Salud
Colesterol alto: estos son los 10 principales síntomas que no se deberían ignorar
La detección temprana y el manejo adecuado del colesterol pueden ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y promover una vida más saludable.
El colesterol se clasifica en dos tipos principales: el colesterol de lipoproteína de baja densidad (LDL) y el colesterol de lipoproteína de alta densidad (HDL). Estos se consideran comúnmente como colesterol “malo” y “bueno”, respectivamente, debido a sus efectos en la salud cardiovascular.
Colesterol LDL
Es conocido como el “colesterol malo” porque su acumulación en las arterias puede obstruir el flujo sanguíneo y aumentar el riesgo de enfermedades del corazón y accidentes cerebrovasculares. Se recomienda mantener los niveles de colesterol LDL bajos para reducir este riesgo.
De acuerdo con la Asociación Americana del Corazón de Estados Unidos (AAC, por sus siglas en español), tener niveles de colesterol LDL superiores a 100 mg/dL se considera un factor de riesgo para enfermedades cardiovasculares.
Colesterol HDL
El colesterol HDL es conocido como el “colesterol bueno” porque ayuda a eliminar el exceso de colesterol de las arterias y transportarlo de regreso al hígado para su eliminación. El colesterol HDL ayuda a proteger contra enfermedades del corazón.
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La AAC recomienda mantener los niveles de colesterol HDL superiores a 40 mg/dL en hombres y 50 mg/dL en mujeres para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Es importante tener en cuenta que el nivel total de colesterol en la sangre, que incluye tanto el colesterol LDL como el HDL, también es relevante para evaluar el riesgo cardiovascular. Se considera deseable, según la AAC, tener un nivel total de colesterol por debajo de 200 mg/dL.
Síntomas del colesterol alto
Reconocer los síntomas tempranos del colesterol alto es crucial para tomar medidas preventivas y buscar atención médica adecuada. Según la Asociación Americana del Corazón, hay que ponerle cuidado a estos síntomas:
- Fatiga inexplicada: Sentirse constantemente cansado o sin energía puede ser un signo de colesterol alto. La obstrucción de las arterias dificulta el flujo sanguíneo, lo que puede llevar a una disminución del suministro de oxígeno y nutrientes a los tejidos y órganos, lo que provoca fatiga persistente.
- Dificultad para respirar: Cuando las arterias que suministran sangre a los pulmones se obstruyen debido al colesterol alto, puede producirse dificultad para respirar o sensación de falta de aire, especialmente durante la actividad física.
- Malestar estomacal: Algunas personas con colesterol alto pueden experimentar problemas digestivos, como indigestión, náuseas, vómitos o dolor abdominal. Estos síntomas pueden ser el resultado de la acumulación de placa en los vasos sanguíneos que irrigan el sistema digestivo.
- Problemas de memoria y concentración: Existen estudios que sugieren que altos niveles de colesterol pueden afectar la función cerebral, lo que puede provocar dificultades en la memoria, la concentración y la toma de decisiones.
- Problemas sexuales: El colesterol alto puede afectar la circulación sanguínea, lo que puede tener un impacto negativo en la función sexual tanto en hombres como en mujeres. Esto puede manifestarse como disfunción eréctil en hombres y disminución del deseo sexual en ambos sexos.
- Arcos corneales: Un anillo blanco o grisáceo alrededor de la parte exterior del iris del ojo, conocido como arco corneal, puede ser un signo de colesterol alto. Este anillo puede indicar la acumulación de colesterol en los vasos sanguíneos del ojo.
- Xantelasmas: Son pequeñas placas amarillentas o blancas que aparecen en los párpados. Estas lesiones planas y suaves también son un signo de depósitos de grasa y colesterol.
- Xantomas: Estas son protuberancias amarillentas o blancas que se forman debajo de la piel, especialmente alrededor de los párpados, codos, rodillas y talones. Son depósitos de grasa y colesterol que pueden indicar niveles altos de colesterol en la sangre.
- Dolor en el pecho: El colesterol alto puede provocar la acumulación de placa en las arterias coronarias, lo que puede reducir el flujo sanguíneo al corazón y causar angina de pecho. El dolor en el pecho, la presión o la sensación de opresión pueden ser indicativos de este problema.
- Problemas de circulación: Los altos niveles de colesterol pueden obstruir las arterias, lo que dificulta la circulación sanguínea adecuada. Esto puede provocar entumecimiento, debilidad o dolor en los brazos, las piernas o los dedos.
Es importante destacar que algunas personas pueden tener colesterol alto sin experimentar síntomas evidentes. Por esta razón, es esencial realizar exámenes regulares para detectar cualquier anomalía y tomar medidas preventivas.
Si se presentan alguno de estos síntomas o se sospecha de colesterol alto, es fundamental consultar a un médico. A través de análisis de sangre y evaluaciones médicas, se puede confirmar el diagnóstico y establecer un plan de tratamiento adecuado.
Las opciones de tratamiento pueden incluir cambios en el estilo de vida, como una dieta saludable, ejercicio regular y, en algunos casos, medicamentos recetados para controlar los niveles de colesterol.