POLÍTICA

Germán Vargas Lleras la emprendió contra Petro por el metro, lo trató de “mentiroso” y habló de “chantaje”: “Su discurso de siempre es victimizarse”

El exvicepresidente le respondió a Petro, quien lo señaló como responsable por las obras del metro elevado de Bogotá, un diseño con el que él no estuvo de acuerdo.

17 de febrero de 2025, 7:58 p. m.
Germán Vargas Lleras y Gustavo Petro.
Germán Vargas Lleras y Gustavo Petro. | Foto: FOTO1: SEMANA/FOTO2: SEMANA.

El presidente Gustavo Petro y el exvicepresidente Germán Vargas Leras terminaron enfrentados en sus redes sociales por cuenta del Metro de Bogotá y el diseño elevado que avanza en un 50 %, aproximadamente, y que no le sigue gustando al jefe de Estado.

Petro, en su cuenta oficial de X, dio su opinión de lo que pasa en Bogotá: “Lo expliqué con mucha claridad cuando Guillermo Cárdenas y Germán Vargas Lleras, aliados de Enrique Peñalosa, sabotearon la construcción del metro subterráneo de Bogotá, que estaba listo para construir dada la calidad de los estudios”.

Y siguió: “Creyeron que saboteando el metro de verdad iban a impedir que fuera presidente y actuaron con tal pequeñez que no impidieron que fuera presidente, pero sí dañaron a Bogotá, quizás, irreversiblemente”.

Según el presidente “llevaron a Bogotá a desmejorar por completo su urbanismo y su movilidad, profundizando el uso de troncales de buses, negaron los recursos para la educación pública y llevaron a entrar con balde de agua y totuma a todos los hogares bogotanos, cuando fuimos nosotros los que dijimos que había que aprovechar aguas lluvias y ordenar la ciudad alrededor del agua, que el POT de Bogotá debía adaptarla a la crisis climática, POT que hundieron en unas horas el señor Miguel Uribe y Juan Carlos Flórez”.

Intervención del presidente Gustavo Petro en el Foro sobre Inteligencia Artificial en la Cumbre Mundial de Gobiernos 2025.
El presidente Gustavo Petro. | Foto: Presidencia

Vargas Lleras, visiblemente molesto, le respondió.

“Petro, mentiroso. Usted insiste en desinformar a los colombianos para justificar su obsesión con un metro subterráneo que nunca gestionó de manera eficiente cuando fue alcalde. Su gobierno ha convertido la infraestructura en un campo de batalla política, bloqueando avances y generando incertidumbre. La realidad es clara: Bogotá pudo tener su metro subterráneo si usted hubiera licitado la obra con estudios sólidos y financiación asegurada. No lo hizo. Ahora, su ataque contra el metro elevado es otro intento desesperado de reescribir la historia”, dijo el líder de Cambio Radical.

El Intercambiador vial de la calle 72 es una de las obras complementarias de la línea 1 del Metro de Bogotá,
El Intercambiador vial de la calle 72 es una de las obras complementarias de la línea 1 del Metro de Bogotá. | Foto: Alcaldía de Bogotá

No hay un solo estudio serio— según Vargas Lleras— “que afirme que esta opción afectará la movilidad o la calidad urbana de Bogotá. Lo que sí está claro es que su empeño en sabotear el proyecto ha generado retrasos, incertidumbre y un riesgo enorme de demandas millonarias contra la ciudad y la Nación. En lugar de garantizar que la obra se ejecute con los más altos estándares de transparencia y eficiencia, usted prefiere seguir con su guerra política. Su chantaje a la ciudad, además del bloqueo de recursos para otros proyectos clave como el Regiotram, los metrocables y la segunda línea del metro, es una muestra de su desprecio por Bogotá y por la legalidad”.

Germán Vargas Lleras, exvicepresidente de Colombia.
Germán Vargas Lleras, exvicepresidente de Colombia. | Foto: SEMANA

Vargas Lleras añadió: “No contento con su historial de improvisación y parálisis, Petro, ahora pretende que todo el país pague las consecuencias de sus delirios. Es inaudito que, mientras las grandes capitales del mundo avanzan en infraestructura de transporte, en Colombia todavía estemos debatiendo si construir o no un metro que ya está contratado y en ejecución. Los bogotanos han esperado más de 80 años por esta obra, y su administración— lejos de acelerar el proceso— ha hecho todo lo posible por enredarlo con caprichos y cálculos políticos. Bogotá necesita soluciones, no discursos incendiarios ni excusas. El metro elevado es una realidad en construcción y su intento de frenar el progreso no hará más que reafirmar el desastre que ha sido su gobierno en materia de infraestructura. Los bogotanos no olvidaremos quiénes han sido los verdaderos saboteadores del desarrollo de la ciudad”.