Política

Sofía Petro, la hija de Gustavo Petro, defendió a la controvertida exministra Irene Vélez: “Hay algo de misoginia detrás”

Esta no es la primera vez que la hija del presidente defiende a una exfuncionaria del gobierno. También lo hizo con Laura Sarabia, en medio de su peor escándalo.

Redacción Semana
20 de julio de 2023
Sofía Petro e Irene Vélez.
Sofía Petro e Irene Vélez. | Foto: FOTO1: AUTOR ANÓNIMO/FOTO2: SEMANA

Sofía Petro, la hija del presidente Gustavo Petro, defendió este 20 de julio a la exministra de Minas y Energía, Irene Vélez, una de las funcionarias más controvertidas del Gobierno nacional, que decidió dar un paso al costado este miércoles, 19 de julio, tras el escándalo que se generó en su contra porque, al parecer, sacó a sus dos hijos menores de edad de Colombia rumbo a España, sin el lleno de los requisitos en enero de 2023.

Aunque la funcionaria habría violado la ley porque, presuntamente, presionó a funcionarios de Migración Colombia para que permitieran la salida de los pequeños sin sus documentos en regla, la hija del presidente dijo que “hay algo de misoginia detrás”.

Afirmó desde su cuenta personal de Twitter que “a cualquier funcionario o funcionaria del Estado se le debe tener un nivel de exigencia altísimo, viene con el trabajo. Sin embargo, la discusión pública se ensancha, especialmente, contra las mujeres, sobre todo las más jóvenes del Gobierno. Hay algo de misoginia detrás”.

La ministra Irene Vélez y su carta de renuncia.
La ministra Irene Vélez y su carta de renuncia. | Foto: FOTO1: SEMANA/FOTO2: AUTOR ANÒNIMO.

Añadió: “Más allá del nivel de satisfacción que tengan con la gestión de Irene Vélez, ella llegó con una fuerte postura ambientalista y eso molestó de entrada. Retirarse es una prueba de ética que ha faltado a tantos hombres que han estado en cargos similares con acusaciones más graves encima”.

Según Petro, “ni un huracán los hubiese movido. Que las investigaciones avancen y de las respuestas necesarias. Mientras tanto, ojalá podamos reflexionar sobre si no juzgamos de manera distinta a los y las funcionarios según su género” (sic).

El escándalo de Irene Vélez es aparentemente minúsculo para quienes creen que la ministra ha debido salir del cargo por otras ‘metidas de pata’ que, incluso, dispararon el precio del dólar en su momento, como lo reconoció el exministro de Hacienda, José Antonio Ocampo. No obstante, este no es un tema menor para el fiscal, Francisco Barbosa, y la procuradora, Margarita Cabello, que le aperturaron proceso penal y disciplinario por tráfico de influencias a la alta funcionaria.

Irene Vélez e Hildebrando Vélez.
Irene Vélez e Hildebrando Vélez, su padre y gran defensor. | Foto: FOTO1: SEMANA/FOTO2: AUTOR ANÓNIMO.

Por eso, en la carta de renuncia de cuatro páginas que radicó en la Casa de Nariño este miércoles, 19 de julio, Vélez desplegó una especie de proclama donde inicialmente planteó sus 35 principales logros durante sus 11 meses en el gobierno de Gustavo Petro. Y, posteriormente, explicó que su salida del cargo busca que las posibles decisiones judiciales en su contra no salpiquen la Casa de Nariño.

“Decido apartarme del cargo de ministra para evitar que las investigaciones en mi contra interfieran con la ejecución del programa de Gobierno. Estaré siempre presta a responder a las autoridades cuando así lo requieran”, dijo.

Sofía Petro y Laura Sarabia.
Sofía Petro y Laura Sarabia. | Foto: FOTO1: AUTOR ANÓNIMO/FOTO2: SEMANA.

Vélez agradeció la confianza al presidente, un líder que se la jugó en varias oportunidades por sostenerla en el cargo, pese al desgaste que sufrió su gobierno con las salidas en falso de la ministra. “Gracias por permitirme liderar un sector históricamente etnocéntrico y patriarcal”, expresó.

Esta no es la primera vez que Sofía Petro defiende a una funcionaria del gobierno de su padre.

Hizo lo mismo cuando salió Laura Sarabia, la exjefe del gabinete de la Casa de Nariño, quien, al parecer, ordenó la utilización del polígrafo del edificio presidencial para investigar el robo de un dinero de su apartamento en el norte de Bogotá. Aunque el país y la justicia tenían en la mira a Sarabia, la hija del presidente, confesó que creía en ella.