POLÍTICA
Insólito: hasta al canciller Álvaro Leyva no lo atienden en canales de comunicación de la Cancillería
El ministro de Relaciones Exteriores intentó hacer un trámite, pero no fue posible.
Un hecho que muchos han catalogado como de realismo mágico sucedió en el Gobierno nacional. El canciller Álvaro Leyva no pudo comunicarse con la Cancillería a través de los canales de comunicación de la entidad, para hacer un trámite relacionado con su pasaporte.
SEMANA conoció que el ministro reconoció que durante 40 minutos intentó comunicarse con funcionarios de su despacho, pero nadie lo atendió. Buscaba hacer un trámite relacionado con el pasaporte y evidenciar las fallas del sistema tras las quejas recurrentes.
El Canciller Alvaro Leyva pidió una auditoría interna para modificar los canales de comunicación del ministerio, entre ellos el de pasaportes.
— Lizeth Suesca (@Lizethsuescaa) January 24, 2023
El dato curioso es que el mismo ministro intentó comunicarse con funcionarios y con su despacho, 40 minutos llamando y nadie lo atendió
Ante lo insólito del caso, el canciller anunció que se realizará una auditoría interna para conocer qué sucede con los canales de comunicación de la Cancillería, que han sido criticados en varias ocasiones porque precisamente no hay una respuesta sobre el tema.
Esta revista conversó con el presidente del sindicato de empleados del Ministerio de Relaciones Exteriores (Semrex), Francisco Burchardt Melo, quien señaló que es un problema latente que se viene presentando desde hace tiempo, porque el sistema es de hace más de 20 años y, por lo tanto, está obsoleto. Eso se lo hizo saber al ministro Leyva hace varios meses, pero hasta el momento no ha sido solucionado.
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“Le dijimos el 19 de agosto, en la única reunión con el ministro, que ‘hay que revisar todos los aplicativos, todo el soporte técnico de Cancillería, porque no está funcionando’”, afirmó Burchardt.
El sindicalista explicó que el servicio exterior de Cancillería depende de un programa llamado Sitac, un aplicativo por medio del cual se hacen este tipo de trámites. Alerta que tiene más de 20 años de haber sido contratado. “Está obsoleto, está viejo, se cae a cada rato”, afirmó.
Pero además alertó que, más allá del caso del ministro Leyva, que es anecdótico, para los ciudadanos fuera del país puede ser crítico, ya que cuando se cae esa plataforma ningún consulado puede atender al público que requiere información.
“Todas las actuaciones consulares pasan por ahí. Imagínese una persona que viaja dos, tres, cuatro y hasta siete horas, en el caso de Australia, y llega y le dicen; ‘se cayó el sistema’”, reclamó Burchardt.
El presidente del sindicato aclara que no es culpa del servidor público que se encuentra en ese país, sino que el programa es antiguo.
“Se lo dijimos en agosto al ministro. Revisemos esto porque son obsoletos los aplicativos. Tampoco pasó nada”, afirmó Burchardt.
Otras polémicas de la Cancillería
Recientemente la Cancillería colombiana ha estado envuelta en otras polémicas. Una de ellas fue la directriz de un código de vestuario en el que se recomendaba a sus funcionarios cómo vestir y discriminaba cuando era para ocasiones “formal de negocios” o “casual de negocios”.
En el primer caso, le pedían a los hombres lucir corbata, traje, unos zapatos especiales para la ocasión, entre otros elementos. Para casual de negocios debían usar blazer, camisa y zapatos que cumplan determinadas características.
En el caso de las mujeres debían vestir con saco, faldas largas, vestido completo, medias veladas, entre otros elementos que denoten elegancia. Les piden evitar escotes pronunciados y faldas cortas, así como maquillaje discreto y sin tonalidades fuertes. Accesorios pequeños, peinado sencillo, uñas cortas, entre otros. Para ambos están prohibidos los tenis.
El canciller Leyva tuvo que pronunciarse sobre esta directriz. “No soy quién diga cómo debe vestirse la gente. Prevalece si lo que la recta razón y el buen comportamiento indiquen”, afirmó.
Otra de las polémicas en la Cancillería se presentó por la salida masiva de funcionarios que se ha venido registrando. Se trataría de cerca de 200 personas que salieron de la entidad, según algunas denuncias, con condiciones que según la ley no estarían permitidas para haberlas relevado de sus cargos en la entidad.
Leyva también se pronunció sobre esos hechos y responsabilizó a otra entidad. “La Cancillería no bota a sus funcionarios así y porque sí. Menos a quienes trabajan con denuedo y lealtad. La Comisión Nacional de Servicio Civil, so pretexto de un concurso de ‘méritos’, salió de un plumazo de excelsos servidores. Hay que revisar la ley. Injusta. Atropelladora”, aseguró el canciller.