¿Cómo es el comportamiento de una persona con alzheimer?

La enfermedad de Alzheimer, un trastorno neurodegenerativo progresivo, afecta profundamente la personalidad y el comportamiento de quienes la padecen. Según el portal de la Biblioteca de Medicina de Estados Unidos Medline Plus, a medida que las células cerebrales mueren y la función cerebral disminuye, se producen una serie de cambios en la conducta de la persona afectada. En este artículo, examinamos cómo se manifiestan estos cambios y cómo cuidadores y familiares pueden lidiar con ellos de manera comprensiva y eficaz.

Alteraciones en la personalidad y comportamiento

La enfermedad de Alzheimer es conocida por su capacidad para alterar la personalidad y el comportamiento de quienes la sufren. A medida que la enfermedad progresa, el National Institute of Aging, indica que se pueden observar diversos cambios en la conducta de la persona afectada, entre ellos:

1. Irritabilidad y cambios de humor: Las personas con Alzheimer pueden volverse fácilmente irritables, preocupadas o enojadas sin una razón aparente. Sus estados de ánimo pueden fluctuar significativamente.

2. Depresión y desinterés: La enfermedad puede llevar a que la persona muestre signos de depresión y una disminución en su interés por las actividades que solían disfrutar.

3. Confusión y alucinaciones: La persona con demencia puede experimentar episodios de confusión en los que no puede distinguir la realidad de la ficción. Pueden ver, oír o sentir cosas que no están presentes, lo que se conoce como alucinaciones.

4. Agitación y comportamiento inquieto: La agitación es común en personas con Alzheimer y se manifiesta en inquietud constante, caminar sin rumbo fijo y la incapacidad de permanecer quietas.

5. Cambios en la conducta sexual: En algunos casos, la enfermedad de Alzheimer puede llevar a comportamientos sexuales inusuales o inapropiados.

6. Agresión física o verbal: La frustración y la confusión pueden dar lugar a comportamientos agresivos, como golpear o gritar a los cuidadores y seres queridos.

7. Pérdida de interés en la apariencia personal: Las personas con demencia pueden dejar de preocuparse por su higiene personal y pueden negarse a bañarse o cambiar de ropa regularmente.

Además de los cambios en el cerebro, varios factores pueden influir en el comportamiento de una persona con Alzheimer. Estos incluyen:

1. Emociones y estrés: La persona puede experimentar emociones abrumadoras, como tristeza, miedo o ansiedad, que contribuyen a su comportamiento.

2. Cambios en la rutina: Alterar la rutina diaria de la persona, como un viaje o un cambio en el entorno, puede causar confusión y ansiedad.

3. Problemas de salud: El dolor, las enfermedades, los efectos secundarios de los medicamentos, la falta de sueño y otros problemas de salud pueden influir en la conducta.

4. Entorno: Un entorno ruidoso, abrumador o desconocido puede desencadenar comportamientos no deseados.

5. Problemas de comunicación: La dificultad para expresar necesidades y deseos puede llevar a la frustración y el comportamiento disruptivo.

6. Efectos de medicamentos: Algunos medicamentos pueden tener efectos secundarios que afectan el comportamiento.

7. Cambios en la visión y la audición: Problemas de visión o audición pueden contribuir a la confusión y la ansiedad.

Lidiar con los cambios en la personalidad y el comportamiento de una persona con Alzheimer puede ser un desafío, pero de acuerdo con el portal web gestionado por el instituto nacional sobe el envejecimiento en Estados Unidos, Alzheimers, existen enfoques compasivos y eficaces para abordar estos desafíos:

1. Mantener las cosas simples: Comunicarse de manera clara y simple, enfocándose en una instrucción o pregunta a la vez.

2. Establecer rutinas: Mantener una rutina diaria puede proporcionar a la persona una sensación de seguridad y previsibilidad.

3. Brindar reaseguro: Asegurar a la persona que está segura y que el cuidador está ahí para ayudar.

4. Enfocarse en sentimientos: Escuchar y validar los sentimientos de la persona en lugar de discutir o tratar de razonar.

5. Evitar la discusión: No discutir o confrontar a la persona cuando está ansiosa o agitada.

6. Mantener la calma: Si el cuidador se siente abrumado, es importante mantener la calma y, si es necesario, tomar un breve descanso.

7. Usar el humor: El humor puede ser una forma efectiva de distraer y aliviar la tensión.

8. Proporcionar un espacio seguro: Si la persona camina incesantemente, asegurarse de que haya un espacio seguro y cómodo para hacerlo.

9. Usar distracciones: La música, el canto o el baile pueden ser distracciones efectivas para calmar a la persona.

10. Pedir ayuda: No dude en pedir ayuda a otros cuidadores o profesionales de la salud cuando sea necesario.

La comprensión y la empatía son fundamentales para enfrentar los desafíos de cuidar a una persona con Alzheimer. Reconocer que los cambios en la personalidad y el comportamiento son resultado de la enfermedad y no de una elección consciente de la persona afectada puede ayudar a los cuidadores a brindar el apoyo necesario mientras mantienen la dignidad y el respeto de sus seres queridos.

La comprensión de los factores que contribuyen a estos cambios y la aplicación de enfoques de cuidado adecuados pueden mejorar la calidad de vida tanto de la persona con Alzheimer como de sus seres queridos. Siempre se recomienda consultar a un profesional de la salud para obtener orientación y apoyo específicos para su situación.

Referencias:

National Institute on Aging, https://www.nia.nih.gov/ health information - Alzheimer.

Biblioteca Nacional de Medicina, https://medlineplus.gov/spanish/alzheimersdisease.html, MedlinePlus - Temas de salud.

Instituto Nacional sobre el Envejecimiento, https://www.alzheimers.gov/es/como-vivir-demencia/consejos-cuidadores, Alzheimers - Cómo vivir con demencia.