Diálogos de Paz
Cínicos: estas son las exigencias de la Segunda Marquetalia para dialogar con el Gobierno Petro. Aunque son narcos y sanguinarios, dicen ser “una guerrilla de elevadas calidades políticas”
A pesar de ser un grupo criminal dedicado al narcotráfico, están poniendo una serie de condiciones al Ejecutivo para continuar la fase exploratoria.
Los grupos criminales en Colombia están tomándose atribuciones que no les corresponde. Ya es habitual escucharlos hablar sobre los problemas del país, ejerciendo la defensa del presidente Gustavo Petro y haciendo exigencias para evitar su sometimiento a la justicia.
Como una de las políticas del Gobierno es la denominada ‘paz total’, se ha buscado acercar a todos los grupos criminales para desmantelarlos y silenciar los fusiles en las regiones donde más se vive el conflicto.
Sin embargo, esa situación ha sido aprovechada por los grupos criminales que continúan delinquiendo, secuestrando, asesinando y en el negocio del narcotráfico ante la debilidad del Estado.
En medio de todo ese escenario reapareció la Segunda Marquetalia, grupo criminal liderado por Iván Márquez, para hacer unas exigencias al Gobierno del presidente Gustavo Petro.
Esto significa que, a pesar de que el Ejecutivo ha mostrado el interés de solucionar el conflicto y les están tendiendo la mano sin importar que traicionaron el Acuerdo de Paz de La Habana, los criminales son quienes hacen exigencias para continuar hablando de paz.
Ese grupo criminal expidió un comunicado en el que habla de diversos temas del país y de asuntos relacionados con la ‘paz total’ donde muestran un malestar con el presidente Gustavo Petro.
Según ellos, tienen un carácter político que debe respetarse para establecer una mesa de diálogo formal con el Gobierno y se califican como una “guerrilla de elevadas calidades políticas”. Aunque ese tema ha generado bastante polémica en los distintos sectores, para estos criminales ese reconocimiento no debe tener discusión.
“Lamentablemente alguien desde el Gobierno prefirió escuchar la intriga santista, de que habiendo participado ya en un proceso de paz no podíamos participar en un nuevo emprendimiento, se le ocurrió calificarnos, contra toda evidencia, y sin tener en cuenta las causas de nuestro retorno a las armas, como estructura criminal de alto impacto”, indica el comunicado.
Como si esto fuera poco, aseguran que se deben hacer unas correcciones de inmediato al cese al fuego bilateral que se venció en junio de este año y que para ellos es una condición para hablar nuevamente de paz. “Queremos decir al Gobierno Petro que luego de 8 meses de promulgar el decreto 2660, esperamos su corrección para contribuir con nuestra experiencia a la construcción de la paz total”, señala el grupo en un comunicado.
Añade el grupo criminal que “no puede ser eso una guerrilla de elevadas calidades políticas como las Farc-EP Segunda Marquetalia, cuyo carácter está nítidamente expuesto en el Manifiesto del lanzamiento de la nueva guerrilla inspirada en el pensamiento del Libertador Simón Bolívar, y del legendario Manuel Marulanda Vélez”.
Esto significa que los integrantes de la Segunda Marquetalia no se someterán a la justicia y que van detrás de un reconocimiento político para tener una serie de beneficios como los que tienen los integrantes del Partido Comunes y los excombatientes que firmaron el Acuerdo de Paz en 2016.
En varias ocasiones, el comisionado de Paz, Danilo Rueda, ha sostenido reuniones en las montañas del Caquetá y en zonas fronterizas con voceros de este grupo criminal que dice querer la paz, pero sigue delinquiendo y atemorizando a los colombianos.
No obstante, existe otro problema y es que el Gobierno Petro tampoco ha radicado nuevamente una iniciativa para crear el marco jurídico que permita someter a estos grupos criminales y determinar a cuáles se les dará estatus político. Ese es otro asunto que deberá pasar por el Congreso de la República tras el hundimiento de la ley de sometimiento en la pasada legislatura.