POLÍTICA
¿Qué va a pasar con la curul de Rodolfo Hernández una vez renuncie?
El senador anunció que se irá del Congreso al considerar que es bueno es para ”ejecutar y manejar la chequera”, dos aspectos que no están en las funciones del Legislativo.
Apenas dos meses después de haber asumido como congresista, el excandidato Rodolfo Hernández, quien ganó su curul por quedar de segundo en las presidenciales, confirmó que renunciará al Senado de la República.
“Yo en el Congreso es como tener a Messi de portero… soy bueno para ejecutar y manejar la chequera”, apuntó el excandidato presidencial.
El senador presentará su carta de renuncia “en los próximos días”, para desvincularse oficialmente de la corporación. El ingeniero anunció su decisión en una reunión con diputados de la Unión Europea y los presidentes de Comisión Primera en Senado y Cámara, Fabio Amín y Juan Carlos Wills, y la confirmó posteriormente en un comunicado divulgado por sus redes sociales.
La inquietud que se ha generado es qué ocurrirá con la curul que dejaría vacante Hernández, pues algunos han afirmado que podría entregarse a la representante Marelen Castillo, quien fue fórmula vicepresidencial del ingeniero en las pasadas elecciones, e incluso se ha llegado a afirmar que sería para Federico Gutiérrez, quien quedó tercero en la contienda electoral.
Sin embargo, la realidad es que nada de esto ocurrirá, pues esta curul es personal y, por lo tanto, quedará vacía luego de que la Plenaria del Senado le acepte la renuncia a Hernández.
Esto se debe a que, según señala el artículo 24 de la Ley 1909 de 2018, conocido como el Estatuto de la Oposición, este escaño en el Senado le corresponde únicamente a quien quede de segundo en la elección presidencial, es decir, la curul no es del partido, como es el caso de los demás congresistas, sino directamente de Hernández. Ante su ausencia no puede ser reemplazado.
Cabe recordar que, tal como lo indicó SEMANA en su momento, el ingeniero pensaba llegar al Senado para asumir la oposición y lograr la personería jurídica de su movimiento, la Liga de Gobernantes Anticorrupción. De esa forma, tendría partido y plataforma para lanzarse a la Gobernación de Santander.
El mismo ingeniero confirmó que estaba pensando en las elecciones de 2023 y que no era “un hombre parlamentario”.
Su presencia en el Legislativo fue más bien de bajo perfil, con denuncias de corrupción ocasionales, sin generar mayor repercusión. Tampoco se convirtió en el jefe de la oposición, trinando muy esporádicamente sus reparos frente a la gestión del presidente Gustavo Petro.
Sin lugar a dudas, el ingeniero se va del Congreso con una popularidad menor a la que ostentó durante las elecciones presidenciales. Su equipo de comunicaciones, liderado por Luisa Olejua, ya no lo acompaña, decreciendo su exitosa presencia en redes sociales. Su visibilidad bajó por el bullicio del Congreso de la República, donde la oposición tiene caras visibles como la de María Fernanda Cabal, Paloma Valencia y Miguel Uribe.
Los votantes de Rodolfo Hernández, que en buena parte depositaron su confianza para lograr que Gustavo Petro no lograra la victoria, se encuentran profundamente decepcionados del nuevo rol del ingeniero. En su nueva apuesta política, el ingeniero deberá ganarse a la gente de nuevo.
En todo caso, el camino del ingeniero para eventualmente llegar a la Gobernación de Santander no será sencillo, pues ha ido perdiendo algunos de los apoyos políticos con los que contaba.
Los representantes Juan Manuel Cortés y Érika Sánchez, quienes lograron la curul con la lista del ingeniero en Santander, cortaron su vínculo con la colectividad al considerar que nunca fueron tenidos en cuenta al construir los estatutos y, cuando pidieron participación, se la negaron.
Por diferencias similares, el director político de la campaña de Hernández, Óscar Jahir Hernández, renunció a ser veedor de la colectividad.