Salud
Los cinco beneficios desconocidos del ejercicio físico para la salud mental
Mantenerse activo no solo es bueno para los músculos y los huesos, sino que ayuda a reducir el riesgo de padecer algunos trastornos de orden psicológico.
Con frecuencia se habla del efecto que tiene el ejercicio físico para reducir padecimientos como la obesidad o las enfermedades del corazón, pero lo cierto es que también puede ser de gran provecho para la salud mental. Así lo han señalado fuentes de información sanitaria de alta calidad como la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“La OMS define la actividad física como cualquier movimiento corporal producido por los músculos esqueléticos, con el consiguiente consumo de energía. La actividad física hace referencia a todo movimiento, incluso durante el tiempo de ocio, para desplazarse a determinados lugares y desde ellos, o como parte del trabajo de una persona. La actividad física, tanto moderada como intensa, mejora la salud”, ha señalado el organismo sanitario multilateral en su página web oficial.
En ese mismo sentido también se ha pronunciado la Clínica Mayo, una institución médica de Estados Unidos, que cita varios beneficios que tiene la actividad física regular en la salud mental.
Para empezar, advierte que hacer ejercicios físicos tiene un efecto positivo en el estado de ánimo. “¿Necesitas un estímulo emocional? ¿O necesitas relajarte después de un día estresante? Una sesión de gimnasia o una caminata rápida pueden ayudar. La actividad física estimula varias sustancias químicas cerebrales que pueden hacer que te sientas más feliz, más relajado y menos ansioso”, advierte la Clínica Mayo.
Tendencias
Además, señala que en algunas ocasiones las personas podrían sentir que su autoestima se eleva, pues empiezan a percibir mejor su propio aspecto y, con ello, aumentar la confianza en sí mismas.
En segunda medida, la institución médica hace referencia al impacto positivo que tiene el ejercicio en el nivel de energía de las personas y en la posibilidad de mitigar síntomas propios de algunos trastornos mentales.
“Hacer algo positivo para controlar la ansiedad o la depresión es una estrategia sana de afrontamiento. Tratar de sentirte mejor bebiendo alcohol, obsesionarte con lo mal que te sientes o esperar que la depresión o la ansiedad desaparezcan por sí solas puede empeorar los síntomas”, explica la Clínica Mayo.
También es importante tener en cuenta que hacer ejercicio es bueno para la libido. Esto está estrechamente relacionado con el punto anterior, pues la energía aumenta y el deseo sexual también.
“La actividad física regular quizás mejore la excitación sexual para las mujeres. Y los hombres que hacen ejercicio regularmente son menos propensos a tener problemas con la disfunción eréctil que los hombres que no hacen ejercicio”, detalla la Clínica Mayo.
En cuarto lugar, esa institución se refiere a los efectos que tiene el ejercicio en el sueño, una necesidad que está estrechamente relacionada con el buen estado de la salud mental.
“La actividad física regular puede ayudarte a quedarte dormido más rápido, a dormir mejor y más profundamente. Simplemente no hagas ejercicio demasiado cerca de la hora de acostarte, porque podrías tener demasiada energía como para irte a dormir”, puntualiza la Clínica Mayo.
En última instancia es fundamental tener en cuenta que el ejercicio puede ser una actividad social útil para fortalecer los lazos con amigos y familiares. Practicar un deporte colectivo no solo favorece el estado de salud físico, sino que también puede ayudar a mejorar las habilidades de comunicación, la asertividad y la empatía.
Si los deportes no son el fuerte de las personas, la Clínica Mayo también aconseja practicar otras actividades como tomar clases de baile, hacer rutas de senderismo en grupo o acudir a un gimnasio en compañía.
“Busca una actividad física que disfrutes y hazla. ¿Sentías aburrimiento? Prueba algo nuevo o haz algo con amigos o familiares”, concluye la Clínica Mayo.