Política
El actor Julián Román arremete contra Petro por no invertir en cultura
El teatro ha sido una de las instituciones más olvidadas por el gobierno, según manifestó el artista.
La política y la actuación cada vez más tienen altercados por el descuido en el que los gobiernos tienen al gremio de actores y actrices, además de la ineficiencia que se presenta desde el Ministerio de Cultura para tocar temas coyunturales para los artistas.
Una de las caras más conocidas de la televisión, que no ha guardado silencio para que se les reconozcan los derechos y las condiciones laborales a los artistas ha sido Julián Román, quien desde sus redes sociales en reiteradas ocasiones ha criticado a varios políticos por dejar a la cultura de lado, y esta vez el turno fue para el presidente Gustavo Petro.
La crítica toma cada vez más fuerza
Además de las críticas constantes de Román a varios políticos del país, los actores Fabio Rubiano y Marcela Valencia compartieron, a través de sus redes sociales, una carta con poderosos señalamientos en medio de la coyuntura por la que atraviesa el gremio de actores y el Ministerio de Cultura, dada la inestabilidad en esta cartera, además del escándalo por los títulos falsos del viceministro de la Creatividad.
Román no se quedó atrás y, además de compartir la carta hecha por sus compañeros, también aprovechó la oportunidad para lanzar un comentario, algo sarcástico, como suele ser, sobre la ‘importancia’ que el gremio actoral tiene en la administración Petro.
¿Qué fue lo que dijo?
En medio de la tendencia por la película Barbie, la cual también fue utilizada brevemente por el gobierno para mostrar la importancia que San Andrés tiene para Colombia y el cual fue retirado rápidamente, Julián Román aprovechó la relevancia de la muñeca y le respondió a alguien que le había preguntado en Twitter “¿Cómo sería la Barbie Petrista?”, a lo que Román contestó: “¡Sería una Barbie que ignoraría cualquier tema relacionado con la cultura!”.
Sería una barbie que ignoraría cualquier tema relacionado con la cultura!
— Julián Román (@JulianRoman) July 17, 2023
Asimismo, cuando el actor se enteró de los falsos títulos del viceministro de la Creatividad, lo calificó como “normal”, de manera sarcástica, debido a situaciones similares que han pasado en varias esferas de la política colombiana relacionadas con falsedad de estudios, además de reflejar la molestia por la falta de organización que el gobierno Petro ha dejado evidenciar ad portas de cumplir un año de su posesión.
Que el vice de cultura falsificó título de posgrado del externado… normal.
— Julián Román (@JulianRoman) July 19, 2023
El teatro no se rinde
“Lamentamos que la situación del Ministerio de Cultura siga empeorando de manera vergonzosa, mientras los miles de líderes, gestores y gestoras, artistas y trabajadores de la cultura seguimos esperando la respuesta que usted nos prometió el día 25 de mayo”. Con este apartado de la carta publicada por el actor Fabio Rubiano, el sentir de los internautas decepcionados por el abandono que el gobierno Petro ha tenido con el gremio actoral incrementa con el paso de las horas.
Algunas de las frases que más se destacan en el comunicado son: “La mentira es el primer acto de corrupción… Los funcionarios y funcionarias del Gobierno del cambio deben ser impecables” y “La cultura tiene la llave, presidente, no la deje más en manos equivocadas”.
Presidente @petrogustavo usted dice que los cambios sociales son cambios culturales. Seguimos esperando. https://t.co/TpVc4kJ1Ti
— Marce valencia yoya (@marcevalenciar) July 21, 2023
Por el momento no se han presentado pronunciamientos de parte del Ejecutivo ni tampoco del Ministerio de Cultura.
El gremio actoral ha sido uno de los rostros visibles del abandono estatal y gubernamental desde décadas. Los artistas al no contar con contratos que les aseguren una estabilidad económica, incentivos para inversiones y emprendimientos culturales ni tampoco reconocimientos económicos posteriores a sus grabaciones se han convertido en una de las poblaciones más vulnerables al momento de afrontar la vejez en donde, en varios casos, se ha evidenciado que los ahorros que han acumulado a lo largo de sus carreras no han sido suficientes para gozar de una vejez digna.