Polémica por licitación en MinCultura: fundación que ganó contrato para administrar el Museo Nacional pide que se declare desierta

Sigue la polémica por la licitación para administrar el Museo Nacional y otras siete exposiciones en el Ministerio de Cultura. Esta vez, la Fundación Arteria, a la que se le adjudicó el contrato, pide que se declare desierto el proceso.

La fundación ganó una licitación pública por sus competencias e idoneidad en el proceso, obteniendo el máximo puntaje. A través de una resolución se les adjudicó el contrato, pero la cartera designó otro comité evaluador, que decidió atender a una observación extemporánea de una empresa llamada CorpoElite, que dijo que se hizo un mal cómputo.

Finalmente, el Ministerio de Cultura decidió adjudicarle el contrato a la misma empresa que hizo la observación.

Frente a este panorama, la Fundación Arteria pidió que el proceso, que se le adjudicó a otra empresa después de haber emitido una resolución que les entregaba el contrato, se declare desierto por violación a sus derechos.

En un oficio con fecha del 8 de abril, Nelly Rocío Peñaranda Rodríguez, representante legal de la fundación, hizo llegar un incidente de nulidad al Ministerio de Cultura, pidiéndoles que se descarte todo el proceso que se ha realizado hasta la fecha.

“Con el ánimo de garantizar los derechos de todos los proponentes del proceso y, en particular los de la fundación, así como la prevalencia de los principios de la función administrativa y de contratación estatal, en especial los relativos a transparencia, moralidad y legalidad, respetuosamente solicito proceda a la declaratoria desierta del proceso de selección por cuanto no están dadas las condiciones para la selección objetiva del contratista”, se lee en la carta.

De acuerdo con la firma, esto se sustenta en que existe “evidente violación del derecho al debido proceso por encontrarse el acto de revocatoria viciado de nulidad”.

De acuerdo con Arteria, los vicios en el proceso solo se pueden corregir declarando desierto del proceso.

“Consideramos que los vicios en el proceso hacen que sea imposible la selección objetiva y la garantía de los derechos de los proponentes y, por lo mismo, la única forma de sanear las irregularidades es la declaratoria desierta del proceso”, indica el documento.

La solicitud fue debidamente publicada en el Secop II, donde el Ministerio de Cultura deberá revisar la observación.

Los motivos detrás del pleito

Fue una invitación pública del 27 de febrero de 2024, en la que la cartera estableció como objeto “aunar recursos humanos, técnicos, administrativos y financieros” para colaborar en varias actividades en varios museos, entre ellos el Juan del Corral, Rafael Núñez, Antonio Nariño, Guillermo León Valencia, Casa Natal General Santander y su parque Grancolombiano, Antón García y Alfonso López.

El proceso siguió su curso, se presentaron las observaciones en las fechas estipuladas en el Secop. Finalmente, el mayor puntaje lo consiguió la Fundación Arteria y se le adjudicó el contrato a través de una resolución con fecha del pasado 19 de marzo.

De acuerdo con el documento, se le entrega por “cumplir con los requisitos habilitantes jurídicos, financieros, técnicos de experiencia y haber obtenido el mayor puntaje, acreditando la experiencia e idoneidad exigidas”.

A pesar de que todo estaba listo, después de cerrado el proceso, el Ministerio de Cultura designó otro comité evaluador. De forma sorpresiva para la fundación, se les revocó la adjudicación el pasado 3 de abril.

Con esto, el comité evaluador aseguró que hizo un cómputo erróneamente, por lo que adjudica el contrato a la firma CorpoElite. De esta forma, se ordenó realizar “el acto de adjudicación correctamente, en atención a los principios de transparencia e igualdad”.

Todo esto, según Fundación Arteria, a raíz de que el Ministerio de Cultura recibió una observación por parte de CorpoElite de forma extemporánea.

“MinCultura reconoce que decidió aceptar una solicitud extemporánea de otro proponente para revisar la adjudicación luego de haberse vencido los tiempos legales establecidos por el mismo Ministerio de las Culturas y los Saberes para cualquier reclamación. Así, el comité evaluador rompió las normas de contratación, lo que plantea un favorecimiento a la entidad que presentó esa solicitud, en contra de los intereses de la Fundación Arteria, que se mantuvo en todo momento dentro del marco legal”, indicó la fundación en un comunicado.

Además, según ellos, entre los argumentos del comité evaluador está que se puede revocar una adjudicación si “se demuestra que el acto se obtuvo por medios ilegales”. Sin embargo, Arteria asegura que MinCultura no ha precisado de qué se trata dicha ilegalidad.

“Reiteramos que la Fundación Arteria no ha cometido ningún acto ilegal y se ha mantenido por dentro de las condiciones del proceso competitivo. En un derecho de petición hemos solicitado al Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes que aclare esta situación que perjudica el prestigio de la Fundación Arteria y el buen nombre y honra de quienes trabajamos en ella”, exigió la fundación en un comunicado.