Gustavo Petro fue condecorado en 2016 por el ex primer ministro italiano vinculado al escándalo con el que hoy señala a Marta Lucía Ramírez

Esta mañana, el presidente Gustavo Petro, a través de su cuenta de Twitter, pidió a la Fiscalía General de la Nación iniciar la investigación tras el escándalo desatado en Italia por la supuesta corrupción en la venta de aviones y naves militares hacia Colombia en épocas del gobierno de Iván Duque.

“80 millones de dólares en sobornos se iban a distribuir por compra de equipos militares navales entre una empresa italiana y altos funcionarios del anterior gobierno. La investigación italiana avanza, solicito a la Fiscalía iniciarla en Colombia”, dijo el presidente en su cuenta de Twitter.

Además, ante el reclamo de la exvicepresidenta Marta Lucía Ramírez por el tuit de Petro, este también le respondió después de que ella asegurara que era una cortina de humo para tapar la crisis que ocurre en su Gobierno. “¿Cortinas de humo? ¿Sobornos por 400.000 millones de pesos en el pasado alto gobierno? Esto es peor que Odebrecht”, declaró el mandatario.

Sin embargo, el primer ministro involucrado en el caso investigado por la justicia italiana, Massimo D’Alema, condecoró al presidente a inicios de 2016 al otorgarle la Legión de Honor Nacional de México. En su momento, el ahora presidente presumió de la foto con el investigado antiguo mandatario italiano.

Diego Molano descarta supuesta compra

Diego Molano, candidato a la Alcaldía de Bogotá y exministro de Defensa en el gobierno de Iván Duque, descartó que la pasada administración haya comprado barcos y aviones a Italia, tal como lo sugirió el presidente Gustavo Petro cuando conoció que están investigando al expresidente del Consejo de Ministros de ese país por supuestos contratos de elementos militares con Colombia que violan la ley.

“Miente presidente Gustavo Petro. Investigación es al ex primer ministro italiano comunista, Mássimo D’Alema. El gobierno de Iván Duque alertó al Viceministerio de Defensa italiano de sospechas de un privado negociando por fuera de la institucionalidad”, informó.

Y agregó que “Colombia no contrató nada de eso. ¿Así pretende tapar sus enredos?”, preguntó.

La aclaración de Molano se dio cuando el presidente Gustavo Petro intentó mirar hacia atrás y lanzar críticas al gobierno pasado por esas denuncias.

“80 millones de dólares en sobornos que iban a destruir por compra de equipos militares navales entre una empresa italiana y altos funcionarios del anterior gobierno. La investigación italiana avanza. Solicito a la Fiscalía iniciarla en Colombia”, escribió el jefe de Estado en su cuenta personal de Twitter.

La oposición en Colombia y un medio europeo han querido señalar a la exvicepresidenta Marta Lucía Ramírez de ese tema, pero ella, al igual que Molano, dijeron que no contrataron elementos militares con ese país.

“Inaceptable que en el más grave escándalo político en el país por audios con graves confesiones de financiación de la última campaña presidencial, pongan cortinas de humo. Como vicepresidenta y canciller del anterior gobierno, no tuve funciones de compra de equipo militar”, dijo.

El Corriere della Sera, uno de los diarios más importantes de Italia, informó de lo que sería una trama de corrupción por parte de Massimo D’Alema, expresidente del Consejo de Ministros de Italia y el famoso banquero Alessandro Profumo. El caso, según el medio, involucraría a Colombia.

De acuerdo con la pieza periodística, ambos son investigados por la Fiscalía de Nápoles porque, supuestamente, vendieron barcos y aviones militares a Colombia. A su vez, la investigación incluye a Giuseppe Giordo, exdirector general de Fincantieri y otros mediadores de la operación comercial.

“Los sospechosos actuaron en diversas capacidades como promotores de la iniciativa económica comercial de vender al Gobierno colombiano productos de empresas italianas con participación pública: Leonardo, en particular aviones M 346, y Fincantieri, en particular Corvettes y pequeños submarinos”, según informó el diario italiano.

El objetivo era contratar con el Gobierno de Colombia más de 4.000 millones de euros, dijo el medio.

Los responsables italianos habrían violado la ley que castiga el peculado, la extorsión, la inducción indebida a dar o prometer beneficios, la corrupción y la instigación a la corrupción, el abuso de poder por miembros de tribunales internacionales u órganos de la Comunidad Europea, según el Código Penal. Se informó que ambos presuntos responsables ofrecían contraprestaciones por los supuestos contratos.

Como lo narra el mismo diario, también están participando en la investigación “Edgardo Fierro Flores, jefe del grupo de trabajo para la presentación de oportunidades en Colombia; Marta Lucía Ramírez, canciller y vicepresidenta de Colombia, y Germán Monroy Ramírez y Francisco Joya Prieto, delegados de la comisión del Senado de Colombia”.