Salud
Estos alimentos podrían causar cáncer según la Organización Mundial de la Salud
El cáncer es una de las enfermedades que más causa muertes al año en humanos.
Una de las enfermedades a la que las personas le tienen más temor es al cáncer. Una condición la cual puede dejar secuelas en la vida de una persona y en otros casos causar la muerte, es una enfermedad que no distingue edad, nacionalidad ni género. Desde la piel hasta el cerebro, el cáncer puede desarrollarse en cualquier tejido del cuerpo por lo que la detección temprana es indispensable para realizar el tratamiento que se considere pertinente.
La Organización Mundial de la Salud a través de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer ha sido la encargada de clasificar algunos elementos, ingredientes y grupos de riesgo como agentes cancerígenos en cuatro grupos (uno de ellos subdividido):
- Grupo 1: Procesos industriales y compuestos químicos.
- Grupo 2: Productos clasificados como posibles cancerígenos para el ser humano, subdividido en alta y baja probabilidad cancerígena.
- Grupo 3: Productos que no pueden considerarse cancerígenos.
- Grupo 4: Productos que probablemente no son causa de cáncer.
¿Cuáles alimentos o productos podrían ser cancerígenos?
Gracias a la investigación de un grupo de científicos en Francia se llegó a la conclusión de que los alimentos procesados pueden generar cáncer, aunque no se ha podido llegar a la conclusión si el causante de este riesgo es el plástico, la combinación o el sellado. No obstante, el portal Natural News ha publicado una lista de cinco alimentos que pueden producir cáncer:
- Los alimentos procesados: De entrada se identifican que los alimentos procesados son cualquier tipo de producto que pasa por una cadena de producción con el objetivo de facilitar la vida de una persona. Algunos de estos productos pueden ser hortalizas ya listas para consumir, alimentos congelados y conservados, frutos secos sin cáscaras, colorantes, embutidos, saborizantes y alimentos precocidos. Todos estos productos al contener altos contenidos de grasas y sales pueden provocar diabetes y obesidad
- Carnes procesadas: De acuerdo a la OMS, estas carnes se clasifican como “carcinogénica para humanos”, en donde existen más de cien productos de este tipo que pueden generar cáncer en el cuerpo, en especial de estómago y de colon. El Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) también ha aseverado que estas carnes pueden generar cáncer junto con otras enfermedades. A pesar de que la OMS no ha establecido la dosis exacta de carne que pudiese producir cáncer, ha aconsejado limitar su consumo. Este tipo de producto es el que más genera preocupación por la cantidad de químicos que se utilizan para su producción.
- Azúcar refinada: El consumo excesivo de este tipo de azúcar no solo podría generar cáncer, sino también obesidad, diabetes, problemas en varios órganos del cuerpo e incluso depresión e hiperactividad. Se ha aconsejado reemplazar este tipo de azúcar por la morena, o también por endulzantes naturales no procesados.
- Palomitas de maíz de microondas: La facilidad con la que se prepara suele ser un buen anzuelo para los consumidores. No obstante, los compuestos químicos que tiene este producto están vinculados a diversos tipos de cáncer además de que podría generar infertilidad. En los niños puede causar dermatitis, alergias, asma y mareos.
- Harina blanca refinada: A pesar de que existen harinas de maíz y trigo, no significa que la composición pueda ser alterada. La harina blanca es la más utilizada y la que se considera como la más dañina para la salud ya que este producto se somete a un proceso industrial en donde se crean partículas más pequeñas por lo que se eliminan los compontes principales de la harina como el germen y el salvado. Este tipo de harina se considera maligna para el cuerpo ya que puede provocar diabetes, enfermedades cardiovasculares y cáncer, por lo que se aconseja recurrir a harinas integrales o granos enteros ya que concentran bajos índices glucémicos y buena cantidad de fibra, lo que aporta a la correcta absorción de azúcares y grasas en el cuerpo.