Presidente Gustavo Petro hace pedido especial desde Casa de Nariño: “Un acto de generosidad de la oligarquía”

Tal como lo había hecho en sus tiempos de alcalde de Bogotá, el presidente Gustavo Petro salió este martes al balcón de la Casa de Nariño a dirigirse a los ciudadanos que llegaron hasta la Plaza de Armas, contigua al Palacio Presidencial.

En un discurso cargado de emotividad, el jefe de Estado hizo un balance de lo que han sido sus primeros 6 meses de Gobierno. Explicó que el “cambio no es posible sin el pueblo”.

Destacó que lo que Colombia “eligió no fue simplemente a una persona, a Gustavo Petro en la Presidencia. Lo que se hizo en la elección fue volver al pueblo gobierno. Eso tiene que expresarse en la realidad histórica, en los días cotidianos, en la manera como pretendemos que pueden ser los cambios en este país”.

En ese sentido, lanzó un contundente mensaje a lo que él llama “la oligarquía”, que es aquella clase social que goza de los mayores privilegios en la sociedad.

“Aquí lo que se propone es un pacto social para que la oligarquía ceda en sus privilegios y permita una democracia y la paz. No hay mucho tiempo para ese pacto, quizá mis palabras sean tomadas como una necedad, no como el aprendizaje de la historia de Colombia, quizá se repitan los hechos de 1938, cuando detuvieron la Revolución en Marcha, manifestó el jefe de Estado.

Petro hizo este llamado a nombre del mandato que le dieron los colombianos en las urnas, que significa, según el mandatario, “una nueva fase en la historia de Colombia”.

Por eso, reiteró su llamado a la “oligarquía”. “Lo que queremos es democracia y paz, por eso invito, como lo hice en la posesión a la campaña, a esta oligarquía a un acto de generosidad, a un momento en el que es pensar en menores privilegios de hoy, para obtener muchísimas ganancias en el mañana, siempre acompañados de una sociedad mucho más rica, mucho más plena, mucho más sabia”.

Si no es el pueblo al que le corresponde profundizar esas reformas hasta donde ustedes digan, nosotros estamos listos hasta donde ustedes digan, hasta donde ustedes quieran.

El presidente invita a su pueblo a levantarse, a no arrodillarse, a convertirse en una multitud consciente de que tiene en sus manos el futuro, el presente, de que puede tener en sus manos el poder, quiero una sociedad colombiana empoderada.

Acompañado de su esposa, Verónica Alcocer, y Antonella, su hija menor, el presidente se refirió a los jóvenes que participaron en las movilizaciones del 28 de abril de 2021 y que hoy están en la cárcel por varios delitos, entre ellos, terrorismo.

“Por eso, la palabra cambio se volvió tan importante en la vida política reciente; por eso, la palabra cambió logró reunir a la mayoría de la sociedad colombiana en las urnas, en las calles. En las urnas no hubiéramos vencido si en las calles no hubiera salido la población, la juventud unos días antes. Eso que llamamos el estallido social”, dijo.

“Esos jovencitos que salieron a gritar, que simplemente tenían derecho a vivir, son los verdaderos precursores de los cambios que hay que desatar en Colombia. Por eso, tanta insidia contra ellos y ellas; por eso, esa decisión absurda de tener esa juventud encarcelada. Sueltan a sus asesinos, sueltan los mafiosos, pero no sueltan a nuestra juventud. Les preocupa que se conviertan en gestores de la paz”, manifestó.

“Quisieran mantenernos en los tiempos del odio, en los tiempos de la violencia fratricida, en los tiempos de la sin salida. La palabra cambio transforma eso. Es salir de la sin salida para tener unas perspectivas hacia adelante”, añadió.

Y luego expresó: “Lo que hubo en esas elecciones fue un grito de lo más profundo de la sociedad colombiana que ese mundo económico debe entender, debe leer”.