Política
Mientras el presidente Petro pidió reestructurar el Invima, le dieron palo porque aún no ha nombrado director en propiedad
El jefe de Estado encendió las redes sociales con el anuncio sobre el futuro del Invima.
Le dieron con todo al final al presidente de la República, Gustavo Petro, porque desde que llegó a la Casa de Nariño no ha nombrado director en propiedad del Invima, las pullas contra el mandatario colombiano se registraron en las redes sociales.
Los internautas le pasaron factura al mandatario colombiano, luego de una declaración que dio en la denominada toma por Bogotá, en donde destapó su intención de reestructurar el Invima.
“Ya hemos discutido esto antes, pero el Invima tiene que ser reestructurado a fondo, el Invima no debe impedir la producción en Colombia y eso es un tema de incidencia de la nación en Bogotá, porque Bogotá tiene la economía popular más poderosa de Colombia”, manifestó el presidente Gustavo Petro en esa ocasión.
Del mismo modo, el presidente agregó que “es aquí donde tiene que reflejarse los hechos de cambio del presente Gobierno, entonces voy a pedir... habrá una reunión específica para eso, para que empecemos a preparar las reformas que necesita Invima para en lugar de ser un obstáculo, se convierte en un apoyo de la población que trabaja”.
Ese hecho llamó la atención de los usurarios de las redes sociales, quienes se pronunciaron con varios mensajes, lanzándole sablazos a Petro.
“Ni siquiera ha nombrado director del Invima”, dice alguno de los mensajes.
No ha siquiera nombrado director del Invima.
— Flecha Veloz (@SaggitaVelox) September 30, 2023
Escandaloso: en el Estado hay ocho entidades clave con directores encargados. El Invima es el caso más grave
A renglón seguido, han pasado más de 13 meses desde que Gustavo Petro llegó a la Casa de Nariño como mandatario de Colombia y en ese tiempo ha hecho múltiples cambios en las entidades del Estado. Lo preocupante es que en muchas de ellas y de diversos sectores no hay directores en propiedad para que asuman las riendas de los diferentes procesos.
Actualmente, hay ocho entidades del Gobierno que tienen encargos, es decir, personas nombradas provisionalmente sin que puedan tomar decisiones de fondo, bien sea por desconocimiento del sector o sencillamente a la espera de que llegue el nuevo funcionario y asuma las directrices que se tomen.
La Imprenta Nacional, la Dirección Nacional de Bomberos, el Fondo de Pasivo Social de Ferrocarriles Nacionales de Colombia, el Invima, el Sanatorio de Contratación, la Superintendencia de Salud y la Agencia Nacional de Infraestructura están en manos de personas que nombraron temporalmente y que tienen estancados los procesos de ejecución en esos sectores.
De esa lista salió recientemente el Fondo Nacional del Ahorro con el nombramiento de Laura Roa, quien tomó posesión el 23 de agosto, pero con el tiempo se le ha ido conociendo el desorden de la entidad, la cual ha estado en manos de tres personas en menos de un año.
“Yo creo que, más que riesgos, ya existe un daño y se refleja en la bajísima ejecución y en la interrupción de procesos dentro de las entidades del Estado, sobre todo en el nivel técnico, que es donde salen los lineamientos”, dijo el representante Hernán Cadavid.
Aunque la parálisis existe en todas las entidades mencionadas en ejecución, inversión y contratación, el caso más preocupante es del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), que lleva exactamente un año con dos encargos. Primero el de Francisco Rossi y ahora con el de Mariela Pardo, que podría ser extendido por tres meses más.
En esta entidad, que es clave para garantizar la salud de millones de colombianos y la seguridad de los mismos a la hora de consumir un producto, hay un retraso de 27.904 trámites, lo que podría generar un problema de salud pública, debido a que se generaría un desabastecimiento de medicamentos en el país.
En esta entidad, que es clave para garantizar la salud de millones de colombianos y la seguridad de los mismos a la hora de consumir un producto, hay un retraso de 27.904 trámites, lo que podría generar un problema de salud pública, debido a que se generaría un desabastecimiento de medicamentos en el país.
“Si uno pasa de la estadística a los hechos, pues vemos que hay clínicas que tienen problemas para la importación de una aguja o un elemento para procedimientos específicos. Eso es por la inestabilidad del Invima y podría poner en riesgo la vida y la salud de las personas”, aseveró Cadavid.
Esta situación ha llevado a la oposición a preguntarle al presidente Gustavo Petro si en Colombia no existen personas preparadas o con los suficientes méritos para ser directivas de estas entidades, que son clave para el funcionamiento del Estado y que están adscritas a diferentes ministerios.