Movilidad
Desde el Concejo lanzan SOS por TransMilenio: en junio podría dejar de funcionar
El déficit de TransMielenio asciende a $2,9 billones para este 2023, y urge que el Gobierno nacional gire $1,3 billones.
La crítica situación financiera de TransMilenio tiene nuevamente en alerta a Bogotá, pues de no superarse el gran hueco fiscal que tiene el sistema, existe la preocupante posibilidad de que en junio próximo el sistema de transporte masivo en la capital del país se paralice por completo.
El riesgo latente de parálisis del sistema de TransMilenio en Bogotá es por cuenta del grave déficit financiero que compromete hoy la viabilidad en la operación y que asciende a los $2.9 billones para el año 2023. Así lo alerta el concejal del Centro Democrático, Óscar Ramírez Vahos.
Frente a este déficit, Ramírez Vahos señaló que el Gobierno Nacional debe girar $1.38 billones para el Fondo de Estabilización Tarifaria; de no girarse estos recursos por parte del Gobierno, la operación de TransMilenio quedaría en veremos desde junio de este año.
“Vemos con honda preocupación que hoy no haya claridad sobre estos recursos para paliar el déficit. El Gobierno Nacional puede y debe extender la cofinanciación del Sistema. De lo contrario, el dinero para operar TransMilenio solo alcanzaría hasta junio de este año. ¿Qué sucederá con la operación del Sistema? Millones de usuarios no pueden quedar en el limbo”, manifestó el concejal.
“Nuestro llamado al Gobierno Nacional es que se apruebe el artículo 144 del Proyecto del Plan Nacional de Desarrollo, donde se estipula que el Gobierno puede apoyar la sostenibilidad de los sistemas de transporte público en operación. Este sería el salvavidas que TransMilenio necesita. También es vital habilitar la cofinanciación del gobierno nacional a la nueva flota ya adquirida, sobre todo cuando la ciudad necesita apoyo en su migración hacia buses eléctricos”, enfatizó Vahos.
El concejal también anotó que, de seguir las cosas como van en materia de déficit y costos, el pasaje de TransMilenio para el año 2024 podría ascender a 3.100 pesos.
“Según Red Simus, se estima que para América Latina las familias de menos ingresos solo deberían destinar el 10% de dichos ingresos para gastos en transporte. Actualmente, en Bogotá las familias de estratos 1 y 2 destinan hasta el 25% de sus ingresos en pasajes de TransMilenio y el SITP. No solo se debe revisar a fondo el déficit del Sistema, sino también dar un gran debate sobre las tarifas de TransMilenio”, puntualizó el concejal.
No es la primera vez que el concejal Ramírez Vahos le pone la lupa a la aguda situación de TransMilenio. “El Sistema Integrado de Transporte Público, lejos de ser una solución de movilidad para la ciudad como se pensó en un principio, ha venido sumergiéndose en una crisis multidimensional”, aseguró el cabildante recientemente.
Según dijo el concejal de Bogotá, al elevado endeudamiento que se registra en el sistema, ahora se le suma una ineficacia para atender la demanda, entre otras problemáticas. “Demoras en las frecuencias de las rutas, precario estado de la infraestructura, una cifra creciente de colados, elevados índices de inseguridad, casos en aumento de violencia de género, ausencia de impacto en acciones de cultura ciudadana, ventas informales sin control y el estado insalubre de portales y estaciones”, agregó.
Ha afirmado que esta desfinanciación ha sido una situación grave que ha venido denunciando desde hace tiempo. Por eso pide que se tomen medidas regulatorias al respecto para evitar que colapse el principal sistema masivo de movilidad de la capital.
“Las personas experimentan miedo en TransMilenio y van a seguir bajándose del sistema, optando por medios alternativos de transporte, aunque igualmente sin las garantías necesarias. Desde el Concejo seguiré insistiendo por recuperar el modelo del Sistema de Transporte Público en Bogotá, con respeto al tiempo de los usuarios, con costos no sobrevalorados y, sobre todo, sostenible y sin miedo”, afirmó el cabildante del Centro Democrático.