Diálogos de paz
Negociadores del Gobierno Petro viajaron a Venezuela para intentar salvar mesa de diálogo con el ELN
Sin embargo, para la guerrilla la negociación está estancada y el Ejecutivo ha incumplido varios compromisos. Llevan meses sin avances significativos.
Para algunos sectores la negociación de paz que tenía mayores avances era la del ELN, pero dicho diálogo está congelado desde hace meses y la guerrilla asegura que la mesa está en crisis. No obstante, algunos negociadores del Gobierno Petro viajaron a Caracas (Venezuela) para adelantar varias reuniones y definir el futuro del mismo.
La jefe de la delegación de paz del Gobierno Petro, Vera Grabe, anunció la llegada de parte de la delegación al vecino país y se espera que este viernes las partes se encuentren para intentar destrabar el diálogo. “Estamos en Caracas para continuar con los diálogos con el ELN. El gobierno colombiano sigue firme con la paz, reafirma su voluntad y compromiso para cumplir los acuerdos”, dijo.
La delegación no viajó completa porque justamente se esperará que pasa en esas reuniones informales para determinar si vale la pena que todo el equipo negociador se desplace. Por ejemplo, el senador Iván Cepeda se quedó en Colombia para participar de las discusiones de la reforma pensional, pero en las próximas horas llegará a la capital venezolana.
Grabe dijo que la postura del Gobierno Petro es continuar con la negociación a un buen ritmo. “Venimos a buscar salidas para las crisis y estamos comprometidos con todos los puntos planteados que incluyen la participación, el cese al fuego, los compromisos humanitarios y la construcción de una mesa nacional para el diálogo”.
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Sin embargo, la jefe negociadora no hizo referencia a las declaraciones que han dado desde el ELN desde donde han calificado al Ejecutivo como incumplido, según ellos, porque han faltado a lo pactado en la mesa de diálogo.
Por esa razón, se desconoce cómo se destrabará el diálogo de paz, ya que, la guerrilla sencillamente aspira a que el Gobierno Petro diga públicamente que se equivocó e incumplió el acuerdo al iniciar unos diálogos en el suroccidente del país con alias HH comandante del Frente Comuneros del Sur, estructura que ha puesto a tambalear los diálogos en los últimos meses.
Para la guerrilla eso ha sido como una traición y el Gobierno ha insistido en que no renunciará a espacios de diálogo para buscar la paz en Colombia por lo que el único camino, por ahora, es que el Ejecutivo le acepte las condiciones a la guerrilla. Pablo Beltrán, jefe de la delegación guerrilla, ha dicho públicamente que eso es lo que están esperando para reactivar la negociación.
El pasado 12 de abril se daría una reunión que finalmente fue aplazada y la guerrilla aseguró que el proceso estaba congelado. El Comando Central del ELN está molesto porque el gobierno, al tiempo que negocia la paz con ellos, avanza en la desmovilización de un grupo de esa guerrilla que se rebeló en Nariño.
Por la postura de los guerrilleros, el presidente Gustavo Petro se refirió al congelamiento de las negociaciones y dijo desde sus redes sociales que, sin desmedro del diálogo regional para construir un Nariño en paz que ya ha iniciado, “mi gobierno mantiene como escenario de diálogos de paz con el ELN la mesa nacional instaurada”.
Agregó que “es importante que esa mesa tenga integrantes de los diferentes frentes regionales del ELN para pasar del diálogo a la negociación definitiva”. Es decir, Petro está tratando de unir una sola mesa de negociación, pero no es fácil.
De hecho, el comando armado de Nariño, que hace parte del ELN tomó distancia del Coce, buscaron directamente al gobierno y empezaron a entablar conversaciones. El gobernador de Nariño, Luis Alfonso Escobar Trujillo, ha servido de mediador y ha celebrado los avances.
La próxima reunión entre el Gobierno Petro y el ELN será clave para determinar el futuro del diálogo, pero lo cierto es que el tiempo ha demostrado que la guerrilla no se levantará de la mesa y, como en ocasiones anteriores, dilatará el diálogo para seguir en sus actividades delictivas y fortalecerse en el territorio colombiano.
El Gobierno Petro tendrá que determinar si deja que la guerrilla tome el control de las negociaciones.