Política
Embajador de Colombia en EE. UU., Luis Gilberto Murillo, ofreció mediar la tensa situación entre ambos países por crisis en Israel
El diplomático colombiano intentó mediar la situación, sin embargo, el presidente sigue enviando mensajes en contra de ese país. ¿Cómo quedan las relaciones entre las dos naciones?
El embajador de Colombia en Estados Unidos, Luis Gilberto Murillo, se pronunció sobre la situación entre ambos países y los mensajes que se han generado de ambos lados en los últimos días, en el que se ha evidenciado una posición distinta sobre lo que sucede en Israel.
El diplomático colombiano pidió respeto por la posición del mandatario. Le reclamó a la representante María Elvira Salazar y el representante Carlos Giménez por un diálogo más “respetuoso” con el mandatario.
“La cercanía y alcance de nuestra relación deberían ser suficientes para no trascender a lenguaje insultante y emocionalmente cargado que compromete la dignidad del cargo de Presidente de Colombia y del propio Presidente Gustavo Petro”, aseguró Murillo.
Agregó que en este momento están acentuadas las tensiones internacionales, pero se puso a disposición para mediar esa situación. “Estoy disponible para abordar cualquier preocupación que desee expresar con respecto a las relaciones exteriores de Colombia, pero insisto respetuosamente en que el discurso público sobre estos temas debe, como mínimo, llevarse a cabo con la debida deferencia y atención que se otorga a un socio bilateral importante”, afirmó el diplomático colombiano.
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El pronunciamiento se distancia de los mensajes que ha enviado el mismo presidente Gustavo Petro y el canciller Álvaro Leyva, que han sido más acérrimos en contra de Estados Unidos y de Israel.
“El gobierno de los EE. UU. tiene hoy una gran responsabilidad política con la humanidad. No se debe dejar llevar por la carga de la historia y debe llevar la situación del Medio Oriente hacia un tratado de paz basado en la idea de dos estados libres: Israel y Palestina. El alto al fuego es imperativo y el fortalecimiento de la autoridad palestina sobre Gaza”, dijo Petro en las últimas horas.
Eso, luego que desde Estados Unidos lo cuestionaran por los mensajes contra el pueblo judío que ha enviado el mandatario colombiano. La embajadora para asuntos antisemitas de ese país arremetió contra el presidente Petro.
“Nos sorprendió ver al presidente colombiano @petrogustavo comparar al gobierno israelí con el régimen genocida de Hitler. Condenamos enérgicamente las declaraciones del Presidente Petro y le pedimos que condene a Hamás, una organización designada como terrorista, por su bárbaro asesinato de hombres, mujeres y niños israelíes”, aseguró Deborah Lipstadt.
Igualmente, congresistas de ese país cuestionaron la posición del mandatario colombiano. Una de ellas fue precisamente María Elvira Salazar, quien se alineó con el reclamo de Lipstadt. “He estado advirtiendo desde el principio sobre el peligro de una presidencia de Gustavo Petro en Colombia. Sus comentarios incendiarios sobre Israel representan un peligro inmediato para los más de 20 mil judíos en el país. ¡Deleznable!”, dijo.
Y en las últimas horas respondió al comunicado de Murillo pidiendo respeto con las posiciones del mandatario. “Petro se indignó porque le dije marxista, ladrón, terrorista y antisemita. Su Gobierno me pide ‘palabras más respetuosas y corteses’. El único irrespetuoso y descortés fue Petro, quien puso en peligro la vida de 20 mil judíos en Colombia cuando comparó a Israel con los nazis”, aseguró Salazar.
Por su parte, el congresista Giménez también arremetió contra Petro. “Además de ser socialista, narcoterrorista, incompetente y corrupto, el presidente Petro se ha declarado abiertamente antisemita. Este tipejo es una vergüenza para toda Colombia y para todo los colombianos decentes”, afirmó.
Ese intercambio de mensajes ha generado una tensiones diplomáticas con Estados Unidos nunca antes vistas. A pesar de los distintos gobiernos de diferentes corrientes ideológicas, se habían mantenido las buenas relaciones con ese país.
Estados Unidos ha apoyado irrestrictamente a Israel, al punto de que el secretario de Estado Antony Blinken llegó hasta ese país para evaluar la situación y brindar apoyo. Igualmente, luego hizo lo propio el presidente de la potencia norteamericana, Joe Biden.
