El embajador en México, Moisés Ninco, suma un nuevo cuestionamiento en su cargo que impacta a altos funcionarios del gobierno

Aunque el embajador de Colombia en México, Moisés Ninco, fue posesionado hace más de un año, siguen generándose polémicas sobre su cargo. La Procuraduría General de la Nación suspendió por diez meses al director del Departamento Administrativo de la Función Pública, César Augusto Manrique y al exministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Arturo Luis Luna Tapia por irregularidades en la revisión de la hoja de vida de Ninco al momento de ser puesto en el cargo.

La decisión se tomó porque ambos hacían parte de un comité en el que se puso a disposición la hoja de vida de Ninco Daza y en su momento la falta de experiencia era bastante criticada para el cargo.

La Sala Disciplinaria Ordinaria de Juzgamiento confirmó que la experiencia que presentaba no alcanzaba el grado de sobresaliente y, por lo tanto, no debió haber sido avalado para ser el embajador de Colombia en México.

“Ambos funcionarios estaban obligados a recomendar no avalar su hoja de vida o, en su defecto, motivar razonadamente la decisión para considerarlo apto para ocupar el cargo, lo que no sucedió”, señalaron desde la Procuraduría.

El ente de control encontró que tanto Luna como Manrique no le recomendaron al presidente Gustavo Petro compensar los requisitos para que Ninco pudiera ser nombrado en el cargo que aún hoy ostenta.

En ese sentido, el ente de control consideró que ambos cometieron un error al momento de examinar la hoja de vida de Ninco y pasar por alto los documentos que habían llegado al Comité Evaluador de Méritos en el que se evidenciaba que no alcanzaba una puntuación de sobresaliente en ninguna disciplina, ocupación, arte u oficio y que tampoco era considerado un líder social o estudiantil en medio de la corta trayectoria que evidenció.

“La Procuraduría estableció que con su actuación los servidores vulneraron los principios de moralidad e igualdad que deben inspirar la función estatal, e incurrieron en una falta disciplinaria que fue calificada como grave cometida a título de dolo”, informó el ente de control.

En medio de la decisión se recordó el concepto que emitió la exrectora de la Universidad Nacional, Dolly Montoya, en el que había advertido que Moisés Ninco no cumplía con los requisitos para el cargo.

No se trata de la única polémica que ha acumulado Ninco en el cargo. En noviembre de 2023, tras una demanda impuesta por la senadora Paloma Valencia y Adriana Marcela Sánchez, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca tumbó el nombramiento, precisamente, por no cumplir los requisitos para el cargo. Ahora la decisión está en manos del Consejo de Estado luego de que la Presidencia y la Cancillería la apelaran.

Ninco también ha sido cuestionado por supuestamente tener malos tratos con las personas que trabajan en la Embajada. La Procuraduría también adelanta investigaciones en ese sentido tras unas denuncias reveladas por SEMANA.

“A todo el mundo lo trata mal. Es demasiado displicente con los subalternos, he recibido el peor de los tratos después de que se suponía que al ser militantes del Pacto Histórico la relación iba a cambiar”, aseguró una fuente que pidió reserva de su identidad.

Asimismo, otras personas denunciaron que realiza constantes fiestas en la sede diplomática. “El problema es que hay mucha farra. Se la pasan enfarrados. Hay un mal comportamiento que afecta la imagen de Colombia”, aseguró otra fuente.

El mal uso de la sede diplomática del país ha sido otra constante de la administración de Ninco. Por ejemplo, en otra ocasión permitió que el diputado mexicano Temístocles Villanueva grabara un video político en la sede de la embajada colombiana, lo que generó un fuerte cuestionamiento. En ese momento, el entonces viceministro de Relaciones Exteriores, Francisco Coy, le tuvo que llamar la atención a Ninco.

Ninco ha sido respaldado por el gobierno y por eso se ha mantenido en el cargo. El excanciller Álvaro Leyva lo defendió en su momento.

“De él he oído todo tipo de situaciones, es un excelente embajador. Su nombramiento se cayó por razones mecánicas, no por su condición ni porque no tuviera los títulos suficientes. En el caso de él, requería que la publicación de su hoja de vida en la página de la Presidencia durará cuatro días y se retiró al tercer día, pero eso no significa que no se vuelva a nombrar”, afirmó Leyva a SEMANA, quien dijo que supuestamente sí tenía las credenciales necesarias para el cargo.