POLÍTICA
Monseñor Darío Monsalve se destapa y habla de debilidades de Otty Patiño: “La paz total está desdibujada, no tiene rostro ni ruta”
El exarzobispo de Cali y acompañante del proceso de paz con el ELN habló con SEMANA e informó que el ex alto comisionado para la Paz Danilo Rueda sigue buscando contactos con grupos armados en pro de la paz.
SEMANA: ¿Por qué se pregunta qué pasa con la paz total? ¿Por qué dice que, al parecer, ya no es la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, sino una consejería más del Gobierno Petro?
Darío Monsalve (D. M.): Digo al parecer porque eso es lo que se escucha, pareciera una desmovilización grande de lo que se venía haciendo con la oficina del anterior alto comisionado, ahora el anterior funcionario (Danilo Rueda) arranca con un tema que se llama ‘La paz con toda’. De parte del Gobierno lo que se siente, parece, es una actitud como de regreso a lo militar más que a esa urgencia de construir paz desde las bases, desde los territorios.
SEMANA: ¿No está contento con la labor del Alto Comisionado para la Paz, Otty Patiño?
D. M.: Yo respeto y aprecio a Otty Patiño, hemos estado ahí sentados en la mesa, él como jefe de la delegación del Gobierno y nosotros acompañantes con la ONU. Es un hombre muy inteligente, muy capaz, no sé, no creo que para una cosa que exige tanta dinámica, tanta capacidad de movilizarse y agilidad física y mental, no sé si sus condiciones son las que podían haberle dado continuidad a lo hecho por Danilo Rueda y ponerlo en proceso de evaluación. Pienso que este Gobierno podría estar en este momento evaluando, focalizando de nuevo ese proceso, relanzándolo. Yo esperaba que para el 7 de agosto fueran a relanzar las cosas, pero no siento que se esté haciendo nada de eso, de evaluar, de focalizar ni de hablar de relanzamiento. La gente está con preguntas, como yo, que no tienen respuestas inmediatas.
SEMANA: ¿Qué le falta a Otty Patiño?
D. M.: El problema no es Otty, son los funcionarios. El tema es que si hay una política de paz total que surgió del Gobierno Petro, a mí me parece que nunca se libreteó esa política. No se conoce, no digamos un libreto, porque la paz se hace focalizándola en la población que es la que le da permanencia. Más que paz total es la paz permanente, es lo que la gente necesita.
SEMANA: Dice que Otty Patiño es muy capaz, pero no tiene el dinamismo que requiere la paz total.
D. M.: Es que su misma edad y figura, yo hablo desde mi edad de viejo también, cuando ya nos acercamos a los 80. Está muy bien que seamos altos consejeros, pero para estar en este lleve y traiga y el ajetreo de construir paz en una sociedad violenta, es otra cosa. Esto no se puede centrar en una oficina del alto comisionado de paz ni en un consejero, esto requiere –si se habla de paz total– un gobierno totalmente convertido hacia la paz, es decir, todos los ministerios, la fuerza pública, tienen que reinterpretar su oficio en función de la paz, empezando por el Ministerio de Defensa. Volver al tablero de la guerra no es lo mejor.
SEMANA: Pero la fuerza pública tiene que actuar, el Ejército, la Policía... están maniatados, mientras las disidencias y otras guerrillas se fortalecen.
D. M.: Por eso hay que delimitar una política de paz y de seguridad, no son dos cosas que se opongan, pero sí se deben complementar.
SEMANA: ¿Hay intenciones de relanzar la paz total del Gobierno Petro?
D. M.: No, eso lo he propuesto yo, no he escuchado que lo vayan a hacer. Como terminó el período de Danilo Rueda y lo cambiaron, uno esperaba “hombre, evaluemos qué es lo que llevamos, miremos si lo que tenemos está bien sustentado”.
SEMANA: Para tratar de entender, ¿no se conoce la ruta de la paz total, no hay claridad por parte del Gobierno?
D. M.: Sí, usted lo ha dicho, yo dije al principio libretear lo que se hace. La palabra es inadecuada, pero la paz no empieza un día determinado, sino construyéndose desde hace mucho, en el país ha habido momentos en los que el Estado y las organizaciones de cúpulas políticas han tenido que tomar decisiones para tratar de sacar al país del desangre. Nos hemos dedicado a consolidar unos procesos y unos mecanismos de paz desde la sociedad civil. La población es la que tiene que empoderarse de estos procesos.
SEMANA: ¿Por qué relanzar la paz total de Petro?
D. M.: Todos tenemos que evaluar, si se lanzó en el año 2022, en el inicio del gobierno y que entusiasmó mucho al país, pero no se creía que fuera un calificativo más al lado de la paz, como ha venido ocurriendo, por ejemplo, paz con legalidad, con seguridad... todos esos apellidos que la han puesto la paz con Juan Manuel Santos, Iván Duque, entre otros. Se creía que era algo mucho más sustantivo, estructurado, pero pues ahora se genera un desconcierto, sobre todo porque el anterior comisionado (Danilo Rueda) ahora está convocando a todo ese universo de organizaciones armadas a las que les tocó puertas y a otras que no alcanzó. A mí me invitan y a la fundación que estoy tratando de levantar.
SEMANA: Habla de relanzar la paz total para hacer un balance...
D. M.: Bueno, sí, para evaluar.
SEMANA: Y, ¿cómo la evalúa? Con el ELN la negociación no parece avanzarse más, solo se negocia con el 40 % de las disidencias...
D. M.: Para mí sigue siendo un interrogante, yo no le he visto rostro a la paz total, es una cosa completamente desdibujada.
SEMANA: ¿Danilo Rueda sigue avanzando en reuniones con grupos armados?
D. M.: ¿No ha visto en redes sociales la convocatoria?, se llama la Paz con toda.
SEMANA: ¿Y en calidad de qué actúa Danilo Rueda?
D. M.: No sé, a nivel personal, no sé si a través de él hay organizaciones que lo están apoyando. Me da la impresión que Danilo Rueda trabajó los primeros meses con una oficina reducida al mínimo, creo que seis personas, imagínese. Después le dieron algo de presupuesto y logró, entiendo, 40, 50 personas, pero en esas lo cambiaron. Recibimos esta invitación, nos parece interesante que la experiencia de las personas se ponga al servicio de la construcción de paz.
SEMANA: Cualquiera diría que Danilo Rueda no está autorizado por el Gobierno para hablar con grupos armados.
D. M.: Pues para construir paz no hay que estar autorizado. No quiero que se le mate la ilusión, sino que se entienda por dónde va el asunto.
SEMANA: Lo escucho inconforme en esta entrevista...
D. M.: No es una inconformidad con el Gobierno, yo no tengo ninguna relación. No conozco personalmente al presidente Gustavo Petro. Como ciudadano tengo mucha inquietud.