Cultura

¿Por qué en Latinoamérica no despega el libro electrónico?

La debilidad económica de millones de familias en América Latina es la razón principal que frena el despegue del libro electrónico en esta región, declaró la directora de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL), Nubia Macías.

11 de noviembre de 2012
En Latinoamérica no ha despegado la lectura electrónica

"Para un papá o mamá, la clase media, muchas veces comprar un ejemplar en papel es caro, ya ni digo comprar el soporte electrónico y luego el costo (de los libros digitales)", dijo a Efe la directora de la mayor feria del libro en lengua española de las que se celebran cada año.

En entrevista la directora de la FIL explicó que "en América Latina en general para la gente tener una computadora es caro" pero más aun actualmente contar con "un soporte móvil, práctico, en el que tú puedas leer".

Macías sostiene que hay que tener muy claro que "la tecnología no le hace a uno lector" por lo que a la par que unas mejores condiciones económicas para potenciar el libro electrónico "hace falta ser más sistemáticos en la promoción de la lectura" en cada uno de los países.

Otra dificultad para el desarrollo de estos libros es que las empresas involucradas en el negocio "están muy entusiasmadas con vendernos tecnología y no contenido" lo que hace necesario "afinar más" en la segunda vertiente, explica Macías.

La falta de accesibilidad a internet es otra barrera en una región donde el libro digital representa entre el 6 y 7% de todos los que se venden, según datos del Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe (Cerlalc), nivel muy inferior al 11 % del Reino Unido o más del 20 % en EE.UU..

En la próxima edición de la FIL, prevista del 24 de noviembre al 2 de diciembre próximos, habrá eventos "que permitan a la gente capacitarse y entender bien los procesos" de desarrollo del libro electrónico.

El 27 de noviembre esta programada "La tarde del libro electrónico", donde especialistas analizarán cómo hacer contenidos de calidad, productos editoriales multiplataforma, el reto de la renovación del libro digital actual, asuntos relacionados con la innovación y con la venta de contenidos.

Además habrá un Taller de Derechos del Libro Electrónico, una mesa sobre la lectura en tiempos digitales dentro del Coloquio Internacional de Bibliotecarios, y otra de diálogo con responsables de grandes grupos de venta de libros electrónicos con presencia de expertos de Amazon.com y de Barnes & Noble, entre otros.

Entre los mayores progresos la directora de la FIL cita los relacionados con el libro académico electrónico, que "va bien encaminado".

Ello en la FIL se refleja en la intensa actividad de los bibliotecarios, que "llevan muchos años comprando bases de datos, revistas electrónicas" y "científicas".

No obstante, Macías advierte que incluso en este ámbito existen retos y detalles importantes por definir, como el de que los contenidos que se adquieran lo hagan en régimen de alquiler y desaparezcan "caducados, pasado un tiempo".

Este es un problema irresoluto parte de la industria que complica la labor de bibliotecarios y otros compradores de su tipo.

"Muchos pensaban al principio que si compraban un libro electrónico, todos sus usuarios iban a poder tener acceso a él. Las empresas que les están vendiendo los libros, es por usuario. Están tratando de modificar los contratos pero todavía no está claro el uso electrónico y muchos de los libros caducan", apunta como un dilema que habrá que explorar en un futuro no muy lejano.

"Ojalá que la gente no se asuste (con el libro electrónico) porque son procesos útiles, paralelos, y uno va a seguir leyendo en un formato o en otro. Ya se acabó la polémica de si uno desaparece o no, eso quedó ya en el olvido", concluye Macías. EFE