Medicamentos
El medicamento para la diabetes que se usa para adelgazar y se compra masivamente en Europa
Varios famosos han pagado fuertes sumas para usarlo y la cantidad de la demanda ha hecho que empieza a bajar su disponibilidad.
Bajar de peso es una de las preocupaciones estéticas más importantes para millones de personas. Por eso, hay todo un mercado de fármacos, dietas, tés, suplementos y tratamientos de todo tipo que prometen precisamente eso: disminuir el número de kilos de los consumidores.
Sin embargo, se trata de una promesa que generalmente no se cumple sin la ayuda de otros factores, como una alimentación sana y una actividad física constante. De hecho, el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) ha emitido varias alertas sanitarias sobre productos para adelgazar que no tienen ninguna clase de registro y, por lo tanto, no han podido demostrar sus capacidades milagrosas para hacer que los consumidores bajen de peso.
Una de las últimas alertas en este sentido fue publicada en noviembre pasado, cuando el Invima advirtió que un producto llamado Lipofiber Batido Verde no tenía autorización para ser comercializado en Colombia, pese a que se vendía en portales web y redes sociales.
Sin embargo, en los últimos meses se ha vuelto popular un medicamento que sí ha demostrado resultados para adelgazar en algunos países.
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Es conocido como Ozempic, en la actualidad es producido por la casa farmacéutica Novo Nordisk de Dinamarca. Originalmente se usa para tratar a los pacientes que han sido diagnosticados con diabetes tipo 2. También se comercializa bajo el nombre de Wegovy, que se usa para combatir la obesidad.
Su principio activo es la semaglutida y ha mostrado un buen desempeño para reducir el peso de los pacientes. De hecho, en noviembre se conoció que el Instituto Nacional para la Excelencia en Salud y Atención británico (NICE, por sus siglas en inglés) llevó a cabo un estudio en el cual encontró que, en efecto, el Wegovy podía ser útil para combatir la obesidad.
De hecho, los resultados mostraron que, en promedio, los pacientes bajaron su peso en un 12 % después de que duraran 68 semanas seguidas recibiendo este medicamento. Pese a todo, las autoridades sanitarias británicas indicaron que el medicamento solo podría suministrarse bajo la fórmula de un médico.
En Estados Unidos, mientras tanto, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) ya le dio autorización al medicamento para ser comercializado. Pero solo está indicado para tratar la diabetes tipo 2, no para bajar de peso.
Pese a todo, el fármaco también ha cobrado relevancia porque los famosos han empezado a comprarlo. “En cuestión de meses, se ha convertido en el secreto peor guardado de Hollywood, especialmente dado que sus usuarios más entusiastas no son prediabéticos y no requieren la droga”, indicó la Revista Variety en una publicación reciente.
A su vez, el magnate Elon Musk ha confesado a través de su propia cuenta de Twitter que ya ha usado el medicamento para mantener su peso.
Hay demasiada demanda en Europa
El medicamento inyectable ha sido un rotundo éxito en Europa, donde ha causado furor entre los pacientes. Según el medio español La Vanguardia, que cita a “fuentes solventes”, sus ventas se han disparado hasta un 6.000 % en los últimos meses.
Tan común se ha vuelto en las recetas de clínicas privadas para perder peso, que la disponibilidad se ha vuelto “intermitente”, debido a que la demanda no ha sido cubierta con el inventario que llega a países como España, según ha establecido el medio citado.
También señalaron que, de acuerdo con fuentes de la propia farmacéutica Novo Nordisk, el medicamento ha presentado una demanda superior a las proyecciones que habían hecho inicialmente.
“Entendemos y comprendemos la incertidumbre y la preocupación que esta circunstancia está provocando entre la comunidad de diabetes. Nuestra prioridad es seguir trabajando con todas nuestras fuerzas para resolver esta situación que nos está impactando de forma temporal”, señaló la farmacéutica, citada por La Vanguardia.
En países como Colombia también es posible adquirir este producto, aunque tiene un costo alto (alrededor de $250.000 por caja) y su disponibilidad también es intermitente. La recomendación de los expertos es que siempre se consuma bajo fórmula médica, pues tiene algunos efectos secundarios que están indicados en la propia página oficial del fármaco. Entre otros están las náuseas, diarrea, vómitos, estreñimiento y dolor abdominal.