Entrevista
Otty Patiño espera que el ELN cumpla con el cese al fuego, aunque reconoce que en algunas regiones “hay situaciones complejas”
En entrevista con SEMANA, el jefe negociador del Gobierno se refirió al cese al fuego anunciado con el ELN y a su pasado como exguerrillero del M-19.
Otty Patiño es el jefe negociador del Gobierno con el ELN. Llegó a ese cargo gracias a la confianza que le ha depositado el presidente Gustavo Petro para ese proceso y porque lo conoce desde los tiempos en que militaban el M-19.
Junto a Patiño, hay otros exintegrantes de la guerrilla en importantes cargos en el Estado. En entrevista con SEMANA, Patiño se refirió a esos hechos, a su pasado y cómo evalúa el cese al fuego que se anunció recientemente con la guerrilla.
SEMANA: Como negociador del Gobierno con el ELN, ¿cree el el cese al fuego se cumplirá?
OTTY PATIÑO (O.P.): Esperamos que se cumpla, creo que hay voluntad política, por lo menos de la delegación. Hay dificultades en algunos frentes, no porque no quieran el cese al fuego, sino porque se enfrentan con situaciones complicadas. Pero, en fin, creo que vamos a lograr que ese cese al fuego cubra todas las estructuras del ELN y no solamente a las que están con el ELN más consolidado. Creemos que hay algunas regiones del país donde frentes del ELN enfrentan situaciones complejas y además los líderes no son iguales. Pero, tenemos la firme convicción de que es el mejor camino para llegar a la paz y sobre todo para permitir que haya una participación democrática de este país, que es a través del cese al fuego de las hostilidades.
SEMANA: Usted fue uno de los principales líderes del M-19 y hoy es negociador del Gobierno con el ELN, ¿qué reflexión hace sobre ese hecho?
O.P.: Es paralela, pero es un poco paradójica porque en este momento yo estoy representando al Gobierno y por lo tanto también al conjunto del Estado, no me puedo desligar de esa situación. Y al otro lado, está una guerrilla que, si bien plantea que está de acuerdo con cambios, de todas maneras está en la ilegalidad y está al otro lado de la mesa. En ese sentido, es paradójico porque estamos frente a frente, enfrentados, porque yo y muchos de nosotros que cruzamos esa línea de la ilegalidad, pasamos a ser constructores de un nuevo país, mientras que ellos todavía están en el viejo país. Estamos tratando de que crucen ese puente que los separa de nosotros. Mientras no crucen ese puente no podemos decir que están del mismo lado. Y desde luego, dado que uno tuvo la experiencia porque en carne propia hubo que cruzar ese puente, también contribuir a que ellos lo puedan hacer.
SEMANA: ¿Qué opina de que hoy usted y otros altos funcionarios del Gobierno pertenecieron al M-19, entre ellos el mismo presidente Petro?
O.P.: Me parece normal. En primera instancia, demuestra nuestra lealtad con el proceso de paz y creo que también ha sido ese reconocimiento que se ha manifestado de distintas maneras. Con el presidente Petro, además de su coherencia y su capacidad discursiva, también reconoce en él una persona que no le ha fallado a la paz. Hay personas, por ejemplo la presidenta del Consejo Nacional Electoral, que viene desde muy abajo y después de haberse desmovilizado estudió derecho y fue ascendiendo en la rama jurisdiccional para ocupar ese cargo ahora. Creo que es uno de los casos más meritorios. Se deben resaltar las capacidades propias de las personas y él mérito, no solo el hecho de haber sido del M-19, sino también que haya venido construyendo unas capacidades en este tiempo. Nosotros hicimos de ese proceso una palabra para ser cumplida.
SEMANA: ¿Qué les responde a quienes los critican por ese pasado?
O.P.: El pasado es el pasado. Además, ese pasado tiene sus luces y sus sombras. Creo que nosotros fuimos luchadores, luchamos por un país distinto, algo conseguimos gracias a nuestra lucha y a nuestro proceso de paz, que hubo una constituyente. De tal manera que todos en Colombia le debemos a ese proceso y a esa lucha, no solamente del M-19, sino luchas sociales, de los estudiantes, de los trabajadores, de mucha gente que ha venido trabajando para que este país cambie, para que deje de ser un país excluyente y sea un país más igualitario y sea en definitiva un país mejor. En definitiva, nos falta mucho, pero ahí vamos.