Política
“Mi posición no cambia”: David Luna sigue en oposición al Gobierno pese a independencia de Cambio Radical
En conversación con SEMANA, el senador aseguró que el partido quiere marcar diferencias con el Centro Democrático.
SEMANA: ¿a qué se debe la decisión de Cambio Radical de ser partido independiente?
David Luna (D. L.): se debe a que el Partido Cambio Radical quiere dejar absolutamente claro que una cosa es el Centro Democrático y Álvaro Uribe, y otra es Cambio Radical y sus miembros. Por esa razón, el día de ayer tomamos la determinación de ser un partido independiente, lo cual nos permite ejercer control al gobierno del presidente Petro de manera estricta y, obviamente, acompañar otros proyectos.
SEMANA: antes de la decisión del partido, usted se declaró en oposición. ¿Cambia su postura?
D. L.: mi posición no cambia en absolutamente nada. Como he dicho, yo voy a seguir ejerciendo oposición, no daño. Señalando cuáles son las grandes contradicciones de la reforma tributaria, que ni es social, ni es equitativa y afecta las clases menos favorecidas de nuestro país. Voy a seguir señalando la incongruencia de no condenar al Gobierno de Nicaragua por los gravísimos atentados contra los derechos humanos. Voy a seguir señalando la grave equivocación de la ministra de Minas al manifestar la intención de comprar gas a Venezuela. Al mismo tiempo, vamos a acompañar el proceso, por ejemplo, de diálogo entre el Gobierno y el ELN. Mi posición es totalmente compatible con la que tomó el partido anoche.
Lo más leído
SEMANA: entonces, ¿tomaron la decisión de ser independientes para diferenciarse del Centro Democrático?
D. L.: cada loro en su estaca. El Centro Democrático representa unas cosas y Cambio Radical representa otras muy diferentes. En Colombia se ha pensado que hacer oposición es decirle que no a todo. El presidente Petro, entonces senador, le decía a todo no. El entonces senador Uribe le decía al gobierno de Juan Manuel Santos que no a todo. Nosotros no representamos eso, somos un partido que tiene principios y valores que nos van a permitir levantar la mano cuando estamos de acuerdo y señalar nuestras posiciones cuando estemos en desacuerdo. Por eso somos el único partido en Colombia que asume una posición de independencia. Una cosa es el Centro Democrático y otra Cambio Radical.
SEMANA: se dice que los jefes de la oposición están en el uribismo. ¿Cómo cree que ha sido la oposición del Centro Democrático?
D. L.: a mí el titular de jefe de la oposición no me preocupa. Es importante para algunos, pero para mí es secundario. Lo que siento es que hay que hacer estricto control, pero también evitar el daño. En ese sentido, respeto profundamente a quienes ejercen su labor de defensor al Gobierno u oposición al mismo. Nosotros representamos una posición totalmente distinta, por eso el partido asume la independencia.
SEMANA: ¿cree que la oposición del Centro Democrático está haciendo daño?
D. L.: Colombia tiene una herencia maldita del Frente Nacional, en que se piensa que todo el mundo tiene que ser gobierno u acomodarse al gobierno de turno para quedar bien frente a la opinión pública. En eso nos equivocamos. Colombia tiene que entender que esa época quedó atrás y que, en estos momentos, quienes gobiernan tienen una responsabilidad y quienes controlan tienen otra. Oposición y no daño significa precisamente la capacidad de poder asumir una crítica, pero también asumir la construcción colectiva. Yo puedo estar de acuerdo en unas cosas con el Gobierno, pero en otras no.
SEMANA: ¿en qué acompañará Cambio Radical al Gobierno?
D. L.: la primera es el diálogo con el ELN. Siento que es fundamental que el país pase la página de la violencia y llegue la reconciliación. En segundo lugar, estamos absolutamente convencidos de que para luchar contra el cambio climático hay que hacerlo con hechos, no con hechos políticos. Por eso votamos en contra de Escazú, porque consideramos que es un saludo a la bandera, que no protege líderes sociales y ambientales e incumplió la obligación de haber hecho consulta previa. Sin embargo, sí estamos sintonizados en la necesidad que tiene nuestro país de adelantar procesos de transición en algunos sectores. En tercer lugar, sentimos que la bandera social de la educación, alimentación y de la salud no es del presidente Petro, es una bandera por la cual nosotros hemos trabajado durante muchos años con hechos concretos. En ese sentido, vamos a coincidir en esos proyectos.