Laura Ojeda se refirió a la polémica desatada por su abogado Iván Alfaro, beneficiario de millonario contrato en la UNGRD

Laura Ojeda, la pareja de Nicolás Petro, hijo del presidente, aclaró este martes, 14 de mayo, que el abogado Iván Alfaro Gómez ya no es su defensor y sólo la acompañó durante una audiencia pública en medio de una querella judicial que sostiene con Day Vásquez, la exesposa del exdiputado de Atlántico.

“Agradezco al abogado Iván Alfaro Gómez, quien me acompañó solamente en una audiencia de conciliación en la que llegué a un acuerdo. En compañía de mi abogado Miguel Diez Rúgeles, quien me representó en la audiencia de principio de oportunidad que le negaron parcialmente a Daysuris Vásquez, asistiremos a la audiencia de acusación en su contra el próximo 21 de mayo”, anunció.

A Ojeda le tocó salir a hacer la aclaración y hablar del nuevo abogado porque terminó enredada en un escándalo, ya que, sorpresivamente, Iván Alfaro, su abogado inicial, es beneficiario de un millonario contrato de 24 millones de pesos mensuales en la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo. ¿Ella lo benefició del contrato en calidad de pago por sus servicios profesionales? ¿Intercedió el hijo del presidente para el contrato del penalista en la UNGRD?

Aunque Alfaro Gómez ha desmentido que él sea beneficiario del contrato por petición de Ojeda, Day Vásquez, expareja de Nicolás Petro, siempre les ha dicho a sus seguidores en las redes sociales que estén atentos y pongan el foco en la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo. De hecho, opositores al gobierno creen que esa entidad –cuando la dirigió Olmedo López– benefició a algunos amigos del hijo del presidente. Esa es una versión que ha crecido como espuma, pero que no está confirmada.

Lo cierto es que el propio director de la UNGRD, Carlos Carrillo, ha cuestionado el contrato de Iván Alfaro.

Habló con SEMANA y dijo que él, aunque es contratista, oficia como director jurídico de facto de la entidad. Además, reconoció que le solicitó que finalizara su contrato, pero el abogado se opuso. Al fin y al cabo, pactó un contrato de trabajo con la entidad y alega que se irá en la fecha de culminación.

“Hay varias personas de la oficina jurídica de la Unidad que acreditan como experiencia jurídica haber trabajado con Alfaro. Llenó la oficina jurídica de gente cercana a él, eso es absolutamente evidente. Quien le supervisaba a él el contrato era la directora jurídica, pero ahí lo que había, por lo que dice la gente que estuvo ahí, yo no puedo dar fe de lo que pasó cuando yo no estaba, pero lo que dicen los que estaban, era que la directora jurídica era una subalterna de él”, manifestó Carrillo.

Confesó que él no puede trabajar con Alfaro porque no es de su confianza y no puede pagarle 24 millones de pesos mensuales por contestar peticiones, quejas y reclamos (PQR).

En un comunicado de prensa, el abogado Iván Alfaro Gómez dijo que rechazaba de manera categórica que se hubiera estigmatizado a la ciudadana que representa (Laura Ojeda), “se le vincule con alguna irregularidad o supuesta remuneración indebida, pues se trata de asuntos disímiles que no tienen relación alguna y que las conjeturas maliciosas han querido afectar a su familia, solo por motivaciones políticas, pasiones coyunturales o intereses electorales de quienes acceden a la función pública y tergiversan la información”.