POLÍTICA
Nicolás Maduro dice que quiere una comunicación más “estrecha” con Gustavo Petro. Qué viene para Colombia y Venezuela
SEMANA revela algunos detalles del encuentro entre el embajador de Colombia y el presidente de Venezuela. La cita entre Maduro y Petro para la primera semana de octubre en zona limítrofe está por concretarse.
El embajador de Colombia en Venezuela, Armando Benedetti, quiere andar a pasos agigantados. Por esto, desde que Gustavo Petro propuso su nombre para asumir las relaciones diplomáticas entre ambas naciones, el exsenador tenía claro su objetivo: un encuentro concreto con el presidente Nicolás Maduro, que le permitiera a los más de 3 millones de colombianos que viven aún en Caracas y a los 8 millones de venezolanos que residen en la frontera revivir el optimismo que genera el restablecimiento de las relaciones entre ambos países.
El encuentro se cumplió. Este lunes a las 5:00 p. m., hora colombiana, Benedetti arribó hasta el Palacio de Miraflores en el corazón de Caracas y se reunió cara a cara con Nicolás Maduro, un presidente con el que Gustavo Petro sostiene conversaciones telefónicas desde el 19 de junio pasado cuando ganó en las urnas la presidencia. La prensa oficialista fue testigo del encuentro en el Salón Simón Bolívar.
El diplomático colombiano apareció de saco y corbata con las cartas credenciales por parte del presidente Gustavo Petro donde oficializaba su designación como embajador ante Venezuela. Caminó hasta encontrarse con Maduro y detrás iba Adelina Guerrero Covo, su esposa.
Maduro recibió el documento que Benedetti llevaba en sus manos y procedió a abrazarlo. Ambos sonrieron y posaron ante la prensa internacional. La conversación fue corta, pero entretenida.
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Ambos, sentados adelante de las banderas de los dos países, hablaron de la necesidad de la hermandad entre las dos naciones. “Bueno, bienvenido”, dijo Maduro, quien citó el 2010 como el año en el que las relaciones entre ambos países se fracturaron.
Benedetti le expresó al presidente que le interesaba que el restablecimiento de las relaciones generara optimismo y alegría entre los colombianos y venezolanos. Advirtió que será un proceso progresivo, organizado, con una hoja de ruta que ya está establecida. “Quiero una comunicación más estrecha con Gustavo Petro”, expresó el presidente de Venezuela.
El encuentro se extendió durante 40 minutos y, al menos en público, Armando Benedetti no le propuso al líder de Miraflores la reunión con Gustavo Petro a comienzos de octubre en la zona de frontera entre ambas naciones.
No obstante, SEMANA conoció que la iniciativa del exsenador ya tiene el visto bueno del líder del Pacto Histórico y lo más posible es que la fotografía se produzca en las próximas semanas. Desde el Palacio de Miraflores también hay optimismo por la reunión.
A renglón seguido, se rompió el protocolo en medio del evento. Benedetti le mostró un sombrero vueltiao con la bandera de Colombia que le llevaba de regalo y el presidente bolivariano no dudó en lucirlo. El obsequio era perfecto para el liqui liqui ―traje típico de los Llanos Orientales― con el que Maduro oficializó el acercamiento con su hermano país. El público aplaudió.
El presidente de Venezuela no se quedó atrás y le obsequió un cuadro de Simón Bolívar de un pintor venezolano, una imagen del libertador imponente con los brazos abiertos y en medio de las tinieblas.
Benedetti tuvo un lunes agitado en Caracas. Antes de visitar a Nicolás Maduro se reunió con el canciller de Venezuela, Carlos Faria, y posteriormente se dirigió a visitar su nueva morada: la sede de Colombia en la capital bolivariana.
La casa donde vivirá Armando Benedetti es amplia y está ubicada en el corazón de Caracas, conserva el piso en madera, las lámparas de cristal y los muebles antiguos. El diplomático recorrió el lugar, equipado por poltronas tipo Luis XV, pero en perfecto estado, junto con su esposa.
Después de la cita con el líder venezolano, Benedetti organizará la embajada, “los consulados que están bastante deteriorados y en el olvido por parte del gobierno anterior. Primero, arreglaré eso. Y segundo, trataré de abrir la frontera lo más rápido que se pueda”, concluyó a SEMANA.