POLÍTICA
“Entre las EPS liquidadas y en liquidación quedaron debiendo 33 billones de pesos a clínicas y hospitales”: ministra de Salud, Carolina Corcho
La funcionaria señaló que la deuda actual es de 16,6 billones de pesos, y que el hueco fiscal con entidades que atienden pacientes llega a casi 50 billones de pesos.
La ministra de Salud, Carolina Corcho, dijo este miércoles que entre las EPS liquidadas y en liquidación quedaron debiendo 33 billones de pesos a clínicas y hospitales.
“La deuda actual es de 16,6 billones, casi 50 billones de pesos es el hueco fiscal con entidades que atienden a los pacientes”, sostuvo la ministra, en su cuenta en Twitter.
“El Gobierno ha dispuesto importantes recursos para adición presupuestal, y ha logrado el incremento real más importante de la UPC en 16,2 para ambos regímenes. Esto debe llegar a los prestadores de salud (clínicas y hospitales) que son quienes padecen crisis por no pago de EPS”, añadió la ministra.
Entre las EPS liquidadas y en liquidación quedaron debiendo 33 billones a clínicas y hospitales y la deuda actual es de 16, 6 billones, casi 50 billones de pesos es el hueco fiscal con entidades que atienden a los pacientes. Importante ese dato @RevistaSemana para el análisis.
— Carolina Corcho (@carolinacorcho) January 4, 2023
El pronunciamiento de Corcho se dio luego de que la presidente de Acemi, Paula Acosta, advirtiera en entrevista con SEMANA que el Gobierno Petro les adeuda a las EPS la suma de 2,6 billones de pesos.
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Alerta en las EPS: según Acemi, el Gobierno Petro les debe 2,6 billones de pesos, no les paga y las está asfixiando. Las consecuencias son gravísimas para los colombianos
El gremio de las EPS asegura que el Gobierno Petro no ha querido pagarles lo que se les adeuda. Y que esa situación puede tener graves consecuencias. En dialogo con SEMANA, la presidenta del gremio, Paula Acosta, explica qué está pasando.
SEMANA: ¿A cuánto asciende la deuda del Gobierno con las EPS?
Paula Acosta: De acuerdo con los cálculos que tenemos en Acemi, las deudas por cuenta de Presupuestos Máximos, es decir el costo de las atenciones en salud que no hacen parte del Plan de Beneficios con cargo a la UPC, ascienden a $ 2,6 billones sumando 2021 y 2022. Esto no tiene en cuenta otras deudas que son menores, como un saldo de Presupuestos Máximos de 2020 por $ 356 mil millones, o las canastas covid. Recordemos que el último pico se dio en febrero de 2022.
SEMANA: ¿Cómo se llegó a esa situación de no pago?
Paula Acosta: Es claro que hay un problema en la forma en la que se calculan los Presupuestos Máximos. Todos los años el gasto real ha estado muy por encima de lo presupuestado por el Gobierno y los pagos y adiciones se han demorado. Esto conlleva a que las EPS deban pagar con recursos propios estas prestaciones, por las cuales no reciben contraprestación alguna, ni por los trámites administrativos ni por la auditoría que realizan.
Si bien los montos más importantes corresponden a 2021 y 2022, hay deudas desde 2020 año en el que empezó esta nueva metodología. Cuando el gobierno tiene deudas de más de dos años esto es prácticamente imposible cumplir los pagos a proveedores y prestadores de forma oportuna.
Lo que se cubre por Presupuestos Máximos es solo una fracción de las millones de atenciones en salud que se hacen a diario. Vale la pena preguntarse por las capacidades reales de la Adres, que es la tesorería del Sistema de Salud, para asumir más pagos de forma directa.
SEMANA: ¿Qué implicaciones tiene estas demoras en los pagos a las EPS?
Paula Acosta: Genera una afectación en todo el Sistema de Salud, siendo el más afectado el usuario. Al dejar sin capital de trabajo a las EPS esto se transmite a los prestadores como clínicas, hospitales, laboratorios, centros de imágenes, gestores farmacéuticos, los profesionales independientes, y estos a su vez con sus trabajadores. El resultado final es aumento de carteras, afectaciones en los servicios que reciben los colombianos, ya que al no tener pagos oportunos algunos prestadores deben cerrar servicios o disminuir su capacidad, lo que se ve también reflejado en los tiempos de espera para citas y otros procedimientos. Por último, como hemos visto en otros países, esto termina en mayor gasto de bolsillo para los hogares.
Otro efecto muy preocupante es el deterioro en los indicadores de habilitación de las EPS. Desde Acemi proyectamos que el agregado de EPS van a cerrar 2022 con números rojos. Esto en muchos casos implicará que la Superintendencia de Salud decida intervenir más EPS, con los efectos que ya conocemos.
SEMANA: ¿Por qué el Gobierno insiste en las millonarias ganancias de las EPS?
Paula Acosta: Parte de la narrativa de la reforma de salud parte de una premisa errónea, y es que las EPS tienen grandes ganancias. El margen de las EPS en los últimos años ha estado entre 0 y 3 %. Otros actores del sector salud tienen márgenes mucho más amplios. Si se quiere mejorar la eficiencia del gasto en salud, deben revisarse todos los eslabones.
Los márgenes de las EPS son muy estrechos, y situaciones como las que vivimos el año pasado de alta inflación, devaluación y un aumento muy notorio de frecuencias de uso de servicios de salud hace que lo que paga el Gobierno a las EPS por organizar y garantizar el plan de beneficios con cargo a la UPC sea insuficiente y genere pérdidas que no todas las empresas pueden resistir. Parte importante del buen funcionamiento del sistema de salud, es que los recursos sean suficientes.