Crisis de la salud
“El Gobierno les miente a los enfermos del país”: líder de Pacientes Colombia explica los motivos del plantón de este martes en MinSalud
“El ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, está más preocupado por ser activista que por la vida de millones de pacientes; está haciendo campaña política para 2026″, asegura en entrevista con SEMANA, Denis Silva, director de Pacientes Colombia.
Este martes, 20 de febrero, frente a las instalaciones del Ministerio de Salud, en Bogotá, tendrá lugar un plantón promovido por pacientes con distintas enfermedades, algunas de ellas catastróficas, que buscan hacer sentir su voz en medio de la grave crisis que atraviesa el sistema de salud en el país.
En diálogo con SEMANA, Denis Silva, director del movimiento Pacientes Colombia, explica que se vieron obligados a salir a las calles, toda vez que el Gobierno les ha negado su participación en la discusión de la controvertida reforma a la salud que se impulsa en el Congreso.
Pacientes Colombia está integrada por 198 organizaciones, de la que hacen parte enfermos con cáncer, VIH, de enfermedades autoinmunes, diabetes y cardiopatías, en su mayoría de alto costo. En total, suman unos 17 millones de pacientes.
Tras el plantón, dice Silva, la organización entregará dos documentos: uno al MinSalud y otro a la Comisión VII del Senado, a la congresista Martha Peralta, donde solicitan que los pacientes puedan participar de las audiencias públicas sobre el sistema de salud que se están haciendo en distintas ciudades.
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“Hemos tratado de participar, pero este Gobierno no garantiza la pluralidad en la discusión de la reforma a la salud, que tiene en vilo el tratamiento y la salud de millones de colombianos”, relata Silva.
SEMANA: ¿Cuáles son las motivaciones de este plantón?
Denis Silva (D. S.): Por un lado, la crisis financiera del sistema. Están los presupuestos máximos. Antes se invirtieron unos 2,7 billones de pesos y este año, según el Gobierno, el presupuesto son 315 mil millones inicialmente y lo máximo llegará a 630 mil millones. Eso es 1,8 billones de pesos menos, por lo que la vida de millones de pacientes se verá seriamente afectada. Si los usuarios tienen que pagar los tratamientos de su cuenta, se arruinan. Además, está el mal cálculo que se hizo de la UPC; MinSalud dice que la plata es insuficiente, que no hay nada qué hacer. Otra motivación es la mala prestación de servicios, pues la Adres, justamente, no ha girado lo que corresponde de presupuestos máximos. Pareciera que las EPS se rindieron, tiraron la toalla, y eso mismo es lo que va a pasar con la reforma cuando las EPS sean gestoras. Entonces, lo que está sucediendo es que prestan servicios hasta donde la plata les alcanza. Por eso, el plantón: como no nos escucharon, nos vamos a la calle.
#NuestraSaludEstaEnJuego
— Pacientes Colombia (@Pacientesco) February 18, 2024
3 temas
1) Crisis financiera la salud, arruinará a los pacientes
2) hay CAOS y @petrogustavo de viaje por las estrellas
3) Reforma a la salud?
NOS VAMOS DE PLANTÓN
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SEMANA: ¿Han buscado diálogo directo con el Gobierno?
D. S.: Hemos tratado por todos los medios de decirle al ministro cuáles son nuestros planteamientos. Antes de que este Gobierno llegara, teníamos agenda cada dos meses con ministro y viceministro de salud. Varias mesas de discusión y un observatorio de presupuestos máximos. Todo se acabó desde que llegó Carolina Corcho. Además, cerró esos espacios de discusión, nos colocó un inri y nos matriculó en la derecha y la oposición.
SEMANA: ¿Cómo se rompió esa comunicación con el MinSalud?
D. S.: Cuando llegó Corcho a MinSalud sacó a 163 trabajadores. Eso nos afectó porque con esos cargos directivos desarrollábamos mesas de enfermedades no transmisibles, de cáncer, huérfanas. Cuando comenzamos a levantar la voz y mostrar nuestro desacuerdo con las decisiones del ministerio y dábamos nuestras razones, Corcho fue cerrando puertas. La única reunión que tuvimos con ella fue en octubre de 2022. Nos dijo que debíamos confiar en el ministerio. ¿Y dónde queda la participación?, le respondimos. Con otros ministros como Alejandro Gaviria tuvimos diferencias enormes, pero él nunca cerró el diálogo. Con Corcho, aquel que pensaba distinto, automáticamente pasó a ser su enemigo.
SEMANA: ¿Sabe si ha pasado lo mismo con otras organizaciones de pacientes?
D. S.: Este Gobierno lo que ha hecho es validar ciertas voces. A la Organización Defensa del Paciente, que sí le gusta la reforma a la salud, sí la han escuchado. Ha buscado organizaciones que le validen su propuesta, que tengan una línea progobierno. Se olvidan de que el rol de la sociedad civil no es ser amigo o enemigo del Gobierno. Es acompañar las buenas acciones, denunciar lo malo y tener posturas independientes.
SEMANA: ¿Qué pasó con el proyecto de ley con el que ustedes buscaban introducir cambios en el sistema de salud?
