Política
Migración Colombia explora la posibilidad de firmar contrato con la Imprenta Nacional para producción de cédulas de extranjería
El anuncio se da en medio de la adjudicación de la producción de pasaportes en la Cancillería. Esta vez se buscará lograr esa producción a través de la empresa pública.
El país podría vivir una nueva situación con la producción de identificaciones, cuando se registra el escándalo de la millonaria licitación para la realización de pasaportes de la Cancillería, que ha causado gran revuelo.
El director de Migración Colombia, Carlos Fernando García Manosalva, aseguró que se está explorando la posibilidad de no abrir la licitación con un oferente privado, sino manejar el tema con la Imprenta Nacional, que es de carácter público, para la producción de la cédula de extranjería de personas de otros países que residen en Colombia.
“La Unidad Administrativa Especial Migración Colombia ha optado por no llevar a cabo un proceso licitatorio tradicional, sino que ha decidido proceder con la modalidad de selección de contratación directa mediante la celebración de contratos interadministrativos. Esta elección se fundamenta en disposiciones legales que permiten esta práctica cuando existe una relación directa entre las obligaciones del contrato y el objeto de la entidad ejecutora”, aseguró García Manosalva.
El funcionario aclaró que tomó esta decisión porque tiene la potestad legal de hacerlo y porque en este contrato en específico se busca combinar experiencias para la impresión de los documentos. “Resulta oportuno aclarar que, para los anteriores procesos contractuales se solicitó cotización a la Imprenta Nacional de Colombia, sin que esta manifestara interés, lo cual habilitó la apertura del proceso licitatorio y la adjudicación del contrato por esta modalidad de selección”, afirmó el director de Migración.
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Por su parte, se refirió a cómo se determinará el valor del contrato y señaló que será a través de la base de las cotizaciones proporcionadas a la misma Imprenta con respecto a lo presentado por los proveedores privados.
“Estas cotizaciones, junto con un estudio de mercado, servirán como referencia para establecer el costo de producción y distribución de las Cédulas de Extranjería. Es importante destacar que este valor se ajusta en comparación con precios anteriores, considerando que no se había actualizado desde 2019″, señaló García Manosalva.
La vigencia de la implementación tendrá una duración de 27 meses en los cuales se deberán llevar a cabo la impresión de las cédulas de extranjería. García afirmó que este plazo permitirá que se desarrollen los documentos con altos estándares de seguridad.
“En resumen, el convenio entre Migración Colombia y la Imprenta Nacional de Colombia representa un paso importante hacia la mejora de los procesos de identificación para extranjeros, garantizando eficiencia y cumplimiento de las normativas vigentes”, aseguró el director de Migración.
El hecho llama la atención porque se anuncia en medio de la polémica que se ha generado por el lío de los pasaportes en el que esa licitación por 599 mil millones de pesos quedó en manos de Thomas Greg & Sons. El secretario general de la Cancillería, José Antonio Salazar, decidió suspender la urgencia manifiesta y adjudicar el proceso a la empresa de origen británico, lo que despertó una fuerte polémica.
Uno de los que ‘regañó' a Salazar por esa decisión fue el presidente Gustavo Petro, quien cuestionó el proceder de la empresa. “Lo que se está construyendo en Colombia puede afectar definitivamente la democracia. En el último año, han logrado que Thomas & Sons propiedad de los hermanos Bautista y con lobby de políticos muy, pero muy poderosos, pueda controlar toda la base de datos de los colombianos en la Registraduría y al mismo tiempo controlan el escrutinio de las elecciones”, afirmó Petro.
Igualmente, el mandatario declaró insubsistente a Salazar y nombró en su cargo a Paola Andrea Vásquez Restrepo, quien es consejera de relaciones exteriores de la Embajada de Estados Unidos en Colombia.
Salazar afirmó en entrevista con SEMANA que no le consultó a nadie esa decisión y que actuó con criterio propio. “Yo no se la consulté sino a mi conciencia. Cuando el ministro encargado Luis Gilberto Murillo me delegó de nuevo la representación legal del Fondo Rotatorio, yo entendí que su instrucción era cumplir la Constitución y la ley, y cumplí con el deber como buen ciudadano. Eso es lo que hice”, aseguró el exsecretario general de la Cancillería.