“Muy pronto, el colega me podrá traer cigarrillos de marihuana Marlboro”: Ernesto Samper a Álvaro Uribe

El expresidente Ernesto Samper le contestó a Álvaro Uribe las inquietudes que presentó el líder de la oposición sobre la posibilidad de legalizar el consumo de cannabis de uso adulto en el país. Samper le pidió a Uribe ir a Estados Unidos y traerle cigarrillos de marihuana de una de las principales comercializadoras de tabaco.

“Uribe plantea sus razones para oponerse a la legalización de la marihuana. Le recomiendo a mi antiguo amigo viajar a EE. UU., donde en 5 Estados se ha legalizado su producción, consumo y distribución. Muy pronto, el colega me podrá traer cigarrillos de marihuana Marlboro”, afirmó Samper.

Uribe había compartido un documento del Instituto Nacional sobre el Abuso de las Drogas de Estados Unidos, en el que se investigaron algunos resultados de la apertura que ha tenido ese país al consumo de esa sustancia tanto medicinal como recreativo y las consecuencias que podría traer para la salud en los consumidores.

Por ejemplo, en uno de los puntos se habla de que distorsiona la percepción y deteriora la memoria a corto plazo y la capacidad de juicio. “Puede disminuir el desempeño escolar o laboral y crear riesgos al conducir un vehículo”, advierte el informe compartido por Uribe.

Asimismo, establece que afecta partes del cerebro e impide su desarrollo, especialmente en la etapa inicial de la adultez. “El consumo regular por parte de los adolescentes puede tener efectos negativos y duraderos en su desarrollo cognitivo; eso los pondría en una situación de desventaja competitiva y posiblemente interferiría con su bienestar de varias otras maneras”, señala el informe.

También asegura que el consumo de marihuana puede llevar a un consumo problemático, que es conocido como “trastorno de marihuana”, que puede derivar en cuadros de adicción graves. Según datos del informe, el 30 % de las personas que consumen esta sustancia pueden sufrir este trastorno. Y quienes consumen desde antes de los 18 años tienen entre cuatro y siete veces más posibilidades de adquirir ese problema que las personas adultas. Asimismo, que los efectos cognitivos a largo plazo dependerán de la edad en la que la persona haya empezado a consumir marihuana.

Igualmente, se referencia un estudio hecho en Nueva Zelanda en el que se halló un trastorno persistente por consumo de marihuana que arrancó en la etapa de la adolescencia y que fue asociado a una pérdida de seis a ocho puntos en promedio del coeficiente intelectual a mitad de la etapa adulta de la persona, un problema que no se resolvió posteriormente.

“Quienes consumieron marihuana mostraron efectivamente una disminución notable en la habilidad verbal (equivalente a cuatro puntos de coeficiente intelectual) y en conocimiento general entre los años de la preadolescencia (de nueve a 12 años, antes del consumo) y la etapa final de la adolescencia y el comienzo de la adultez (de 17 a 20 años)”, señala el informe.

También se habla de que el consumo de marihuana es la puerta a otras drogas y, por ende, a su adicción, no solo de sustancias ilegales, sino que en muchos casos sucede con las legales, como por ejemplo con el alcohol, que según el estudio, es más propenso que en solo tres años la persona pueda caer en esa adicción, a diferencia de que si no consumiera cannabis. Igualmente, se relaciona a trastornos de consumo de otras sustancias como la nicotina.

El informe compartido por Uribe advierte que una persona que consume todos los días marihuana podría ver su nivel intelectual disminuido y que los efectos negativos en la atención y la memoria durarían varios días mientras se disipan sus efectos.

“Hay datos considerables que sugieren que los estudiantes que fuman marihuana tienen resultados educativos más pobres que sus pares que no fuman”, se establece en el informe, y que su consumo está asociado a menores logros educativos. Se habla de que la persona podría ser más propensa a riesgos o accidentes.