D. S.: Nosotros presentamos el proyecto de ley, el 341, pero Agmeth Escaf lo archivó y no le dio trámite en el Congreso. Presentábamos un modelo de atención en salud para la población que vive en la Colombia olvidada, coincidimos con el Gobierno en el giro directo y también hablábamos de gestoras de salud, pero con reglas distintas a las que se plantean hoy. Nos proponíamos tener aseguramiento y también formalización del talento humano en salud, que se les pague lo justo para que presten mejor servicio. Proponíamos un Adres distinto, una entidad que se politizó con la llegada de Félix Martínez, que cree que una línea ideológica hará más efectiva la salud. En el sector salud nombran a cualquiera, sin importar si es idóneo.
SEMANA: ¿Con tantas propuestas, buscaron participar de la construcción de la reforma?
D. S.: Nosotros queremos un cambio, pero cuando le propusimos a Carolina Corcho participar de esa construcción, dijo que era imposible porque ya estaba hecha y no podía participar ninguno que no fuera de la línea de Gobierno. Decía que la construyeron expertos en salud, pero un experto no puede basarse en una línea ideológica.
SEMANA: Se habla mucho de la explosión controlada del sistema. ¿Sienten ustedes que el Gobierno quiere debilitarlo para justificar la reforma?
D. S.: Ya estamos viviendo esa explosión. En tres niveles: en presupuestos máximos pues el Gobierno sabe que las poblaciones más sensibles, adultos mayores, niños, personas con enfermedades crónicas, no pueden ser atendidas solo con 630 mil millones de pesos para 2020. Y, claro, se aumentan reclamos de usuarios al interior de la Superintendencia, para luego decir que las EPS son malas, no pudieron administrar el riesgo financiero y los pacientes están sin tratamiento. La Supersalud no especifica en qué EPS están las quejas, cuando se trata principalmente de Savia Salud, Famisanar, Asmesalud y Ensanar, hoy intervenidas, y las que más barreras administrativas les generan a los usuarios. Con el tema de la insuficiencia de la UPC es exactamente lo mismo: dice el Gobierno que las EPS no están cumpliendo, y estas no le pagan a la red, no se prestan los servicios de salud. El rector del sistema, MinSalud, está induciendo cada vez más y más esa explosión.
SEMANA: En materia de atención, ¿cómo se han visto afectados los pacientes?
D. S.: Tres cosas: en Colombia no niegan servicios, pero se dilata la prestación de los mismos. Hoy, en la mayoría de casos, la agenda con los médicos pasó de un mes a 90 días porque a las IPS no les alcanza la plata. Si es un paciente crónico, no le dan medicamentos mes a mes, sino que le aplican un pico y placa: un mes le dan al uno, al siguiente, al otro. Se aumentó el gasto de bolsillo de miles de pacientes que con mayor frecuencia deben ir a pelear con el uno y con el otro y hasta comprar los medicamentos por su cuenta. Los que no tienen con qué, suspenden tratamientos. Otro grave problema es la incertidumbre que se genera en los pacientes. “Qué va pasar con mi tratamiento de cáncer”, se preguntan muchos. “Quién me va a cubrir, no tengo plata”. Eso está afectando su salud mental. Y todo esto en medio de lo que pasa con Adres, que no ha girado lo de diciembre, enero y febrero, pese a que la Corte le dio 10 días. No se les ha dado la gana. Y se la pasan diciendo que están al día. Se volvieron tan mentirosos, que se creen sus propias mentiras. Le mienten a los pacientes.
SEMANA: Mientras tanto, en las últimas semanas, el ministro de Salud ha arreciado en sus ataques a las EPS…
D. S.: Todos los días el ministro Guillermo Jaramillo sale con temas descabellados. Uno sabe si es que tiene un problema mental de base: decir por ejemplo que las vacunas no son necesarias; después, dejar vencer seis millones de dosis y luego, para que no le den palo, aumentar el uso de vida de las vacunas, cuando la vida útil de un fármaco no se aumenta por decreto. Y no ha sido solo este ministro. Carolina Corcho dijo en la Academia de Medicina que los médicos eran responsables de la crisis porque formulaban de todo. Jaramillo agrega que a los médicos los están formando mal. Y debe ser verdad desde que él, que es médico, ya no ejerce. El ministro de Salud se volvió un activista, haciendo campaña política para 2026 con la estrategia del miedo, de que es el salvador, está más preocupado por eso que por la salud de los pacientes. En muchos círculos se comenta que Jaramillo va por la presidencia y Corcho por la vicepresidencia.
SEMANA: A usted el Gobierno lo ha matriculado en la derecha y la oposición. ¿Usted tiene algún interés político?
D. S.: Siempre he sido un hombre de izquierda. Y desafortunadamente voté por Gustavo Petro.
SEMANA: ¿Se arrepiente de ese voto?
D. S.: Al mil por ciento. Si se devolviera el tiempo, jamás lo haría.
SEMANA: Pero, cuando Petro estaba en campaña, ya hablaba de una reforma a la salud, ¿qué expectativa tenía usted entonces?
D. S.: En época de campaña, Pacientes Colombia se reunió con Jaime Urrego, actual viceministro de salud, parte de la campaña de Petro, y con representantes de otros candidatos para tener el panorama completo y así votar dentro del movimiento. A Urrego le preguntamos si se acabarían las EPS y dijo que no, que se fortalecería lo que ya había del sistema. Confiamos en él porque es un salubrista. Luego, cuando le propusimos a Carolina Corcho participar de la construcción de la reforma, dijo que era imposible pues ya la reforma estaba hecha; no podía participar ninguno que no fuera de la línea de gobierno. Decía que la construyeron con expertos en salud y un experto en salud no puede tener una línea ideológica.