Política
Mario Fernández Alcocer: las movidas del ‘superpoderoso’ primo de la primera dama, Verónica Alcocer
El exsenador liberal alista su candidatura a la Gobernación de Sucre y tiene a cercanos suyos en el Gobierno.
Un par de semanas antes de la segunda vuelta presidencial, luego de haberle recogido firmas al exalcalde de Barranquilla Álex Char para que inscribiera su candidatura por la Casa de Nariño, los esposos Mario Fernández Alcocer y Ana María Castañeda, senadora de Cambio Radical, se montaron al bus del petrismo y su puerta de entrada fue nada menos que Verónica Alcocer, esposa del presidente Gustavo Petro y prima de Mario Fernández Alcocer.
A partir de ese momento, no han vuelto a bajarse del bus. El que más se ha mostrado ha sido el exsenador Fernández Alcocer, señalado de supuestos vínculos con el paramilitarismo, quien ha hecho política de la mano de la casa Char. Su esposa, Ana María Castañeda, ha sido elegida dos veces al Senado a nombre de Cambio Radical.
Fernández Alcocer ha aprovechado su cercanía con la primera dama para moverse políticamente en los círculos cercanos al Gobierno. Por ejemplo, a pesar de no pertenecer al Pacto Histórico, fue uno de los que asistió a un evento que le organizó el gobernador del Magdalena, Carlos Caicedo, a los congresistas del Pacto Histórico y a Petro, a pocos días de que el mandatario se posesionara. En el evento estaban algunos de los que después se convirtieron en ministros del Gobierno.
Ya con Petro en la Casa de Nariño, Fernández Alcocer se convirtió en una especie de ‘asesor sin sueldo’ de la primera dama. Tan es así que, según evidencia fotográfica conocida por SEMANA, la acompañó y le organizó los recorridos en las dos visitas que hizo Verónica Alcocer al Caribe el año pasado. Una fue el 13 de noviembre, cuando estuvo en Piojó, Atlántico, y la otra el 29 de diciembre, en su recorrido por La Mojana.
Así mismo, apareció junto al presidente Petro y a la primera dama en la visita que hicieron al Carnaval de Barranquilla, en febrero de este año.
Por ahora, según le dijeron a esta revista fuentes del Pacto Histórico en Sucre, Fernández Alcocer parece tener el apoyo de un sector del petrismo y el guiño de la primera dama para ir por la Gobernación de Sucre. Lo que se analiza es si habrá un apoyo directo a su candidatura o si lo que se hace es un “pacto de no agresión”, en el que permiten la llegada del exsenador a la Gobernación, sin apoyarlo públicamente, a cambio de que el petrismo se quede con la Alcaldía de Sincelejo, para la cual tendría como su principal carta a Farid Parrado, un joven empresario, afín al alcalde de Medellín, Daniel Quintero, quien llegó al petrismo de la mano de Rodrigo Ramírez, la mano derecha de Nicolás Petro.
Pero el exsenador liberal parece estarse moviendo incluso más allá de su candidatura a la Gobernación de Sucre. Su cercanía con la primera dama le ha servido también para establecer contacto con ministros y altos funcionarios del Gobierno Petro.
Por ejemplo, asistió a una reunión en la Gobernación de Bolívar en la que estaban también, además de la primera dama, el mandatario de ese departamento, Vicente Blel; el exministro del Interior, Alfonso Prada; la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, y el exdirector de la Unidad de Gestión de Riesgo, Javier Pava. Esta cita fue poco antes del remezón ministerial que realizó el presidente Petro.
Este contacto de Fernández Alcocer con miembros del gabinete ha sido confirmado incluso por ministros y funcionarios del Gobierno Petro, quienes en todo caso han negado que el excongresista haya pedido puestos o contratos.
“No solo me ha visitado cuando era ministro, me visitó varias veces cuando era consejero de la Presidencia de las Regiones y hablamos de una legítima preocupación por el tema de las inundaciones en La Mojana”, expresó el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, en diálogo con el periódico El Tiempo.
Frente a los señalamientos de un supuesto tráfico de influencias, el exsenador fue enfático en negar las acusaciones, aunque reconoció, en diálogo con ese mismo diario, que sí ha visitado el Ministerio del Interior, el Ministerio de Vivienda, la Unidad de Gestión del Riesgo y la Aerocivil, y dejó que ser primo de la primera dama “ayuda, no lo niego, pero no voy en nombre de ella. Voy en nombre de Sucre”.
Beneficiado
A pesar de negar que haya promovido hojas de vida o contratos, no hay duda de que Fernández Alcocer ha salido beneficiado en este Gobierno
Por ejemplo, SEMANA pudo confirmar que Verónica María Valencia, quien trabajó en su UTL cuando era senador y hasta hace algunos meses trabajó en el equipo de la senadora Ana María Castañeda, fue nombrada como asesora en el ICBF.
Otra de las que es asociada como cercana a Fernández Alcocer es Carolina Plata, contratista de protocolo presidencial, quien no obstante es más cercana a la primera dama.
También han resultado beneficiados los miembros de la familia Quessep Bitar, otrora poderoso grupo político de Sucre. Lograron el nombramiento de Ligia Margarita Quessep como embajadora en Italia. Luego se produjo la designación de su hermano Jorge Arturo Quessep Bitar como director regional en Sucre del Departamento Administrativo para la Prosperidad Social y finalmente Jaime Enrique Quessep Bitar llegó al Gobierno como consejero en la Embajada de Colombia ante el Gobierno de Costa Rica.
Estos nombres guardan parentesco con Jairo Fernández Quessep, exalcalde de Sincelejo, quien a su vez es tío y mentor político del exsenador Mario Fernández Alcocer.
Las movidas de Fernández Alcocer también han venido por el lado de su esposa, la senadora Ana María Castañeda, quien es investigada por su partido, Cambio Radical, por “favorecer al Gobierno” al que le hacen oposición. La congresista sincelejana es investigada disciplinariamente por el Consejo de Control Ético por “deslealtad partidista” a la colectividad liderada por Germán Vargas Lleras.
Este proceso se abrió porque Castañeda habría ignorado la decisión de la bancada del partido de retirarse y no participar en la plenaria en la que se eligió a Alexánder López, del Pacto Histórico, como presidente del Senado, pero en lugar de ausentarse, ella regresó y ejerció la votación en contravía de lo acordado previamente.