Salud
El reto del sistema de salud incluye la infraestructura
La sostenibilidad ambiental debe ir mancomunadamente con los avances en la salud.
La manera en la que opera el Sistema de Salud en Colombia se lleva elogios de muchos personajes en el mundo, pero también críticas de los nacionales, pacientes y usuarios del mismo, por la manera en que se administran los recursos de toda índole.
Entre esto, se encuentra la responsabilidad ambiental, que en algunos centros de salud de Colombia brilla por su ausencia. Más aún, teniendo en cuenta que los hospitales consumen mucha energía debido a que sus servicios la necesitan en un 100 % constantemente, por la demanda de pacientes.
En ese sentido, los desperdicios en el manejo de energía, si bien son causados por su loable labor de salvar vidas, se enfrentan con la intención, al impedir que se haga un manejo energético eficiente y que permita mitigar los efectos del cambio climático en la salud de sus pacientes.
Dicho eje hace parte del diálogo que se realizará en el V Congreso Infraestructura Sostenible: Trabajando por un Mejor Ambiente Hospitalario, que será realizado por la Fundación Santa Fe de Bogotá este martes 26 y miércoles 27 de septiembre.
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Allí, varios actores del sector salud hablarán de sus esfuerzos para hacer que los hospitales y centros médicos cuenten con herramientas para hacer su consumo de energía más eficiente y económico.
La necesidad de que los centros médicos se enfoquen en su sostenibilidad se hace evidente al analizar la capacidad de un hospital para consumir energía. Los procesos médicos necesarios para mantener ambientes seguros en calidad de aire, desinfección, manejo de gases como oxígeno, nitrógeno y gases anestésicos, instrumentación y procesos de internación tienen exigencias fuertes que requieren un gran consumo de energía.
Por su parte, Elikarla Cones, gerente de Energymed, indicó: “Un hospital de cuarto nivel puede consumir en un mes 821.735 kilovatios-hora. Este es el mismo consumo de un pueblo de unos 3.000 habitantes, lo que hace que esas eficiencias sean importantes para disminuir las cargas al sistema eléctrico y la generación de gases de efecto invernadero”. Así las cosas, las ciudades donde se registra un mayor consumo de energía en el sector salud son Bogotá, Cali y Barranquilla.
Los hospitales de cuarto nivel son “establecimientos de salud de complejidad alta con infraestructura y personal capacitado para brindar atenciones complejas a los pacientes”, según el portal ‘Recavar’.
Gerónimo Arrieta, líder del segmento Healthcare para el clúster andino en Schneider Electric, explica que, “si no logramos consolidar una convergencia en donde las diferentes áreas al interior de hospitales y clínicas se comuniquen con los encargados de su infraestructura y que esta a su vez se comunique con los procesos clínicos, no va a ser posible que se destaquen a futuro estas entidades, pues con el aumento en la conexión de dispositivos tecnológicos y el almacenamiento de datos que estamos recopilando, ya estamos presenciando algunas crisis que afectan su operación”.
Por lo que asegura que es indispensable “tomar conciencia sobre la importancia de la infraestructura hospitalaria y cómo esta impacta de manera directa la seguridad y la satisfacción de los pacientes, así como también la continuidad de las labores”.
“Para ello será fundamental la implementación de soluciones tecnológicas basadas en el IoT (internet de las cosas, es decir, automatizar funciones), la inteligencia artificial y la realidad aumentada que no están distantes a nuestra realidad y que ya vemos ligadas a procedimientos asistenciales como, por ejemplo, la TeleSalud”, concluye.
Ante este panorama, es vital que se tomen las medidas necesarias para que se puedan seguir prestando los servicios de salud de manera eficiente y que estos sean sostenibles.