Presidente Gustavo Petro admitió y justificó desde México una ‘cruda y dolorosa realidad’: “Por eso no tratan bien a los colombianos aquí”

El presidente de la República Gustavo Petro admitió una ‘triste realidad’ que han vivido los colombianos en el último tiempo en México, ilusiones de miles de familias que se han desvanecido porque no se admite el ingreso a ese país, panorama que abordó el mandatario en un encuentro con la comunidad colombiana en el país centroamericano.

En ese sentido, el jefe de Estado fue tajante en admitir que fenómenos de migración, sumada a una crisis humanitaria como la que se registra en el tapón del Darién, tiene como consecuencia que en países como México no traten bien a los colombinos; de acuerdo con el presidente Petro, las autoridades de ese país piensan que los ciudadanos van a cruzar el “Río Bravo”.

De la misma manera, en su reflexión le echó la culpa también del fenómeno migratorio al cambio climático, argumentando que ese fenómeno genera un desplazamiento hacia el norte, pero que en ese punto las personas son recibidas con “metralla y represión”.

“El miedo ha generado una extrema derecha que crece más en el norte como creció en 1933. Avanza porque la sociedad está llena de miedos, el miedo a los inmigrantes es contra nosotros, lo que sucede en el tapón del Darién, en la frontera entre Colombia y Panamá, es un escenario de crisis y desastre humanitario, porque han migrado más de 200.000 personas, que se unen a millones más”, sostuvo Petro.

Y agregó: “Por eso no tratan bien a los colombianos aquí, porque creen que van a cruzar el Río Bravo”.

“La crisis climática puede acabar con todo, el sur y el norte; el sur se acaba primero, las islas, y luego el continente. La tierra va a seguir, pero la vida va a ser afectada de tal manera que nadie puede garantizar hoy que sus hijos vivan mejor que sus padres. Si uno mira con cuidado la crisis climática, lo que habría que afirmar es lo contrario: la degradación de la vida se puso en marcha”, sentenció en su declaración.

Xenofobia persigue a colombianos en México

Hace varios días, se conoció un caso en el que un grupo de colombianos que iba a México recientemente no habría podido entrar al país azteca por un nuevo episodio de xenofobia del que fueron víctimas en el departamento de migración de ese país.

De acuerdo con Sergio Bueno, CEO de Due Diligence US Corp, quien era parte del grupo, la compañía les había dado un viaje al equipo de trabajo para implementar una estrategia llamada “cultura del trabajo flexible”.

Según lo que le relató el empresario a El Heraldo: “Quisimos hacer un viaje a México con nuestros contratistas, que son contadores, administradores y personal de marketing”.

“La idea era estar cinco días en Ciudad de México y otros cinco en la Riviera Maya; al día siguiente de la llegada teníamos un paseo en globo, visita a las pirámides, entre otros sitios, y los Airbnb prepagos para la estadía de las 16 personas. Todas las reservas y sus pagos estaban impresos como soportes y fueron presentados en la entrevista que nos realizaron al llegar”, añadió.

No obstante, el trato que recibieron, el pasado 20 de octubre, en el Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México fue malo, pues el agente de Migración les quitó los pasaportes, los retuvieron en una habitación pequeña y los insultaron.

“Antes de entrar al cuarto te quitan todo, te hacen quitar los cordones de los zapatos y te separan de tus pertenencias”, detalló.

Denunció además que no tenían agua ni baños, y finalmente volvieron a Colombia el 21 de octubre, después de haber pasado la noche allí sin haber comido.

Medidas

Ante diversas denuncias, el 25 de octubre, los gobiernos de Colombia y México lograron llegar a un acuerdo para mejorar las condiciones de ingreso a ese país, luego de la ola de rechazos que han recibido los ciudadanos colombianos que han intentado visitar territorio mexicano durante los últimos meses.

Solamente en lo corrido del presente año, más de 21.000 colombianos han sido inadmitidos en México, pasando por condiciones inhumanas que han sido denunciadas a través de redes sociales y medios de comunicación, por lo que la Cancillería buscó la manera de reunirse lo más pronto posible con las autoridades de México para encontrar una solución.