Iglesia Católica hace un llamado al Gobierno Petro y al ELN para que retomen diálogos de paz

En la Iglesia Católica hay una preocupación por el estancamiento que hay en la mesa de diálogo con la guerrilla del ELN que lleva varia varios meses en suspenso por diferencias entre las partes.

Por esa razón, la Conferencia Episcopal de Colombia, a través de monseñor Héctor Fabio Henao, hizo un llamado a las delegaciones del Gobierno Petro y del ELN para que retomen la negociación lo más pronto posible.

“Invitamos a encontrar con determinación caminos que nos alejen de la violencia y nos permitan persistir en la búsqueda de un país reconciliado y en paz. Acogemos el clamor de las comunidades para que los diálogos se retomen y avancen firmemente hacia soluciones de las crisis humanitarias como lo ha sido el cese al fuego bilateral”, dice la comunicación.

Monseñor Henao, delegado para las relaciones Iglesia- Estado en Colombia, ha estado acompañando los diálogos que el Gobierno Petro sostiene con diferentes grupos al margen de la ley en Colombia por lo que también hace un llamado para que las delegaciones retomen el camino de decretar un cese al fuego bilateral. “En el marco del conflicto existe una profunda afectación a la vida e integridad de los más vulnerables como los jóvenes, mujeres y comunidades étnicas, así como del medio ambiente y los ecosistemas”, dijo.

Según la Iglesia Católica ese mecanismo que venció el pasado 3 de agosto sí sirvió en varios territorios del país porque alivió el sufrimiento de varias comunidades que padecen directamente el conflicto. “El CBFNT mejoró condiciones de seguridad y protección de las comunidades para que pudieran ejercer sus derechos y libertades de manera más segura”.

El pronunciamiento de la Iglesia Católica se da días después de que se adelantara una reunión entre la Conferencia Episcopal y la Diócesis en los Mecanismos Nacional, regionales y locales del Cese al Fuego Bilateral donde se hicieron varios análisis de dicho mecanismo.

No es la primera vez que la Iglesia hace un llamado a las delegaciones de paz para que avancen en la mesa de diálogo, pero en esta ocasión el camino es más espinoso porque el ELN ha hecho una serie de peticiones, como ser retirado de la lista de Grupos Armados Organizados, que han sido reprochadas por el Gobierno Petro.

Aunque los negociadores del Ejecutivo han dicho que los canales de comunicación con los guerrilleros están abiertos para buscar soluciones a las diferencias, los elenos no han respondido atentamente a dicho llamada y únicamente han pedido que se cumpla lo que se les prometió en la mesa de diálogo.

El pasado 6 de septiembre el comisionado de paz Otty Patiño reconoció que dichas conversaciones están pasando por un mal momento y que todo está en manos de los elenos, por si quieren seguir hablando de paz.

“No ha habido respuesta a los llamados que les hemos hecho. Está agonizando (el diálogo), pero ellos son los únicos que le pueden poner oxígeno, pero no poniendo bombas, matando gente ni atacando oleoductos”, dijo el funcionario.

Patiño, contrario a lo que piensan los negociadores del Gobierno Petro, está siendo realista y se ha dado cuenta de que los criminales del ELN solamente se están fortaleciendo y cometiendo todo tipo de delitos en diferentes regiones del país.

Sin embargo, señaló que el Gobierno Petro nunca cerrará la puerta para una salida negociada al conflicto y que en ese orden de ideas son los elenos quienes deben decirles a los colombianos si quieren o no seguir en los diálogos.

“El Gobierno nunca desistirá de los caminos hacia la paz, pero si la otra parte desiste, pues no se puede hacer nada más. El ELN no quiso hacerlo, tuvo oportunidades y no ha querido”, reiteró.

Por ahora, el Gobierno Petro ni el ELN han dado luces de reanudar los diálogos de paz y sectores de la oposición alertan que la guerrilla lo único que hará es fortalecerse militarmente para esperar la llegada de un nuevo gobierno en 2026.