Política
Legalización de la marihuana, a punto de volverse realidad en Colombia; ¿cómo se aplicaría en el país?
La iniciativa fue aprobada por la Plenaria de la Cámara en su sexto de ocho debates.
La Plenaria de la Cámara de Representantes acaba de darle un importante impulso al proyecto de reforma constitucional que legaliza el consumo y la comercialización de marihuana en Colombia.
Por amplia mayoría, la corporación aprobó esta iniciativa, de autoría del representante liberal Juan Carlos Losada, en su sexto de ocho debates. Nunca antes una iniciativa de este tipo había llegado tan lejos en el Congreso de la República.
Tan es así que en los últimos cinco años se presentaron en el Congreso cuatro proyectos para despenalizar la producción, el consumo y la comercialización del cannabis, todos con un resultado en común: no pasaban del segundo debate.
Sin embargo, con el cambio de Congreso, el 20 de julio del año pasado, esta realidad empezó a cambiar, pues por primera vez en la historia del país esta reforma superó seis debates sin mayores contratiempos y se espera que en las próximas semanas supere los dos restantes.
Tendencias
Si se logra aprobar esta iniciativa en su totalidad, Colombia se convertiría en el tercer país de América Latina –detrás de México y Uruguay– en legalizar el consumo en adultos a nivel nacional.
“Hoy la Cámara de Representantes demuestra que somos un país que quiere cambiar la fallida política prohibicionista de drogas a una basada en la prevención y la salud pública”, apuntó el representante Losada.
#HISTÓRICO🚨 Aprobado con 98 votos nuestro proyecto de #CannabisDeUsoAdulto en 6to debate.
— Juan Carlos Losada (@JuanKarloslos) May 9, 2023
Hoy @CamaraColombia demuestra que somos un país que quiere cambiar la fallida política prohibicionista de drogas a una basada en la prevención y la salud pública.#EsHoraDeRegular pic.twitter.com/RQhncCq2im
No obstante, para que esta norma se convierta en realidad, aún debe enfrentar una carrera contra el tiempo para superar sus últimos dos debates, pues debe terminar su trámite antes del 20 de junio, cuando finalizan las sesiones ordinarias del Congreso. Es decir, tiene cinco semanas para superar dos debates, una labor bastante difícil.
Adicionalmente, según explicó el representante liberal Juan Carlos Losada, autor de esta reforma, esta no entrará en vigencia de forma inmediata, sino “12 meses después de su promulgación”, pues en ese lapso se deberá tramitar una norma reglamentaria para definir los detalles de la legalización. Es decir, antes de 2024 no estará completamente legalizada la marihuana en Colombia.
“Después de aprobada la reforma, tendremos que hacer una ley que regule integralmente la producción, distribución, comercialización y consumo de cannabis en adultos”, le explicó a SEMANA el representante Losada.
Adicionalmente, el texto le otorga seis meses al Gobierno para formular una política pública integral en torno a la prevención y atención del consumo del cannabis. Esta obligación supone que el Ejecutivo, en el marco de esta política pública integral, pueda proteger a los menores frente al consumo de marihuana.
No obstante, el importante apoyo que le acaba de dar la Plenaria de la Cámara significa un impulso clave para que esta reforma culmine su trámite de manera exitosa.
El mercado
Pero el potencial económico de la planta, en caso de que se transite hacia la legalización, podría ser mayor. A partir del cannabis, además del famoso cachito, se elaboran esencias medicinales, prendas de vestir, artículos para el hogar y hasta materiales de construcción.
Según un estudio de Fedesarrollo, la marihuana podría generar más empleos y crecimiento para el agro colombiano que el banano y las flores. Se espera que para 2025 esta industria produzca más de 50.000 millones de dólares en el mundo. También puede ser una fuente de recaudo fiscal. Dejusticia estima un recaudo potencial de 1,4 billones de pesos al año.
Potencias mundiales como Estados Unidos también están dando señales de ese nuevo enfoque. Hace dos semanas, el presidente de ese país, Joe Biden, anunció el perdón de condenas federales por posesión de marihuana, una medida que medios internacionales y analistas consideran que allana el camino hacia la despenalización total del uso del cannabis en ese país.
Actualmente, 23 estados legalizaron la venta de la planta y sus derivados de forma total o parcial, y casi siempre con fines médicos. Hay casos como el de Denver, Colorado, donde ya hay más comercios de marihuana que Starbucks.
Otros países están repensando la relación con la marihuana. Portugal la despenalizó. Israel, Canadá y Holanda tienen programas médicos de marihuana. El mundo, inevitablemente, se ha empezado a mover en esta dirección y Colombia parece no querer quedarse atrás.
Sin embargo, a pesar del amplio potencial médico y económico del cannabis, su legalización no es un camino de rosas. Esta industria se enfrenta a complejos problemas. Los vendedores de marihuana legal en Estados Unidos, especialmente en Colorado, deben hacer la mayoría de sus transacciones en efectivo debido a que los bancos, de momento, no han querido financiar totalmente la industria. Abrir cuentas de empresa para esta clase de negocios es casi imposible y aún más difícil solicitar un préstamo.
Con el sistema financiero y sus estrictos controles contra el lavado de activos de espaldas a la industria del cannabis, resulta cada vez más difícil rastrear todos los dineros que se mueven. Y la opacidad en la información, en ocasiones, suele abrir la puerta a la ilegalidad.
A esto debe sumarse el hecho de que, como le explicó a SEMANA el congresista Christian Garcés, del Centro Democrático, la marihuana, por ahora, no se puede exportar.