Conflicto
Iván Mordisco, de las disidencias de las Farc, no solo no está muerto, sino que anda “emberracado” y habló con la periodista Vanessa de la Torre
El disidente reivindicó la lucha armada revolucionaria como el único camino para conseguir la paz y atacó a gobiernos anteriores por la muerte de 10.000 civiles presentados como guerrilleros.
Tres meses después de que las autoridades anunciaran su muerte, el líder de las disidencias de las Farc alias Iván Mordisco le dio una entrevista a la periodista Vanessa de la Torre en Caracol Radio, en la que no solamente confirmó que está vivo, sino que dejó claro que la paz con su temido grupo armado ilegal no será tan sencilla como la cree el nuevo gobierno.
Mordisco habló durante casi nueve minutos con la comunicadora, quien le preguntó por sus razones para separarse del proceso de paz con las Farc, sobre el proyecto de paz total del presidente Gustavo Petro y por qué los colombianos, ahora sí, debemos creerle su voluntad de reconciliación.
“No planteamos cosas distintas a la soluciones de los grandes problemas sociales, económicos y políticos del país, que es la razón y causa de nuestra lucha”, afirmó el disidente, quien insistió en que las Farc -a las cuales reivindica- siempre han buscado “la paz con justicia social”.
Iván Mordisco afirmó que es “un campesino revolucionario que nací y crecí en medio de la pobreza y haciéndome consciente que es posible un mejor país”, y explicó cómo está organizado su grupo armado ilegal, el cual constituye una de las disidencias de las Farc más temidas en el país.
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Mordisco también dijo que “no hay mandos personales”, sino un “estado mayor central” y que las decisiones se adoptan según las indicaciones que haya en las “resoluciones de nuestras conferencias de guerrilleros”. Sin embargo, se negó a precisar cuántos integrantes son.
En lugar de hacer esta precisión, clave para el entendimiento de la dimensión de la problemática de las disidencias, Mordisco acusó a los gobiernos de los expresidentes Álvaro Uribe, Juan Manuel Santos e Iván Duque de “presentar muertos” para perpetuar la guerra en Colombia.
“Deberíamos hablar de los verdaderos muertos y desaparecidos, que son mas de 10.000 civiles asesinados haciéndolos pasar por guerrilleros muertos en combate”, afirmó el disidente, quien, adicionalmente, sostiene otro enfrentamiento con la “segunda marquetalia” liderada por alias Iván Márquez, exjefe negociador de las Farc en el proceso de paz.
Acerca de su muerte, anunciada en julio pasado por el exministro de Defensa Diego Molano y explicada por algunos comandantes militares, Mordisco afirmó que el exfuncionario y el expresidente Duque “le mintieron al país y al mundo” y que “su afán era la recompensa”.
Precisamente sobre este tema, dijo que le hacía un llamado al presidente Petro para que los 3.000 millones de pesos que, según él, se ofrecen por su captura “sean invertidos en bienestar social. No más plata para la guerra si se está hablando de paz”.
En relación con el proceso de paz al que se acogieron las Farc y cuyo acuerdo se firmó en el Teatro Colón en noviembre de 2016, el disidente fue categórico en que la única paz que acepta es la “paz con justicia social” y que les dé solución definitiva a todos los problemas económicos, políticos y sociales de los colombianos.
“Sabíamos que el gobierno no cumpliría, y no se estaba hablando de la esencial, como el modelo económico, que es el génesis del conflicto social y armado que vive el país. Es que la guerra es por la desigualdad”, aseguró el líder de las disidencias de la guerrilla sobre el proceso de paz con las Farc.
En tal sentido, habló también del propósito de paz total que tiene el nuevo gobierno y de las posibilidades de que la organización armada ilegal que él lidera deje las armas y se comprometa con la reconciliación de los colombianos.
“El discurso del presidente Petro es coherente con algunos de nuestros planteamientos. Por supuesto que en otros no. En la medida que este gobierno cumpla las expectativas sociales, irá habiendo un mayor compromiso nuestro”, dijo.
Y, adicionalmente, aseguró que “muchos se equivocan al decir que somos terroristas, narcotraficantes o una simple banda”, por lo que reclamó un reconocimiento político para su grupo ilegal y “abrir nuevas expectativas” para conseguir la paz en el país.
En esta ruta, afirmó que su temida organización ya manifestó su “disposición” de sentarse “a la mesa a discutir con el gobierno del presidente Petro nuestra visión de país” y que hubo un “primer encuentro con este propósito”, pero que, hasta el momento, no ha habido avances.
Mordisco dijo que ellos evitan al máximo la confrontación con la fuerza pública, pero que si son atacados, se tienen que defender. “Estamos siendo atacados por alianzas de fuerza pública, paramilitares, “segunda marquetalia”, elenos (...). En esta condiciones nos tenemos que defender”, afirmó.
“Cuando uno se hace revolucionario no se preocupa por salir. La preocupación es la solución a los problemas sociales que viven la mayorías colombianas. En esa dirección debemos inclinar el debate. No son las Farc. El pueblo es el que tiene la palabra”, aseguró.
Pese a estas declaraciones, lo cierto es que las autoridades tienen detectadas las actividades ilegales que la disidencia de alias Iván Mordisco estaría realizando en diferentes departamentos del país y que, aparentemente, estaría lejos de limitarse a defenderse cuando son atacados.
Uno de sus principales proyectos, según informes de inteligencia, es la rearticulación armada de las Farc en departamentos como Arauca, Norte de Santander, Cauca, Nariño, Putumayo, Valle, Casanare, Amazonas, Huila, Tolima y Meta, donde ya había instalado componentes armados y establecido alianzas criminales para lograr su despliegue en esas zonas.
“Desde Guaviare coordina actividades de narcotráfico y en la zona de frontera con Venezuela ya ha venido estructurando actividades para el fortalecimiento armado y consolidación de finanzas de la organización”, señalan informes de inteligencia sobre las acciones criminales de Mordisco.
Y otro de sus propósitos, según las autoridades, es la “articulación política y retoma de territorios, enfocando el desarrollo de acciones de impacto en contra de la fuerza pública e instalaciones gubernamentales”. Se tiene registro de más de 48 ataques del grupo de este disidente de las Farc solo en 2021.