Política
El duro mensaje de la delegación del Gobierno al ELN: “No ha respondido la pregunta de si está dispuesto o no a transitar a la paz”
Mediante un comunicado también hicieron fuertes críticas al comandante del grupo guerrillero, Antonio García.
Un fuerte pronunciamiento de la delegación del Gobierno nacional en los diálogos de paz que se adelantan con la guerrilla del ELN se conoció este sábado, en que le piden al grupo armado que responda si en realidad está dispuesto a avanzar por el camino de la paz.
La representación del gobierno del presidente Gustavo Petro, en cabeza de Vera Grabe, mandó un mensaje directo a la organización ilegal y a su comandante, Antonio García, quien este viernes puso en duda el futuro del proceso de paz y cuestionó la “falta de seriedad” del Gobierno.
“Con perseverancia e inmensa paciencia hemos solicitado en repetidas oportunidades a la Delegación de Diálogos del Ejército de Liberación Nacional (ELN), sentarnos a resolver de manera bilateral y constructiva los problemas del proceso de paz”, señaló la delegación del Gobierno.
Posteriormente, resaltó que, una y otra vez, lo que han recibido del grupo guerrillero han sido “mentiras y la arrogante posición de la dirección del ELN y de su comandante Antonio García”, quien aseguró que “no hay garantías” con un gobierno que “no cumple lo que acuerda”.
Lo más leído
En el comunicado del líder del grupo armado dice que hay una “fuerte oposición” al modelo de “paz con transformaciones” acordado con el actual gobierno, que busca ir más allá de la simple pacificación; e insistió que una parte de la delegación del gobierno no firmó el acuerdo 28, de marzo de 2023.
Sin embargo, la delegación del Gobierno señaló: “No es cierto que el Acuerdo 28 no haya sido firmado por la totalidad de la Delegación del Gobierno nacional, o sostener que no existe una resolución presidencial en la que se reconoce de manera explícita el carácter político del ELN y su condición de organización armada rebelde”.
Por eso, desde la delegación de paz del Gobierno Petro hicieron un llamado al Ejército de Liberación Nacional a que responda a la pregunta que se le formuló sobre “si está dispuesto o a transitar a la paz; o si por el contrario concibe este proceso como una oportunidad para su fortalecimiento militar”.
E insistió: “La dirección del ELN se pregunta si vale la pena seguir adelante construyendo acuerdos con este gobierno. Es su decisión. Pero llegó el momento en que el ELN le aclare a la sociedad colombiana y a la comunidad internacional si tiene o no un inequívoco propósito de llegar a la paz; si quiere o no descongelar los trabajos de la mesa de diálogos; si quiere o no renovar el cese al fuego con su Mecanismo de Monitoreo y Verificación, en función de la construcción de paz con transformaciones”.
Finalmente, la delegación del Gobierno manifestó: “El Gobierno nacional ha sido consecuente con la búsqueda de los acuerdos y su implementación como camino hacia la paz. Pero para construir este camino se requieren dos. Seguimos a la espera de que el ELN decida hacer lo propio”.
Cabe resaltar que el líder del grupo guerrillero, en un extenso documento, afirmó haber cumplido con el cese al fuego y justificó su polémica decisión de reanudar los secuestros, alegando incumplimientos del Gobierno.
El ELN también hizo un recuento histórico del proceso, señalando que “inició en 2012, en el primer gobierno de Juan Manuel Santos, y finalizando su segundo mandato, quiso hacer imposiciones y modificar acuerdos firmados. El gobierno de Iván Duque desconoció lo acordado en el gobierno anterior y se perdieron más de cuatro años”.
El ELN acusó a las Fuerzas Militares de realizar “numerosos actos de guerra” que buscan “hundir este proceso de paz”. La guerrilla denunció infiltraciones y campañas de desmovilización que, según ellos, violan los acuerdos establecidos. En particular, mencionaron un incidente en Nariño: “Desde el 29 agosto, las Fuerzas Militares ordenaron a sus agentes de inteligencia enviados a Nariño, luego de ser descubiertos como infiltrados, que desplegaran un proceso de desmovilización en contra del Acuerdo de México”.