Presidente Gustavo Petro aterrizó en Colombia para atender crisis de escasez de gasolina en el suroccidente del país

Después de cinco días de gira en Europa, el presidente de la República, Gustavo Petro canceló la agenda que tenía prevista en Toulouse Francia, donde había recibido la Medalla de Oro de la ciudad de manos del alcalde, Jean-Luc Moudenc.

A su llegada a Francia, el presidente había asegurado que el hidrógeno verde y la cooperación en materia aeroespacial hacían parte de los temas clave de su agenda. Incluso el mandatario también tenía previsto atender a una conferencia en la escuela de negocios de Toulouse para brindar un conversatorio.

El jefe de Estado logró reunirse con el Prefecto de la Región Occitania y de la Región del Alto de Garona, señor Etienne Guyot después de llegar a Francia y antes de suspender el resto de actividades programadas. Petro salió de Toulouse hacia Colombia haciendo varias escalas aéreas entre ellas una parada en Tenerife, Islas Canarias y en Belem, estado de Pará en Brasil por abastecimiento de combustible.

Finalmente el mandatario llegó al Valle del Cauca después de anunciar vía Twitter su deseo de regresar a Colombia y atender la crisis en el sur occidente del país donde el cierre total de la vía Panamericana desde hace doce días por los derrumbes en Rosas, Cauca, tiene desabastecido a Nariño en diferentes frentes.

La razón por la cual el presidente no pudo llegar directamente al aeropuerto de Ipiales es porque no tiene operación nocturna, por lo cual, las fuerzas militares proporcionaron un avión de la Fuerza Aérea para transportar al presidente desde el aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón hacia su destino final.

Las dificultades para transportar suministros esenciales tiene en un escenario complejo a este departamento, de acuerdo con la Defensoría del Pueblo.

Es por eso que, tras recorrer Pasto, la capital, y municipios aledaños, constatando la contingencia, la entidad instó a las autoridades nacionales y regionales a acelerar las medidas que permitan hacer frente a la escasez de combustible, gas, alimentos, medicamentos, materiales de construcción, entre otros.

Según Casa de Nariño, el consejo de ministros comenzó hacia las 5:00 p. m. hora local con la participación de todos los ministros del gabinete para atender la crisis, mientras el presidente cruzaba el atlántico para llegar a Colombia. Este consejo previo a la llegada del presidente también cuenta con la presencia de la cúpula militar el Departamento de Prosperidad Social, Invías y la Unidad para la Gestión del Riesgo de Desastres.

Sobre la vía Panamericana, la Casa de Nariño pudo asegurar que estaría habilitando una vía alterna de 8 kilómetros que debe estar lista en los próximos días.

También se pudo establecer que el Gobierno de Colombia ha estado en comunicaciones con el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, para coordinar la compra de combustible y evitar así un desabastecimiento total. Es decir, Abastecer Nariño y Cauca con la compra de combustible mientras se logra una apertura total o alterna, según Palacio.

De hecho, ambos mandatarios sostendrán una reunión binacional el próximo 31 de Enero en Esmeraldas, zona fronteriza entre Ecuador y Colombia, donde se espera puedan estrechar relaciones en materia comercial, de seguridad y diplomática. También se conocieron diversas solicitudes de organizaciones sociales en Nariño y Cauca que reclamaron la presencia del presidente de la República en la zona incluso por temas de violencia en la región y otras problemáticas locales.

La vía Panamericana es el principal corredor del sur del país. Su cierre ha dejado embotellada a esta zona, pues la carretera alterna de La Sierra solo sirve para vehículos pequeños, haciendo imposible el paso de tractocamiones con carga entre Popayán y Pasto, por ejemplo.

Desde hace dos semanas ocurrió un deslizamiento en la vía Panamericana, ubicada en el municipio de Rosas. Esto ha generado que el paso esté impedido, afectando a los departamentos de Nariño y Cauca. Varios hogares perdieron sus viviendas y las cosechas se arruinaron. Adicionalmente, el transporte de alimentos y mercancía se ha imposibilitado, por lo cual se ha autorizado la movilización por vías externas. Los departamento afectados se han encontrado incomunicados terrestremente y los habitantes han tenido dificultades para salir.