María del Socorro Pimienta, ex superIndustria, acudió a la justicia para, aparentemente, atornillarse en el cargo; seguiría pasos de su esposo

María del Socorro Pimienta, la exsuperintendente de Industria y Comercio, no salió bien del Gobierno. Gustavo Petro la declaró, de forma sorpresiva, insubsistente mediante el Decreto 2175 de 2023.

No entregó las razones, pero en los pasillos de la Casa de Nariño estiman que la funcionaria era cercana a Euclides Torres, quien financió la campaña presidencial y, al parecer, decidió algunas investigaciones en favor de empresas que tenían cercanía con este empresario del Atlántico.

También se le señala por fallos en los que, al parecer, favoreció a compañías que tenían como apoderado al exsuperintendente Jairo Rubio Escobar. En la mira están posturas que ella tomó en pleitos con Avianca, WOM y la Dimayor. En todas ellas, Rubio actuaba defendiendo a los privados.

Pimienta –quien ya no tenía la confianza del presidente– no se quedó callada. Negó los señalamientos en su contra y, al contrario, disparó un arsenal contra el Gobierno. Además, instauró una tutela contra el Ministerio de Comercio y contra la Presidencia, donde –según parece– pretende atornillarse en el cargo.

Alegó que tiene 56 años y se encuentra próxima a cumplir 57 años, edad de jubilación que le permitiría acceder a una pensión, es decir, es una persona próxima a pensionarse, “sujeto de especial protección constitucional por encontrarse a menos de tres años del disfrute de su pensión de vejez”.

Contó que, además de ser una funcionaria de la Superintendencia desde hace más de 30 años, es madre de tres hijos y todo su núcleo familiar depende económicamente de ella. Uno de ellos, según contó en la tutela, está en condición de discapacidad y “requiere atención médica permanente”.

De acuerdo con la tutela, se le violaron los derechos fundamentales de Pimienta a la igualdad, a la no discriminación, al trabajo, a la estabilidad laboral, a la estabilidad laboral reforzada como madre de una persona con discapacidad.

Algunos juristas con quien habló SEMANA insisten en que por el hecho de que la exsuperintendente tenga un hijo en condición de discapacidad, tiene el derecho a optar por la pensión anticipada de vejez ante Colpensiones, por lo cual no estaría afectada de ninguna manera.

Mientras la justicia define la suerte de María del Socorro Pimienta, su esposo, Alberto de Jesús Gómez Barrios, subgerente Corporativo de la Terminal de Transporte de Bogotá, también intenta, al parecer, atornillarse en su cargo, pese a que ya cumplió el tiempo y la edad para pensión.

SEMANA conoció que Gómez Barrios interpuso una queja ante el comité de convivencia laboral de la Terminal de Transporte por acoso laboral. Sin embargo, después de surtir todo el proceso, se determinó que no existía tal acoso de las directivas de la entidad hacia él.

Colpensiones le certificó a Gómez Barrios en marzo de 2023 que ya tenía la edad y las semanas laboradas y podía acogerse a su pensión, pero él, inconforme con la decisión porque también quiere seguir en el cargo, pidió que le permitieran estar en su puesto hasta sus 70 años.

La empresa está resolviendo el recurso.

Si insiste nuevamente en que él tiene la edad y las semanas cotizadas, la Terminal de Transporte acudirá a sacarlo del cargo. Al fin y al cabo, la empresa tiene un régimen privado y, por tanto, no aplica el fuero de los 70 años.