Proveedores de salud en Bogotá denuncian que les adeudan más de $10.000 millones: prestación de servicios podría estar en riesgo

Varios proveedores de insumos y servicios de salud en Bogotá denuncian que están al borde de la asfixia económica por la crisis a la que, según ellos, los ha llevado la administración distrital por la falta de pagos, originándoles millonarias deudas que son insostenibles.

Los proveedores que prestan sus servicios a las cuatro subredes del Distrito, Sur Occidente, Oriente, Sur y Norte, están desesperados, pues aseguran que tienen facturas acumuladas vencidas y por cobrar desde hace más de nueve meses, con valores que superan los 10.000 millones de pesos, pero a pesar de la crítica situación y alto valor de la deuda, advierten que las subredes no les giran los recursos correspondientes.

De acuerdo con los proveedores del sector, lo que está ocurriendo en Bogotá es un claro incumplimiento a los contratos, donde se establece que los plazos de pago son máximo a 90 días. A pesar de que los proveedores han enviado diferentes cuentas de cobro a las subredes, la respuesta que reciben es que no se ha logrado la liquidez suficiente para cumplir con las obligaciones y tan solo les hacen pequeños abonos, que para los proveedores resultan ser insuficientes.

SEMANA conoció varias de las cartas y cuentas de cobro que los proveedores han enviado en repetidas ocasiones a las subredes, advirtiendo de la crítica situación por la que están atravesando, pero aún así no reciben la respuesta que desean.

“Nos están llevando a un estado de liquidez absoluta, es una situación bastante crítica, a tal punto que ya varias de las empresas que prestan sus servicios al Distrito han quebrado por la falta de recursos para mantenerse a flote”, aseguró uno de los proveedores a SEMANA.

Según la alerta de los mismos proveedores, más de 10 empresas ya habrían quebrado por la falta de liquidez. Y no es para menos, pues según advierten, esta crítica situación les ha generado un desequilibrio económico abismal a tal punto que ya tienen deudas que superan los 1.000 millones de pesos con sus propios proveedores, sin contar que han tenido que recurrir a los créditos bancarios para solventarse, pero por los altos costos financieros que esto implica, la situación cada día se hace más insostenible.

“Estamos sobreviviendo a punta de créditos. Nosotros para poder mantenernos a flote, poder operar y responder a los contratos de las subredes, tenemos que pagar a nuestros propios proveedores y empleados, pero ya la situación es insostenible”, advierten.

Los proveedores aseguran que si bien las subredes han venido cancelando parte de la deuda acumulada, el dinero que reciben es bajo comparado con el total de las acreencias.

“Tenemos facturas por cobrar incluso desde noviembre y diciembre del año pasado, y el dinero que nos cancelan tan solo nos alcanza para salir a flote un mes. Nos están llevando a la quiebra”, señalaron a SEMANA.

Lo más preocupante, de acuerdo con los proveedores, es que las subredes, en las diferentes comunicaciones, no solo les responden que no tienen la liquidez suficiente para cancelar las facturas, sino que además “los amenaza” que si dejan de prestar los servicios, les declaran el incumplimiento del contrato. Este medio tuvo acceso a esas comunicaciones que respaldan lo denunciado por los proveedores.

Habla el secretario de Salud

El secretario distrital de Salud, Gerson Bermont, en diálogo con SEMANA, reconoció la situación que se está presentando con los proveedores del sector salud en Bogotá, pero explicó cuál es el verdadero origen de la problemática.

“Nosotros cuando llegamos encontramos deudas por más de 400.000 millones de pesos en las cuatro subredes, por eso hicimos un plan de choque, de apoyo, por parte del Distrito y se creó un plan de fortalecimiento para ayudar a las subredes a pagar esas deudas viejas”, aseguró el secretario.

El funcionario enfatizó: “En los últimos cuatro años las subredes perdieron un billón de pesos, y de ese total, debían a proveedores 400.000 millones de pesos”.

De acuerdo con Bermont, “en estos momentos el Distrito estableció un apoyo de 260.000 millones de pesos para ayudar al pago de esas deudas y el resto, estamos haciendo un plan de eficiencia y subredes para pagar esos dineros que se debían antes del mes de febrero”.

Ahora, frente a la advertencia de los proveedores que el dinero que les están pagando es bajo en comparación con las acreencias, el secretario confirmó que esa situación efectivamente puede estar sucediendo, pero subrayó que hay compromisos para cancelar todas esas deudas de aquí al próximo mes de enero.

“Estoy seguro de que a esos proveedores algo les tuvo que haber llegado en junio cuando hicimos el primer abono de 90.000 millones de pesos, porque el pago fue universal a todos los que les debíamos. Ahorita en septiembre, se les va a entregar otros 30.000 millones de pesos a las subredes, y en enero 140.000 millones. Absolutamente todos los proveedores saben que estamos en este plan que va a llegar hasta enero para el pago de las deudas viejas”, indicó el funcionario y distrital.

Y a renglón seguido, subrayó: “El cálculo que yo tengo es que con el primer pago de 90.000 millones, a todos los proveedores les tuvo que haber llegado entre un 15 y 20 % de las deudas vencidas, no totales. Y sí, de las deudas vencidas, ese porcentaje puede ser poquito porque hay proveedores con unas deudas muy grandes, y muy seguramente cuando el banco los aprieta, pues con el recurso que les llegó, pueden tener razón que es poco. Pero está establecido un plan hasta enero para pagarles el 100 % de las deudas que encontramos vencidas a febrero de 2024″.

En todo caso, los proveedores aseguran que la situación es crítica e insostenible.