Advierten que un artículo de la reforma a la salud ha pasado “desapercibido”: incluye subsidio a madres

En la mañana de este 15 de junio el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, sostuvo que hay un artículo de la reforma a la salud que ha pasado “desapercibido” y que modifica algunos aspectos de la licencia de maternidad, que se da después de que las mujeres dan a luz.

“Nosotros tenemos unos 580.000 niños que nacen anualmente. Todas las madres que no aportan al sistema (de salud), porque no tienen un trabajo formal, van a recibir un incentivo de medio salario mínimo por los tres meses. La reforma es muy benigna”, dijo Jaramillo en conversación con la emisora virtual de la Presidencia, Colombia Hoy Radio.

Además, sostuvo que esto requerirá de un esfuerzo económico importante. “Esto puede costar fácilmente unos 800.000 millones de pesos. Ese es el único costo adicional claro en la reforma. Pero es indudablemente apoyar a las madres, porque necesitamos que puedan sustentar a sus hijos especialmente durante esos tres meses, que son fundamentales para nuestros niños y niñas”, indicó el ministro Jaramillo.

En efecto, en la más reciente reforma a la salud que está siendo revisada por los congresistas de la Cámara de Representantes hay un aparte dedicado especialmente a las licencias de maternidad.

Se trata del artículo 71, en el cual se abordan las prestaciones económicas de los contribuyentes al sistema de salud.

“Toda mujer en Colombia recibirá prestaciones económicas por licencia de maternidad; aquellas mujeres que no son aportantes económicas del Sistema de Salud tendrán derecho a un subsidio monetario equivalente a medio salario mínimo legal vigente durante los tres (3) meses siguientes al parto”, se puede leer en el proyecto de ley.

No obstante, este subsidio está supeditado a que las mujeres acudan a los servicios de salud antes de dar a luz, pues la reforma señala que el dinero se le otorgará a la madre “siempre y cuando haya asistido a los controles prenatales respectivos durante el embarazo”.

El proyecto de ley está enredado

En mayo pasado la reforma a la salud logró superar con éxito el primer debate en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes. Pero desde entonces la discusión ha estado estancada.

La votación en segundo debate debe hacerse en la plenaria de la Cámara, pero hasta ahora no se ha empezado a discutir el articulado. Por un lado, la conversación se ha centrado en evaluar los impedimentos de algunos congresistas, que declaran tener posibles conflictos de interés para legislar sobre el sector salud.

Pero también se ha registrado una situación particular de ausentismo que ha obstaculizado el debate y las sesiones en las cuales se esperaba discutir la reforma a la salud han sido suspendidas en varias ocasiones por falta de quórum.

A su vez, algunas colectividades ya han dado señales de que no están de acuerdo con las reformas sociales, que también incluyen la pensional y la laboral.

El Partido Liberal, por ejemplo, le pidió al Gobierno aplazar la discusión de la reforma a la salud para la siguiente legislatura, que empieza el próximo 20 de julio. El Gobierno, sin embargo, no ha dado su brazo a torcer y ha anunciado que convocará a sesiones extras, aunque aún no se sabe qué proyectos de ley pedirá debatir en esos espacios.

Esta semana la discusión también se ralentizó debido a que los partidos de oposición usaron su derecho de organizar la sesión de la Cámara de este miércoles 14 de junio y decidieron no programar el debate de la reforma a la salud en el orden del día.

La discusión, sin embargo, se retomará en la tarde de este 15 de junio. “Esperamos que podamos lograr le quórum y adelantar el trabajo en plenaria”, sostuvo el ministro Jaramillo sobre el trámite legislativo.