Mientras los colombianos dormían, Senado subió al bus de la ‘paz total’ a Iván Márquez y dejó vivo el servicio social para la paz

Con 63 votos por el “sí” y cuatro por el “no”, la plenaria del Senado aprobó la conciliación del texto de la prórroga de la Ley de orden público que hizo su trámite por el Congreso para abrir la posibilidad de que el presidente Gustavo Petro pueda adelantar negociaciones de paz.

Aunque la corporación estaba concentrada en la votación de la reforma tributaria, el presidente del Congreso Roy Barreras sorprendió al pedir que se anunciara la conciliación y citara a las plenaria para las 12:05 a. m.

Por esa razón, distintas voces pidieron que el trámite no se adelantara mientras los colombianos estaban durmiendo, pero Barreras continuó sin problema alguno.

La senadora Paola Holguín, del Centro Democrático, partido que no votó dicho trámite, aseguró que no hubo tiempo de estudiar el texto ante la sorpresiva decisión de Roy Barreras. “La conciliación tiene temas muy importantes, por ejemplo, revive el servicio social para la paz que acá se eliminó. Agrega tres artículos nuevos y en el segundo faculta al Gobierno para negociar con las disidencias de Farc”, dijo la congresista.

Holguín señaló que reconocen la importancia de la prórroga de la Ley de orden público, pero que eso no significa tener que votarle todo al Gobierno y más en la madrugada: “Ese proyecto es muy importante para el Gobierno pero también para el país y nosotros consideramos que es una irresponsabilidad a esta hora porque nos acaban de avisar que se votaría la conciliación. El Centro Democrático se retira del recinto”.

La senadora Paloma Valencia también mostró su malestar y recordó que el Centro Democrático ha hecho una oposición constructiva en este proyecto de ley, pero estuvo de acuerdo con que después de una extensa jornada donde se votó la tributaria nadie estaba preparado para seguir con este tema.

“Cuando una cámara elimina un artículo, la otra no puede revivirlo. Eso lo dice una sentencia de la Corte Constitucional, dejamos la constancia para que los colombianos sepan y se entienda por qué nos retiramos”, dijo Valencia.

El senador David Luna fue otro de los inconformes y pidió postergar la votación, aunque su solicitud no fue tenida en cuenta: “Nosotros desde Cambio Radical hemos acompañado este proyecto, pero del afán no queda sino el cansancio. A las 11:55 p. m. nos citaron para votar esta conciliación y después de votar la tributaria así que deberíamos dejarlo para otro día sin problema alguno. No podemos hacer esto en medio de la penumbra”.

A pesar de las peticiones, Barreras sometió a votación el informe de conciliación que fue aprobado rápidamente y solo resta que la Cámara de Representantes haga lo propio para que la iniciativa termine su trámite en el Congreso.

La polémica de fondo es porque se revivió el servicio social para la paz que busca sustituir el servicio militar obligatorio en Colombia. Ese artículo lo había hundido el Senado, pero en el último debate en la Cámara se volvió a incluir en el articulado y, por eso, hizo parte de la conciliación.

El servicio social para la paz duraría 12 meses, por lo que se expedirá un documento que será equivalente a la libreta militar y contará como experiencia laboral. Asimismo, no podrá ser usado para hacer proselitismo y el Gobierno nacional deberá reglamentarlo.

Así las cosas, la vinculación con el Ejércitos sería a través de:

1. Promover la alfabetización digital.

2. Trabajo con víctimas del conflicto y promoción de sus derechos.

3. Cumplimiento de los acuerdos de paz.

4. Promover la política pública de paz.

5. Protección de la naturaleza, biodiversidad, las fuentes hídricas.

6. Promover la paz étnica, cultural y territorial.

7. Protección y cuidado de personas en condición de discapacidad y mayores.

8. Trabajo en la reforma rural integral.

9. Vigía del patrimonio cultural de la nación.

10. Trabajo con damnificados.

11. Educación en gestión de riesgo.

Otro punto que generó polémica fue la inclusión de un artículo que permitirá a Iván Márquez subirse al bus de la ‘paz total’. En cuatro líneas que están escritas en el artículo segundo, se lee claramente que las puertas se abren para el excomandante de las Farc-EP y las narcobandas.

“Se entenderá como parte de una estructura armado organizada de crimen de alto impacto a los exmiembros de grupos armados al margen de la ley, desmovilizados mediante acuerdos pactados con el Estado colombiano”, dice parte del artículo.

Lo que no queda claro es cómo será la ruta para que los disidentes de Farc y otros criminales dejen sus actividades ilícitas, pero sería una facultad directa del Gobierno del presidente Gustavo Petro: “Se podrá hacer acercamientos y conversaciones con grupos armados organizados o estructuras armadas organizadas de crimen de alto impacto, con el fin de lograr su sometimiento a la justicia y desmantelamiento”.

El comisionado de Paz, Danilo Rueda, confirmó en días pasados que estuvo reunido con Márquez y que él tiene toda la disposición de iniciar un proceso de paz. El alto comisionado de Paz, pese a que no dio detalles del lugar del encuentro con Márquez, ha dicho en repetidas oportunidades que el jefe de la Segunda Marquetalia estaría en Venezuela con serios problemas de salud.