POLÍTICA
La Comisión de Ética de la Cámara, ¿el ‘arma’ contra la reforma pensional de Petro? SEMANA revela sus últimas movidas
Los partidos Liberal, la U y el Conservador están recusados. Hasta el viernes hay plazo para definir sus impedimentos. La Comisión tramitó 60 recusaciones contra congresistas.
Este martes 11 de junio, cuando distintos sectores políticos pensaron que la reforma pensional de Gustavo Petro avanzaría en su cuarto debate, no ocurrió. Congresistas cercanos y alejados de la Casa de Nariño empezaron a salir del recinto de sesiones y la plenaria se levantó por falta de quórum. No se alcanzaron a votar los impedimentos.
Las alarmas se encendieron en el Palacio de Nariño. El mensaje que llegó al despacho presidencial es que el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, no tiene garantizadas las mayorías plenas para aprobar en cuarto debate la iniciativa que tiene escasos ocho días de vida legislativa. De lo contrario, se hunde por falta de trámite y el Gobierno tendría que presentarla de nuevo en el Congreso y arrancar desde cero, en otras palabras se perderían los tres primeros debates.
Los congresistas se salieron del recinto porque las mayorías están recusadas por distintos hechos, entre ellos, la ‘Sneyderpolítica’, los explosivos señalamientos del exdirector de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, Olmedo López, y el exsubdirector, Sneyder Pinilla, quienes hablaron de algunos parlamentarios que, al parecer, habrían recibido recursos económicos o favorecimiento en contratos, para ayudar a tramitar las reformas de Petro.
El temor, como lo reconoció el congresista Wadith Manzur, uno de los salpicados en las declaraciones de Olmedo López, es que la Comisión de Ética de la Cámara no resuelve aún todas las recusaciones y el problema es que ellos, por votar anticipadamente, terminen expuestos a una investigación ante la Corte Suprema de Justicia. Por eso, algunos prefieren esperar.
Lo más leído
El problema es que el tiempo es el principal enemigo de la reforma pensional.
SEMANA conoció que en los últimos 15 días la Comisión de Ética de la Cámara de Representantes ha tramitado 60 recusaciones y actualmente avanza en el estudio de tres gruesos impedimentos contra el Partido Conservador, el Partido de la U y el Partido Liberal.
Quienes presentaron las recusaciones lo hicieron contra los partidos en general y abarca a todos los congresistas lo que termina limitándolos a votar sobre el terreno. Algunos de ellos, por sugerencia del expresidente de la Cámara, David Racero, planean pasar por alto la Comisión de Acusación y votar.
Una fuente de la Comisión le confirmó a este medio que los congresistas de esa célula legislativa han venido sesionando.
De hecho, han resuelto un grueso de recusaciones importantes, entre ellas, las que se formularon en contra de parlamentarios del Pacto Histórico. Sin embargo, frente a los impedimentos contra la U, el Partido Liberal y el Conservador, la mesa directiva ha preferido ahondar más en la investigación, pedir conceptos y escuchar declaraciones.
Hoy - miércoles 12 de junio- se escuchará en declaración a las personas que presentaron las recusaciones para que amplíen su versión y así tomar una decisión, además desde la semana pasada se decretaron pruebas. La Comisión tiene hasta el viernes 14 de junio para resolver. El problema es que el tiempo corre y la reforma pensional agoniza.
La presidenta de la Comisión de Ética de la Cámara, Juana Carolina Londoño, dijo en la plenaria de este martes que “los tiempos del Gobierno son los del Gobierno y los del Congreso son otros”.
Ella dejó claro que es responsable con sus pronunciamientos y que su órgano legislativo quiere tomarse el tiempo para analizar caso por caso.
Al interior de la Comisión de Ética está claro que el Gobierno ha tenido tiempo para tramitar la reforma y no tiene por qué poner a correr al Congreso. Al fin y al cabo, la iniciativa se radicó en marzo de 2023, tardó tres meses en ser aprobada en la Comisión Séptima del Senado y diez meses más en la Comisión Séptima de la Cámara. Solo hasta el 10 de mayo de 2024 se radicó en la plenaria.
La Comisión de Ética está colapsada de recusaciones y como si fuera poco empezaron a llegar impedimentos de la reforma laboral cuyo debate reanudó este martes la Comisión Séptima de la Cámara.
Y es que hay recusaciones que se tramitan de forma ágil porque, de entrada, los congresistas estiman que provienen de opositores que tienen como objetivo entorpecer el normal desarrollo de las sesiones, unas más se presentan sin pruebas y otras, como las de la Sneyderpolítica, ameritan una investigación más profunda.
Este miércoles 12, la plenaria de la Cámara intentará avanzar en el estudio de la reforma pensional. Mientras tanto, siguen llegando recusaciones, como la que se radicó este martes contra el presidente de la Cámara, Andrés Calle, señalado por Olmedo López de recibir 1.000 millones de pesos para empujar las reformas de Petro en el Congreso.
Esos trámites requieren tiempo y eso es lo que hoy no tiene el Gobierno.