Reforma a la Salud
De aprobarse la reforma, se deteriorarán condiciones laborales del personal de salud, advierte Asociación de Sociedades Científicas
La presidente de la ACSC, Dora Bernal, asegura que el proyecto original planteaba la estructuración de un régimen laboral especial para el Talento Humano en Salud, que fue eliminada a lo largo de los debates realizados.
La noche de este martes fue aprobada la ponencia positiva de la reforma a la salud, que impulsa el Gobierno del presidente Gustavo Petro, en su segundo debate.
Tras cinco horas de deliberación, la bancada del Pacto Histórico —apoyada por el Partido Liberal, las curules de paz, un sector del Partido de la U y otro de la Alianza Verde— consiguió primero denegar una propuesta de aplazamiento formulada por la oposición, y luego la aprobación del informe positivo de la ponencia para el segundo debate, con 93 votos. Y superó así ampliamente los 43 votos de la oposición.
Pero, lo que para el Gobierno nacional representa un avance en aras de sacar adelante la polémica reforma, que transformaría radicalmente el actual sistema de salud, varios gremios siguen mostrando su preocupación sobre los impactos que la misma puede conllevar.
En ese sentido, la Asociación Colombiana de Sociedades Científicas, ACSC, que agrupa a 69 especialidades médicas, advierte que de aprobarse el articulado de reforma a la salud, tal y como está planteado en el Congreso, seguirá deteriorándose la calidad laboral del talento humando en salud, sometido a riesgos de subcontratación, tercerización indebida, demora en el pago y remuneraciones injustas, entre otros factores.
“Seguimos siendo los últimos en la cadena, pero los que sostenemos el sistema”, señaló la presidente de la ACSC, Dora Bernal, tras recordar que el proyecto original planteaba la estructuración de un régimen laboral especial para el Talento Humano en Salud (THS), iniciativa que fue eliminada a lo largo de los debates realizados.
“Hemos estado excluidos en la elaboración de los proyectos, solo nos invitan a foros para saber nuestra postura, pero nuestros aportes en su mayoría no han sido tenidos en cuenta. La relación entre el THS y el usuario de los servicios debe ser un encuentro, un diálogo entre voluntades libres, con un mismo objetivo, no una relación meramente técnica y reparadora”, sostuvo Bernal.
Y agregó que el THS, como actor esencial del sistema, requiere las garantías que le permitan el desarrollo pleno de la autonomía profesional y la consiguiente autorregulación, con condiciones dignas de trabajo y una contratación que promueva y facilite la calidad de la prestación del servicio de salud a la población, incentivando el desarrollo integral, personal y colectivo de todo el THS, así como las posibilidades de formación accesible, equitativa y de calidad.
La Ley Estatutaria 1715 del 2015 por medio de la cual se regula el derecho fundamental de la salud en el artículo 18 reconoce la protección de los derechos del THS. Sin embargo, puntualizó la líder gremial, esta norma no se ha desarrollado, razón por la cual “se debe hacer un seguimiento a la evolución normativa”.
La ACSC en mesa de trabajo con otras agremiaciones del sector elaboró en mayo de 2021 un documento denominado ‘Propuesta de política gremial sobre el desarrollo integral del talento humano en salud’, que contiene recomendaciones para ser tenidas en cuenta por los legisladores a la hora de tomar decisiones.
Dicho documento contiene varias propuestas claves:
- Establecer un régimen o estatuto de trabajo que garantice la dignificación y cualificación de empleos y condiciones laborales necesarias que estimulen la excelencia en la prestación de los servicios.
- Contar con contratos individuales y colectivos para el personal que prestará los servicios de salud, que se equiparen mínimamente con los requisitos y prerrogativas expresadas en el Código Sustantivo del Trabajo o en las normas que rigen el servicio público.
- Para algunas profesiones, especialidades y supra especialidades minoritarias, dada sus condiciones especiales de trabajo, se deberá continuar la contratación a través de ordenes de prestación de servicios, siempre ajustadas a los casos en que la normativa lo permita.
- Considerar la contratación de personal de salud a través de las redes establecidas como entidades jurídicas con salarios y remuneraciones justos, oportunos y diferenciados.
- Desarrollar estímulos laborales que contemplen remuneraciones diferenciadas acordes con el grado de capacitación, actualización, adquisición de nuevas habilidades y de nuevas competencias, adquiridas durante el ejercicio en la vida laboral en pro de la excelencia en el ejercicio.
- Establecer condiciones de trabajo que contemplen la prevención y protección contra la violencia y las agresiones a la misión médica y al talento humano en ejercicio.
- Garantizar un pago oportuno, intereses de mora y habilitación de las entidades contratantes.
- Realizar una distribución justa de la educación para la necesaria formación de los trabajadores de salud.
- La política de suficiencia y calidad del THS con una adecuada distribución, debe estar atada a la política de conformación y desarrollo de las redes de atención en los territorios, desde el nivel primario, hasta los servicios más especializados, y no sólo para contar con el personal que sea necesario, sino también para abrir las puertas del sistema a los aspirantes nativos de las regiones que anhelen educarse para servir al cuidado de la salud de los suyos.
- Corregir gradualmente desigualdades entre la educación pública y la privada en salud, y garantizar la oportunidad de todos los jóvenes que deseen servir al sistema.
- Impulsar el desarrollo profesional permanente (formación durante el ejercicio profesional), para actualizar conocimientos, adquirir nuevas habilidades y competencias en nuevas tecnologías, entendido como su derecho y a la vez la obligación de capacitarse.
- Reestructurar los artículos que tratan de autonomía y autorregulación, iniciando por la definición de estos términos ya que el proyecto no los define y, luego definir cómo se podrán ejercer y los mecanismos requeridos para que puedan ser una realidad. Esto debe ir encadenado con el modelo de sistema que se plantea, articulado con la Atención Primaria en Salud como eje del modelo, y con las redes integrales e integradas como puente en la prestación de servicio.
- Crear comités de autorregulación de las Redes Integrales del Servicios de Salud (RISS) cuya principal función será garantizar la autonomía profesional, y que estén integrados por pares de cada red. Poner como garantes de esos comités a las sociedades científicas y a los colegios profesionales.
- Establecer un examen único nacional para el ingreso a la formación de especialistas profesionales en salud, con el fin de garantizar la equidad y el ingreso de los mejores médicos y profesionales generales de la salud a los programas de formación de especialistas.
- Definir estándares mínimos del personal de salud indispensables, por servicio, institución y territorio para la planeación de la cantidad de profesionales formados, que incluya médicos generales y especialistas, técnicos, tecnólogos y trabajadores de base que se requieran.