Cancillería llama a consultas a su embajadora en Tel Aviv por violación al DIH y solicita una conferencia de paz

El Gobierno de Colombia expresó su enérgico rechazo a las acciones de las fuerzas de seguridad israelíes en la Franja de Gaza, donde se han registrado más de 8.000 víctimas, incluyendo cientos de niños, según los informes del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

En un comunicado oficial, el Gobierno colombiano manifestó su profunda preocupación por la situación e instó a un cese al fuego inmediato.

Las acciones militares en la Franja de Gaza han generado una crisis humanitaria de gran magnitud, con miles de palestinos muertos y heridos. El conflicto, que se ha prolongado durante varias semanas, ha provocado un alto costo humano y ha suscitado llamados internacionales para poner fin a la violencia.

El Gobierno de Colombia ha reiterado su compromiso con el Derecho Internacional Humanitario (DIH) y ha subrayado la importancia de que todas las partes involucradas en el conflicto respeten las normas y principios del DIH. El DIH establece reglas destinadas a proteger a las personas que no participan directamente en las hostilidades y a limitar los medios y métodos de guerra. La violación de estas normas puede tener graves consecuencias humanitarias y legales.

El presidente Gustavo Petro emitió un llamado a la comunidad internacional para que se celebre una Conferencia de Paz que facilite el diálogo entre las partes involucradas en el conflicto. El objetivo de esta conferencia sería promover un acuerdo de paz que permita una convivencia pacífica entre israelíes y palestinos.

El presidente abogó por el pleno reconocimiento de los dos Estados, Israel y Palestina, por parte de la comunidad internacional. Este reconocimiento es un paso importante hacia la solución del conflicto y la coexistencia de dos Estados independientes en la región.

Como medida de protesta y en solidaridad con el pueblo palestino, el presidente Gustavo Petro tomó la decisión de llamar a consultas a la embajadora colombiana en Tel Aviv, Margarita Manjarrez, y declaró: “Si Israel no detiene la masacre del pueblo palestino, no podemos estar allá”. Esta acción busca expresar la firme posición de Colombia frente a la situación en Gaza y su rechazo a la violencia que ha afectado a civiles inocentes.

La llamada a consultas de la embajadora es una medida diplomática que implica la retirada temporal del embajador o embajadora a su país de origen para consultas y evaluación de la situación. Esta decisión se ha tomado en un contexto de llamados internacionales a la moderación y al cese de hostilidades en la región.

El Gobierno colombiano se suma a otros países que han tomado medidas similares en respuesta a la escalada del conflicto en Gaza. Chile, por ejemplo, también llamó a consultas a su embajador en Tel Aviv en protesta por las acciones de Israel en la Franja de Gaza. El Gobierno chileno condenó enérgicamente las violaciones del Derecho Internacional Humanitario y abogó por un cese al fuego inmediato.

Chile, que alberga la mayor comunidad palestina fuera del mundo árabe, ha expresado su preocupación por la situación en Gaza y ha defendido la solución de dos Estados como una vía para poner fin al conflicto israelí-palestino.

El conflicto en Gaza ha suscitado una respuesta internacional generalizada, con llamados a la moderación, la protección de los civiles y la búsqueda de una solución política al conflicto. La comunidad internacional ha instado a todas las partes a respetar el Derecho Internacional y el DIH y a poner fin a la violencia que ha causado sufrimiento humano.

El presidente Gustavo Petro y el Gobierno colombiano continúan monitoreando la situación en Gaza y mantienen su compromiso con la promoción de la paz y la seguridad en la región. La llamada a consultas de la embajadora colombiana en Tel Aviv refleja la firme postura del país en busca de una solución pacífica al conflicto y el respeto a los derechos humanos. Colombia se une a la comunidad internacional en su llamado a un cese al fuego y a la realización de una Conferencia de Paz que promueva el diálogo y la coexistencia pacífica.