaron ganando cerca de 35 millones de pesos, es decir, 35 salarios mínimos a precios de hoy.
El proyecto, de autoría del Centro Democrático y aprobado en el Senado la noche de este martes, buscaba inicialmente poner un impuesto del 20% al salario de los congresistas hasta 2026 y a partir de ese año bajar la remuneración a máximo 25 salarios mínimos.
Sin embargo, en medio de la discusión fue introducida una modificación que fue considerada como una ‘jugadita’ para evitar que los parlamentarios se bajen el sueldo.
La modificación, propuesta por la senadora de Angélica Lozano, señala que ya no habrá que esperar hasta 2026 para que la remuneración de los congresistas baje a 25 salarios mínimos, sino que esto se aplique de manera inmediata, es decir, desde julio de 2023 que es cuando se tiene previsto que este proyecto culmine su trámite.
Este cambio, que finalmente fue aprobado, si bien resulta llamativo para la galería podría resultar problemático, pues abre la puerta a que pueda caerse en la revisión que debe hacer la Corte Constitucional por afectar los derechos adquiridos de los actuales congresistas.
Es decir cualquier parlamentario que se sienta perjudicado podría ir al alto tribunal a demandar la norma y la Corte le podría dar la razón, debido a que cuando se hizo elegir su salario era superior, por lo que le estarían cambiando las reglas de juego en medio del partido.
Adicionalmente, con la aplicación inmediata, se abre la puerta también para que los congresistas en los próximos debates se declaren impedidos para no incurrir en conflicto de interés.
Por ejemplo, si un congresista vota de manera negativa el proyecto que reduce su salario, de inmediato entraría en conflicto de interés, pues estaría buscando beneficio al no permitir que se disminuya su ingreso mensual.
“La trampa de Angélica Lozano y el Pacto Histórico a los colombianos. Incluyeron una proposición para hacer inconstitucional el proyecto que pretende reducir los salarios a los congresistas y altos funcionarios de autoría del Centro Democrático”, señaló el senador del Centro Democrático Miguel Uribe Turbay.
En el mismo sentido se pronunció la senadora Paloma Valencia, quien aseguró que “el Pacto Histórico incumple el acuerdo que habíamos hecho de votar el impuesto sobre los salarios de congresistas para lograr la reducción. Ponen un límite inmediato que será declarado inconstitucional”.
En defensa de su propuesta, la senadora Angélica Lozano respondió que la reducción “deber ser inmediata”.
“La plenaria del Senado, en segundo debate, aprobó la reducción inmediata del salario de los congresistas. El texto es el mismo de la consulta anticorrupción que votaron 11,7 millones de personas”, explicó Lozano.
Por tratarse de un acto legislativo, la iniciativa deberá superar ocho debates en total, pero para evitar su hundimiento antes de diciembre tendrán que haber sido aprobadas mínimo cuatro discusiones para que el año entrante pueda seguir el trámite legislativo.
Si bien se han hecho varios intentos por reducir el salario de los congresistas, esta propuesta se enfrenta a la falta de voluntad que históricamente han tenido los parlamentarios, pero también a las complejidades jurídicas que implica esta discusión.
Si hay algo que quedó muy bien ‘amarrado’ en Colombia, desde la misma Constitución Política, fue el salario de los congresistas. El aumento anual es una obligación que establece el artículo 187 de la Carta Política.