Política
“El Secop está a punto de colapsar”: senador David Luna denuncia despidos de personal técnico en Colombia Compra Eficiente
De acuerdo con el congresista de Cambio Radical, la razón es que el nuevo director no tiene la experiencia necesaria.
Sigue la polémica por despidos de personal antiguo y técnico en varias entidades del Gobierno. Esta vez, el senador David Luna, de Cambio Radical, denunció que la Agencia Nacional de Contratación Pública, mejor conocida como Colombia Compra Eficiente, está a punto de colapsar.
De acuerdo con el senador, la entidad y todo el sistema de contratación pública en Colombia “está en crisis” por esta salida de funcionarios.
“Es una entidad de orden nacional, es el corazón de la contratación pública y la contratación transparente. Es la entidad que permite que haya publicidad en todos los procesos contractuales y que de esa manera se luche frontalmente contra la corrupción”, dijo Luna.
“El sistema Secop I y Secop II, dos importantes herramientas tecnológicas, están a punto de colapsar. En primer lugar, por falta de conocimiento técnico y, en segundo lugar, por falta de personal”, manifestó el senador.
En Twitter, el senador aseguró que una de las razones es que el nuevo director, Stalin Ballesteros, no tiene la experiencia necesaria para la responsabilidad que asumió.
“La principal razón, según nos dicen, es que el nuevo director no tiene experiencia alguna para el cargo. La segunda es que la entidad se quedó sin personal. Han prescindido de la mayoría de los encargados de temas técnicos”, agregó.
El manejo de SECOP requiere personal técnico. El Gobierno prescindió de las personas que venían desempeñando esta función y ahora improvisarán, como ya se les volvió costumbre…
— David Luna (@lunadavid) January 17, 2023
Además, reiteró que la plataforma necesita a estos funcionarios que conocen el sistema: “El manejo de Secop requiere personal técnico. El Gobierno prescindió de las personas que venían desempeñando esta función y ahora improvisarán, como ya se les volvió costumbre...”.
Ballesteros fue candidato al Senado por el Pacto Histórico, pero no logró pasar entre los escogidos de la lista cerrada. Antes era docente en la Universidad del Magdalena, en Santa Marta. Tiene un pregrado en comercio internacional y una maestría en relaciones internacionales. Su enfoque son los derechos humanos y la paz, dado que adicionalmente trabajó para la Comisión de la Verdad en la región.
Barrida en el Ministerio de Salud
Desde la llegada de Carolina Corcho al Ministerio de Salud, se estima que han salido cerca de 150 funcionarios y contratistas que venían de gobiernos anteriores.
Muchos trabajadores con décadas de carrera en la cartera, quienes pasaron por múltiples gobiernos como funcionarios técnicos y poseedores de una memoria institucional necesaria para el funcionamiento del ministerio, fueron retirados repentinamente. Varios de ellos estaban a pocos meses de pensionarse y otros eran responsables del sostenimiento de su familia entera. Ahora, en un escenario económico adverso, enfrentan el desempleo después de entregarle buena parte de su vida a la entidad.
SEMANA conoció varios testimonios de quienes tuvieron que dejar su cargo en el Ministerio de Salud por motivos relacionados con la nueva administración. A su vez, exfuncionarios narraron el ambiente de temor que se vive por la posibilidad de que continúen los despidos.
En primer lugar, el Ministerio de Salud es una entidad que se ha tecnificado con los años. Con cierta lejanía de la política, se convirtió en una de las pocas carteras en la que el disenso se considera saludable. Por esta razón, muchos funcionarios vienen de gobiernos anteriores y hay altos contrastes entre sí. “Siempre ha habido un talento humano con criterio”, dijo un exfuncionario de la cartera que salió con el cambio de gobierno y que prefirió no hacer pública su identidad. Sin embargo, con la llegada de Corcho, se denuncia que ya no existe espacio para otras maneras de pensar la salud en Colombia: “En esta ocasión, lo que sí se nota es que lo que no esté en una sola línea de pensamiento, no sirve”, agregó.
Por esta razón, según el exfuncionario consultado, la ministra está prescindiendo de algunos veteranos: “Si no cree en lo que se ha construido en los últimos 30 años, si no cree en los funcionarios que construyeron este sistema, claramente no necesita de ellos”.
Muchos concluyen que se trata de la salida de personal “más grande de la historia de la cartera”. Otros se lamentan por la pérdida de la curva de aprendizaje en la entidad, la cual permitía poder enfrentar con éxito crisis como la pandemia de la covid-19.
Esto también lo sostiene una exfuncionaria que llevaba más de 20 años en el ministerio y trabajó de la mano con múltiples ministros. “Me faltaba un año para pensionarme por mi edad y soy madre cabeza de familia. ¿Los derechos para quién? Porque se supone que son para todos los colombianos”, manifestó en conversación con SEMANA.
“No es fácil salir después de 20 años. A veces no es lo que hicieron, sino las formas y las maneras. Se supone que es el Gobierno del cambio”, agregó la exfuncionaria.
De acuerdo con la mujer, no existen palabras hostiles para llevar a cabo estos retiros. Basta con declararlos insubsistentes o que vean publicada una hoja de vida para el cargo que ocupan en la página web de aspirantes de Presidencia de la República, un paso previo al nombramiento.
También existen casos de funcionarios que renuncian por su propia cuenta, no sin antes haber sentido fuerte presión por la resistencia de la ministra Corcho a sus planteamientos. “Sentía que todo les olía a un Gobierno anterior, entonces no les gustaba. Todas las discusiones técnicas se iban a saco roto. Era como hablar permanentemente con una pared para todo”, dijo un alto funcionario que decidió dar un paso al costado.
“Creí que podía ser una salida digna. Creí que tal vez me podían valorar un poco más en otros escenarios o que íbamos a terminar tal vez peleando y salir en una renuncia de pelea”, agregó el exfuncionario.
Los cargos directivos fueron los que más sufrieron con la barrida de la ministra. De cerca de 25 funcionarios, solo uno que viene del Gobierno anterior sigue ejerciendo sus funciones. “Uno sabe que son de libre nombramiento y remoción, y que son cargos de confianza, pero de ahí para abajo, cuando empiezas a ver salir a personas que llevan tantos años, eso sí da mucho dolor porque es la memoria institucional. Gente a un año de pensionarse, a meses”, sostuvo.
Por otro lado, a finales de 2022 se conoció la salida de múltiples contratistas en áreas como comunicaciones. Mientras que se les prometió una renovación de sus respectivos contratos, el coordinador del área terminó retractándose con una llamada telefónica de tres minutos.
“La oficina tenía 23 y a los 23 los sacaron. Fue feo, pero de mi parte he dejado ir y he tratado de no mortificarme la cabeza o el corazón. En un país con una situación tan complicada, quedarse sin trabajo es una tragedia”, dijo un excontratista del equipo de comunicaciones.