Política
Servicio militar obligatorio: modificaciones a la Ley de Paz y Orden Público plantea su eliminación
Cada vez toma más fuerza la idea de acabar esa obligatoriedad y crear otro tipo de servicios comunitarios para los jóvenes del país.
El ministro del Interior, Alfonso Prada, confirmó que en esta semana se radicará en el Congreso un proyecto de ley que ampliará la vigencia de la Ley 418, conocida como de Orden Público, para darle facultades al presidente Gustavo Petro de adelantar negociaciones de paz.
Prada contó que el Ejecutivo está elaborando dicha iniciativa y que habrá varios cambios referentes a la paz de Colombia y que se discutirán próximamente en el Legislativo.
“Esa Ley 418 la hemos sometido a nueva redacción, no solamente se va a hacer como se hizo en años anteriores de prorrogar el término de las facultades que tiene el Gobierno establecidas, sino que haremos una nueva ley con toda una política de paz y esa ley está lista y la debemos firmar el ministro de Defensa, el ministro de Justicia y yo por parte del Gobierno y nos acompañarán parte de las bancadas”, indicó.
En ese sentido una de las modificaciones que traería ese texto del gobierno del presidente Gustavo Petro es el de la eliminación del servicio militar obligatorio en Colombia. Dentro del articulado que se está preparando se incluiría uno donde se habla del servicio social para la paz.
Ante esto, el senador Iván Cepeda confirmó que se está trabajando en esa materia y que en los próximos días llegará la iniciativa al Congreso.
“El Gobierno y su bancada en el Congreso radicaremos dos iniciativas en materia de paz. La primera será la prórroga de la ley de orden público y su capítulo destinado a la política de paz, ahí vamos, entre otros asuntos, a superar el servicio militar obligatorio para generar la posibilidad de que los jóvenes opten por el servicio social para la paz, que es una alternativa para que ellos se consagren en la construcción de paz y la implementación de los acuerdos”, dijo el congresista.
Sin embargo, la eliminación del servicio militar obligatorio sería gradual, pero se abre la puerta para que los jóvenes tengan una opción, por ejemplo, de trabajos comunitarios.
A juicio del Gobierno y de los congresistas del Pacto Histórico, este tipo de servicios serán de mayor provecho para los jóvenes de Colombia, ya que la meta es lograr la denominada ‘paz total’ de la que se viene hablando en los últimos días.
La prórroga de la Ley 418 permitirá al presidente Petro explorar diferentes caminos para desescalar el conflicto en Colombia y reiniciar, sin problema alguno, los diálogos de paz con el ELN. Recientemente, la Fiscalía General suspendió las órdenes de captura y de extradición de once integrantes de esa guerrilla que están en La Habana (Cuba).
¿Qué tan viable es acabar con el servicio militar obligatorio? Las cuentas de lo que significa esa propuesta
El servicio militar obligatorio ha sido considerado por algunos sectores como inviable, pese a que está legalmente permitido. La mayoría de los contingentes que llegan a las Fuerzas Armadas lo integran jóvenes que apenas cumplieron su mayoría de edad.
“El Estado los viste con un fusil, arriesgando su vida mientras se enfrentan en la guerra en lugar de estar educándose”, son algunas de las posturas de quienes hoy lograron que el Pacto Histórico y el mismo presidente de la República, Gustavo Petro, encaminen proyectos para acabar con la obligatoriedad.
Cada año las Fuerzas Militares reciben cuatro grupos de jóvenes para prestar su servicio militar, algunos con una duración de 12 meses y otros de 18. En 2020, durante el pico más alto de la pandemia del coronavirus, se incorporaron a las filas dos grupos para un total de 60.706 hombres, y durante los últimos cinco años 460.113 prestaron su servicio militar. El Ejército Nacional es, sin duda, el que más uniformados tiene: solo en este año 71.942 prestan su servicio militar. Esa cifra representa el 31 % del talento humano. Un porcentaje bastante importante para prescindir de él en los próximos años.
¿Cuánto le vale al Estado la manutención de un joven que presta el servicio militar? Según le confirmó el Ejército a SEMANA, la bonificación mensual por su labor es de 300.000 pesos; invierten 347.000 en su alimentación; el transporte, 83.000; 17.000 por el seguro de vida y 25.000 más de prima navideña.
Durante un mes invierten 856.000 pesos. Muy poco si se compara con lo que podría costar el reemplazo de la planta de personal por soldados profesionales, que devengan como salario básico 1.600.000 pesos, aproximadamente, sin contar con la manutención en el área de operación, bonificaciones y seguridad social de toda la familia. Para el presidente de Acore, coronel (r) John Marulanda, acabar con el servicio militar obligatorio afectaría la planta base del Ejército y la de los soldados profesionales. Incluso se tendría que cambiar la doctrina, pues en Colombia no es permitido ser soldado sin antes prestar el servicio militar.
El ministro de Defensa, Iván Velásquez, le reconoció a SEMANA que reemplazar a cada uno de los jóvenes que presta el servicio costaría mucho dinero, que, por cierto, no lo hay, y por eso finiquitar el servicio militar obligatorio tiene que ser progresivo para no originar traumatismo. Sin embargo, están buscando estrategias para que el servicio militar sea atractivo y lo hagan voluntariamente. Pero lo que pareciera desconocer el Gobierno del presidente Petro es que hay instituciones en las que el servicio es totalmente voluntario. En la Policía, por ejemplo, de los 19.180 auxiliares que están prestando servicio, 8.284 son mujeres. En la Armada Nacional el servicio no es obligatorio.
Actualmente, 9.443 jóvenes se incorporaron y está comprobado que el 6,1 % se vincula a la institución para seguir con su carrera militar. Además, en todas las fuerzas hay jóvenes que entran a ellas buscando oportunidades laborales y educativas, pues allí terminan incluso el bachillerato. Un claro ejemplo es el del subteniente Brayan Rincón, quien desde niño trabajaba en la calle y, cuando entró a prestar su servicio militar, lo motivaron a terminar el bachillerato.
Luego se ganó una beca para la escuela de oficiales del Ejército Nacional y ya es profesional en Ciencias Políticas. Entonces, ¿realmente sí es necesario acabar con el servicio militar obligatorio o es un proyecto más populista que eficiente? Esa es una pregunta que se hacen constantemente algunos analistas en seguridad. Para tomar decisiones de este tipo, se deben tener en cuenta, como dicen los abuelos, “las cuentas claras y el chocolate espeso”.