Salud

Las empresas productoras del 80 % de medicamentos que se consumen en el país, están afectadas por el precio del dólar y piden más apoyo del gobierno

En entrevista con SEMANA explicaron si están o no trabajando a pérdida, lo que ha sucedido con el desabastecimiento de medicamentos, la importancia del sector para el país y la educación sobre los genéricos.

Semana
11 de noviembre de 2022
Medicamentos
Medicamentos | Foto: Getty Images

Desde el otro lado de la pantalla, Clara Rodríguez, haciendo honor a su nombre, expresa que 8 de cada 10 medicamentos que circulan en el país, son producidos por la industria nacional, pero solamente el 33% de la ganancia que se genera, les queda a ellos.

“19 billones cuesta el mercado farmacéutico del país. Cerca de 1.300 millones de unidades entre todos los medicamentos se ponen en el mercado. La industria local, representada hoy en 104 plantas farmacéuticas, coloca el 80% de las unidades que se consumen dentro del sistema…en una clínica, en una farmacia del barrio, lo que entrega la EPS. Y si bien de esos 19 billones de pesos la industria coloca el 80%, sólo percibe el 33% de los valores. Esto significa, que el otro 20% de unidades, que son las que se importan, cuestan el 66% de los valores…tenemos que hacer muchas unidades, con precios muy ajustados y somos un regulador del sistema de salud, un regulador natural del precio, que permite esa sostenibilidad del sistema”, sostiene la directora ejecutiva de la Asociación Colombiana de la Industria Farmacéutica, (Ascif).

Adiciona, en otra parte de la conversación, que hace 30 años habían más de 200 plantas y actualmente hay 104. “Lógicamente el tema de la regulación, de los requisitos y las inversiones, hizo que muchos desistieran de seguir fabricando. Pero los que hoy están en el país, son una clara garantía de la calidad de los medicamentos que se fabrican”.

Clara Rodríguez, directora ejecutiva de la Asociación Colombiana de la Industria Farmacéutica, (Ascif).
Clara Rodríguez, directora ejecutiva de la Asociación Colombiana de la Industria Farmacéutica, (Ascif). | Foto: Asociación Colombiana de la Industria Farmacéutica, (Ascif).

Afectación del alza del dólar

Fabricar una ampolla, compuesta del principio activo que puede ser un antibiótico, un analgésico, un antiinflamatorio o un medicamento que sea inyectable, tiene un costo que se paga en dólares. Porque la materia prima se importa. Adicional, está el envase primario. El vidrio que contiene la ampolla, no es un vidrio cualquiera, y también se trae desde el exterior. Asimismo, la a ampolla se empaca en una caja, que normalmente viene con un inserto, que es un pequeño papel con la indicaciones y contraindicaciones y forma de utilización del producto.

“Es posible que dentro del sistema el precio para la compra de una ampolla esté sobre los $1.800 y solo el envase cuesta $1.500 pesos…De ahí en adelante no cabe mayor discusión sobre qué es lo que viene pasando”, sentencia Rodríguez.

Por eso surge la duda de si se traba a pérdida, pero la directora no esta de acuerdo con esa lectura. “Sería un poco temerario decir que estamos trabajando a pérdida, porque tampoco se da con todos los medicamentos...Hacer esa afirmación podría ser exagerado, pero sí en algunos casos es bastante complejo entrar a cumplir con el precio y abastecer el mercado”.

Y en este punto señala que la regulación de precios que existe en Colombia, ha bloqueado la posibilidad de aumentar el precio de los medicamentos al ritmo del incremento en el costo de producción, muy relacionado con el precio del dólar. Esto, nuevamente, afecta las ganancias.

“Ese margen disminuye de una manera muy importante, porque hoy en Colombia existen aproximadamente 2.500 productos con una regulación de precios, esto quiere decir que dentro del sistema hay un techo que está establecido por el gobierno, para que se puedan comprar los medicamentos que se dan dentro del sistema de salud. No hay un margen de negociación suficiente, porque la cadena no está compuesta solamente por el fabricante, que son los laboratorios que están en nuestra asociación, sino que hay en la mitad, un gestor farmacéutico, que tiene la labor de distribuir, de comercializar, que participa en muchas contrataciones que hacen las diferentes EPS, hospitales y clínicas”.

Cuenta que regular los precios, fue una decisión del gobierno que lleva varios años. “En muchos aspectos fue acertada, porque existía una situación de fuga de recursos muy fuerte, por el precio desmesurado de ciertos medicamentos que son básicamente importados, pero ahí entraron prácticamente todos los medicamentos. Se hizo una determinación de precios basada en unos mercados internacionales que hoy no se compadece con lo que nos está costando fabricar un medicamento en Colombia”.

En ese sentido, ahí es donde viene una de las peticiones al gobierno nacional. “No podemos bajo ninguna circunstancia, cambiarle la calidad a la materia prima, no podemos cambiar ningún procedimiento que asegure esa calidad del producto, entonces seguimos trabajando de manera muy esforzada, colocando esos medicamentos, pero si tenemos que pedirle al gobierno para dinamizar el control de precios, no para desregularizar esta política que el gobierno en buen momento la hizo, sino que busquemos cómo hacerla un poco más ajustada a nuestra realidad...hoy estamos teniendo una serie de circunstancias que cambian el panorama para poder fabricar y abastecer todos los medicamentos”, concluye la especialista en administración de servicios de salud.